Un asunto personal
Dominique De Villepin no desaprovecha un minuto para demostrar que en política nunca hay cuestiones políticas, solo asuntos personales. Los suyos y los de un hombre llamado Nicolás Sarkozy, que ha instalado en Francia un “espíritu de corte” y una “concentración y personalización” del poder que perjudican su eficacia. El hombre que aún espera la sentencia Clearestream se presenta como una “alternativa republicana” desde el mismísimo gancho de carnicero en que lo ensartó Sarkozy, en un capítulo más de su entrañable enemistad.
MZ dijo
Puede que en el tema que les ha llevado a los juzgados haya parte (poca, bastante, mucha) de cuestión personal, porque, en general, no sabemos delimitar los problemas y separar lo que pertenece a diferentes ámbitos. Creo que Dominique, de todas formas, haría mejor si desaprovechara esos minutos en él mismo y dejara, de momento, las cosas estar.
28 oct 2009
Juan dijo
Aquí en Madrid tenemos nuestro particular serial, aunque hay que admitir que en cuestión de glamour, Villepin gana por goleada alcorconera a la encolerizada Aguirre, dónde va a parar.
28 oct 2009