'Sex tape', una novela gráfica sobre mirar y ser mirado

La premisa de Sex Tape (Dib>buks) es tan sencilla como brillante. Mientras millones de ojos se posan sobre ellos, ¿a quiénes miran las estrellas de la música?

Un cómic con un guión extraordinario y un nivel gráfico sobresaliente que narra la historia de Anja una estrella del pop en decadencia (una especie de Britney spears en en horas bajas) que se ha recluído voluntariamente en una mansión de montaña alejada de los fans, las drogas y el sexo fácil para intentar recuperar su vida. Porque a pesar de estar rodeada de millones de personas pendientes del más mínimo de sus movimientos, está muy sola.

En la montaña cuenta con la única compañía de un guardaespaldas que está enamorado de ella y que, un día, sorprende a un tipo que la espía a través del gran ventanal de su casa. Anja quiere que se vaya y… también pide a Gordon que averigúe quién es y qué quiere. Es Will, el dueño del bar del pueblo, que pronto se verá envuelto en un juego caprichoso y obsesivo.

Entonces a Anja se le ocurre un extraño juego. A través de su guardaespaldas ella propone al desconocido que le deja espiarla a cambio de que él le permita instalar una cámara en la televisión de su casa para poder observarle a su vez. (Sigue leyendo)