« Berlinale 4. | Portada del Blog | Berlinale 6. " Escuchando al juez Garzón " »

Berlinale 5. Gastarbeiter = "trabajador invitado"

EL 10 de septiembre de 1964 llegó a Alemania el emigrante ( Gastarbeiter= trabajador invitado) número un millón. Su nombre era Armando Sa Rodrigues. Un carpintero portugués de 38 años de edad que fué homenajeado oficialmente al llegar a la ciudad de Colonia. El 1.000.001 se llamaba Hüsseyin Yilmaz. Hoy en la Berlinale hemos disfrutado de una comedia dedicada a él y a su familia que se titula "Almanya-Wilkommen in Deutschland".( Alemania-en lengua turca-.Bienvenidos a Alemania).

En la actualidad viven en la República Federal casi tres millones de turcos. Al menos un millón de ellos tienen dos pasaportes, el alemán y el turco. O tienen sólo el alemán, pero luego piden el turco en los consulados de este país. Las terceras y cuartas generaciones tienen problemas de identidad. No son ni una cosa ni otra. De esta dualidad sentimental habla la película de las hermanas Yasemin y Nesrin Samdereli, nacidas ambas en Dortmund en la década de los setenta y, por tanto, ejemplos en sí mismas de crecer y de madurar en una cultura diferente a la de sus padres y abuelos.Y también relata "Almanya" los enormes esfuerzos que hicieron aquellos emigrantes pobres para abrirse camino en esa Alemania que necesitaba trabajadores y operarios para hacer realidad "el milagro alemán". El filósofo suizo Max Frisch tiene una frase genial al respecto :"Wir riefen Arbeitskräfte, es kamen Menschen" (solicitamos mano de obra y llegaron seres humanos)

Esos seres humanos que venían de muchas partes, pero sobre todo de la pobre Anatolia, tenían al llegar aquí los "Kultur-schock", los choques culturales que se ven en la cinta: el uso del inodoro, la celebración de las Navidades y los regalos para los niños, las imágenes religiosas y, especialmente la figura de Cristo crucificado. El amigo de uno de los hijos de la familia de Gastarbeiters le advierte antes de partir: "te vas a un país donde se come cerdo y también a personas.Cada domingo comen la carne y beben la sangre de uno que ha sido sacrificado".


Muchas de aquellas familias se quedaron en Alemania, en donde se ha pasado de la alegría "multikulti" (multiculturalismo) al concepto de "Leitkultur" (cultura dominante). El cambio lo subrayó la canciller Merkel el pasado mes de octubre: El multiculturalismo ha fracasado, dijo. A esta idea se han sumado muy recientemente David Cameron en Gran Bretaña y Nicolas Sarkozy en Francia. ¿Qué hacer? ¿Dónde llegan los límites de la tolerancia ante el miedo a la presencia de fundamentalismos que toman ventaja de quienes se sienten marginados o segregados en estas sociedades occidentales nuestras?. En el cine de estos últimos años estamos viendo de todo en torno a este tema: películas amables,como la de esta mañana, en la que los turcos se integran e incluso son invitados a un acto oficial con la canciller en el palacio de Bellevue. Películas más duras, como "Entre les murs" ("La clase" en España) o "La journée de la jupe" en la que quedan expuestas con toda su crudeza la degradación y la capacidad de violencia de los jóvenes de origen magrebí en las banlieues francesas.

La Leitkultur de la que ahora se habla en Alemania no significa echar a los emigrantes, sino hacerles comprender que, si han decidido vivir aquí y traer al mundo aquí a sus hijos y nietos, tienen que adaptarse a la cultura de los aborígenes, a nuestros valores occidentales. A nuestros sistemas educativos en los que niños y niñas aprenden juntos, hacen gimnasia juntos y se bañan en piscinas juntos. A nuestros principios de igualdad en los que a la mujer no se la discrimina, ni se la obliga a casarse contra sus deseos, ni se la mutila sexualmente, ni se la obliga a estar en casa y a salir sólo cubierta o en compañía de un varón de su propia familia. A conocer y hablar la lengua del país a donde se ha emigrado. A respetar la Ley. Nuestro mundo occidental no es perfecto, ni mucho menos, y ha apoyado y apoya a dictaduras y a regímenes totalitarios. Pero conviene dejar al menos algunos principios claros.La convivencia, al menos dentro de ese marco de aceptancia y de respeto mutuos, será más sencilla.

4 Comentarios

Ni el multiculturalismo ni la cultura dominante podrán con el efecto transformador de los procesos migratorios en el mundo. Las culturas se funden tomando lo bueno (o lo más adaptativo) de ellas y desechando lo malo. La democracia, por ejemplo, un valor occidental donde los haya, se va extendiendo de manera "natural" por el mundo como lo demuestran los casos recientes de Túnez y Egipto; y solo hablan de "cultura dominante" los integristas islámicos; al igual que en Europa, hablan de este concepto los "fundamentalistas" cristianos, atemorizados ya no solo por el islam, sino por la pérdida de seguidores entre sus propias filas occidentales. Para mí, la decadencia de las religiones trae con sigo una lucha sin cuartel en las que se van devorando unas a otras hasta que no quede ninguna. El Islam es abominable por la forma en que trata a las mujeres, pero el cristianismo tambien está lleno de disparates que apenas cuestionan unos pocos (la resurrección de cristo, la virginidad de maría, el matrimonio indisoluble, la existencia del infierno y el papa como representante de jesús).

Los recursos han originado movimientos hay que saber cuidar las cosas o acabas buscándolas a veces en el mismo sitio y en tu vista y ni las ves. Yo todavía con amnestesia, qué le vamos a hacer los golpes son así a espabilar toca sin que le quiten a uno lo bailado.

TODOS TENEMOS DERECHO A VIVIR (Y TRABAJAR) EN ESTE MUNDO PERO SI POR DESGRACIA TIENES QUE EMIGRAR A OTRO PAIS,TAMBIEN TIENES "DERECHO" A RESPETAR SUS LEYES.ECT...YO POR DESGRACIA HE TENIDO QUE EMIGRAR.POR SUPUESTO QUE NO ESTOY IGUAL QUE EN ESPANA, AQUI EN ALEMANIA HE VISTO QUE NO HAY DISCRIMINACION DE EDAD,RELIGION.POR EJEMPLO: UNA CAJERA DE UN SUPERMERCADO DE 60 ANOS CON GAFAS DE CULO DE VASO? ESTO EN UN SUPERMERCADO EN ESPANA ES INPENSABLE.VOLVIENDO AL TEMA.RESPETA LA MANO QUE TE DA DE COMER.

Me ha encantado el post, como siempre excelente. Además no conocía la película y pienso verla porque me parece que trata una temática muy interesante...Un saludo desde Canarias

Los comentarios de esta entrada están cerrados.

Aurora Mínguez


Soy Aurora Mínguez y actualmente soy la corresponsal de Radio Nacional en Alemania. Empecé a estudiar alemán hace treinta años porque me enamoré de la ciudad de Viena y de la cultura centroeuropea. Luego visité Berlín y me quedé colgada de las consecuencias de la guerra fría y de un país marcado por un Muro. Para aprender alemán hay que estar muy motivado. Para entender este país, y esta Mitteleuropa, también y, además, amar lo que uno hace.
Ver perfil »

Síguenos en...