Celuloide celofán
Amelie (Le Fabuleux Destin d'Amélie Poulain) es la película de la década para los lectores de Le Figaro. La inexistente Francia de celofán que refleja empieza por su escenario principal, el Café des 2 moulins del barrio de Montmartre, cuyo paisaje humano real es bastante más mestizo de lo que refleja este filme de blancos. Y luego está el buenismo de Amélie, por otro lado, tan bien encarnado por Audrey Tautou. La fábula moderna vende nobles sentimientos y aspiraciones, porque la realidad da para lo que da. Por lo menos, aquí en Francia.
MZ dijo
Sí, Luis Miguel, el cine es cine y la realidad otra cosa, en ocasiones más fea y menos noble en sentimientos, aspiraciones ... y es así en muchos sitios, porque el desarrollo tiene sus lados oscuritos.
24 nov 2009