Fiscal puntilloso
El fiscal Courroye justifica en Le Figaro por qué investigó a un periodista que publicó en exclusiva la noticia de unas diligencias del caso Bettencourt: “Soy puntilloso respecto al secreto de las fuentes de los periodistas. Pero también del secreto del sumario”. El argumento indica una jerarquía de valores teóricos que los académicos pueden discutir. Yo solo voy a mencionar su traducción práctica: menos de dos meses después de la filtración, nadie se acuerda de la dichosa exclusiva de Le Monde, pero sí nos acordaremos siempre de este puntilloso fiscal Courroye, que pasó por encima del derecho a la información en su batalla personal con la jueza del caso, Isabelle Prévost-Desprez.