El futuro es el pasado
domingo 4.nov.2012 por Miguel Castro 4 Comentarios
"El futuro es el pasado", dijo Nacho. Hacía tiempo que no le veía y se me había olvidado lo placentera que podía ser una cena con él. El futuro es el pasado y esto no tiene nada que ver con la última película de ciencia ficción de nuestra cartelera protagonizada por Bruce Willis Joseph Gordon-Levitt y Emily Blunt, Looper. Tiene que ver con la vida de Ignacio, un profesional de la cooperación que ha visto como el Estado ha decidido dejar de invertir en proyectos que constituían su trabajo. La ayuda oficial al desarrollo está hoy en las mismas cifras que en los años ochenta, la diferencia es que durante tres décadas se formaron muchísimos profesionales en una especialidad considerada entonces como prioritaria. Hoy, ya no hay lugar en este país para ellos.
Looper, título fallido pero con
algunas secuencias relevantes, muestra una ciudad del futuro llena de
vagabundos, donde los únicos que van en coches (de lujo) son los asesinos a
sueldo que cometen sus crímenes en el pasado. Si ese es el futuro, uno prefería
detener el tiempo antes de que la cosa se complique aún más. Si detuviéramos el tiempo hoy domingo 4 de noviembre, a las
12:16 de la mañana, las rotativas de los periódicos electrónicos mostrarían estos titulares:
Salvando un par de titulares, se podría constatar que, desde hace décadas, el tiempo se ha detenido en España en los contenidos a debate. Solo el durísimo tema de los desahucios se puede inscribir como una nueva realidad en la fisonomía de nuestro país, una auténtica cicatriz. Y, sin embargo, no es el tema del que más se habla, a pesar de que las cifras son escalofriantes en cualquiera de las comunidades autónomas que forman este país de países, que parece históricamente empeñado en huir hacia adelante intentando resolver problemas menos prioritarios para no enfrentarse a los más acuciantes.
Hannah Arendt es el título de una excelente película que tuve el privilegio de ver en el Festival de Valladolid. Y Hannah Arendt es el nombre también de una pensadora judío alemana que consiguió escapar con vida de su país, en 1941, y afincarse en Estados Unidos, en el momento en que el horror gobernaba Alemania y se revelaba como la cara más aterradora de la condición humana. Arendt se pasó la vida estudiando sobre el origen del mal. Paradójicamente, el esfuerzo que hizo para analizarlo, de forma objetiva, filosóficamente, sin tomar partido, la llevó a ganarse el odio de gran parte de sus compatriotas judíos. El detonante de este odio fue un extenso reportaje para el New Yorker, publicado por Arendt, sobre el juicio al nazi Adolf Eichmann, celebrado en Jerusalén.
Una de las muchas inquietantes secuencias de la película muestra a Arendt paseando por la carretera de un bosque, y un coche se desvía de su trayectoria, amenazándola, parándose a pocos pasos de ella. Del coche se baja un alto cargo israelí con varios guardaespaldas. La conversación es tensa. El alto cargo advierte a Arendt de que debe retractarse de lo que ha escrito y le avisa de que su libro no será publicado nunca en Israel. Ella contesta: "¿Vais a prohibir la publicación de libros?" El alto cargo insiste: “La estoy advirtiendo” Un guardaespaldas impide el paso a Arendt. Ella contesta: “No, no me está advirtiendo, me está amenazando”. Arendt encara al guardaespaldas, que se echa a un lado, y se marcha, continuando su paseo.
Hannah Arendt era una mujer que intentó aprender del pasado analizándolo fríamente, sin pensar en qué era lo que a ella más le interesaba decir en ese momento. Si el tiempo se hubiera detenido hoy domingo, a las 12:16 de la mañana, y tuviésemos un rato para leer la obra de Arendt, tal vez seríamos capaces de aprender a analizar, a discutir, sobre los problemas que amenazan la situación del lugar en el que vivimos, llamémoslo como queramos llamarlo.
De esa discusión, posiblemente saldría la vacuna para evitar el premonitorio futuro que muestra Looper. Bastaría con que nos conformaramos con asumir, como objetivo prioritario común, que el futuro se parezca, un poco, al mejor de los pasados que hemos vivido.
detrasdelatrama@gmail.com
@MiguelCastroU
Olga la apache dijo
El futuro es el pasado , pues esperemos que sea para un buen pasado y no para las malas cosas del pasado.
Jacobeus dijo
El futuro lleva siglos siendo el pasado, un poco maquillado nada mas, pero en esencia ya lo hemos vivido. Es un bucle temporal que proporciona estabilidad y seguridad a la sociedad...
Así que mejor vivamos este presente sea cual sea su realidad, no vaya a ser que un día el futuro sea de verdad el futuro y entonces: PUM¡¡¡
Carmen dijo
Muy mal debemos de estar para querer que el futuro sea el pasado, uhmmmmmmm
Me hace pensar eso que dices, Miguel, de Hannah Arendt, que escribía "filosóficamente sin tomar partido..." y en otra parte añades que escribía objetivamente sin decir "qué era lo que más le interesaba decir en ese momento..."
Muy interesante, "sin tomar partido" y "sin decir lo que más le interesaba". Interesante porque me pregunto: ¿es que alguna vez tanto en el pasado como en el futuro, se ha podido ser neutral en este país???, y vuelvo a preguntar y además de ser neutral ¿se puede no ser interesado??? ¿alguna vez se ha podido decir, tanto en el pasado como en el futuro de ese pasado, en este país, que no se es ni del PP ni del PSOE, sin que te tachen de uno o de otro o de no querer decir de quién realmente eres?, ¡vamos sin que te tachen de mentiroso, de facha o de rojo!!!. Me acabo de enterar de que en este país SÍ se puede ser neutral, es más, se debe de ser neutral!!!, y si he entendido del todo bien, además se debe NO SER INTERESADO. Me estoy riendo, no muy fuerte pero sí riéndome.
Muy mal, debemos de estar para estos o esos pensamientos.
Mi querido Jacobeus estoy de acuerdo contigo en que no hay nada nuevo, bueno casi, bajo el sol, y que, en esencia, ya lo hemos vivido, en lo que no puedo estar de acuerdo es en que proporciona estabilidad y seguridad...???, y sí estoy totalmente contigo en que vivamos el presente, éste, y nos dejemos de demasiados catastrofismos no sea que... VENGA EL LOBO DE VERDAD.
jacobeus dijo
Así es Carmen, aunque la gente no lo sepa..Para mí es algo evidente, sólo cuestión de perspectiva y escala temporal. En cualquier caso es un concepto bastante difícil de explicar en pocas líneas, al margen de que tampoco creo que sea este el sitio para hacerlo.
A ver si nos vemos un día y lo debatimos tranquilamente..