El museo se convierte en un cómic
miércoles 23.ene.2019 por Jesús Jiménez 0 Comentarios
Entrar al Centro José Guerrero de Granada es como meterse en un cómic, porque las viñetas serpentean por sus paredes y podemos leerlas mientras paseamos. Una novedosa experiencia que sus autores describen como “un cómic expandido” y que está concebido para leerse, únicamente, en las salas del centro. Una idea tan original tenía que partir de dos grandes de nuestro cómic, Max (Barcelona, 1956) y Sergio García (Guadix, 1967), acompañados de la poeta, escritora y teórica del cómic, Ana Merino (Madrid, 1971).
Max nos comenta que: “Paco Baena, el director del Centro quería llevar el cómic al museo, pero haciendo un cómic pensado expresamente para el espacio de ese museo; y que no tenga sentido ni se pueda leer en otro sitio. Y al reunirnos todos surgió la idea de Viñetas desbordadas”.
“Básicamente -continúa Max- Sergio y yo hemos pensado una historia específicamente para el espacio en el que teníamos que intervenir. Por eso no me gusta llamarlo exposición sino intervención. Una intervención que usa el lenguaje del cómic. Cada uno hemos hecho una cosa muy diferente pero ambas encajan de maravilla. Y Ana ha añadido poemas sobre el tema y un texto en el que explica el proceso de este trabajo, que va en el catálogo de la exposición. Un catálogo que no recoge la obra terminada sino el proceso. Porque la obra final solo tiene sentido en el espacio del museo, no en papel. Creo que en España no se ha hecho nada así, usando el espacio como soporte. Es como ampliar una vez más los límites del cómic; esos límites que siempre decimos que no tiene”. (Sigue leyendo las entrevistas con los autores de la exposición Viñetas desbordadas)