Fútbol: God save the show
Esta semana, Italia rubricaba su retorno a la carrera de la energía nuclear y sus equipos de fútbol se atomizan. No le van a la zaga los cuatro representantes españoles. En total siete escuadras y ni una sola victoria. Es sólo el primer asalto pero los mediterráneos están tocados. Esta vez, el rey no es el talismán que todos esperaban. La reina no va a Stanford Bridge y Drogba se pone la corona como el día anterior se la colocó Ronaldo. El Sporting de Portugal abunda en la crisis momentánea de los países mediterráneos. El Bayer los aplastó. Luca Toni y Ribery se encargaron de ello. Hombres del sur que trabajan para equipos del norte. En el Bernabeú había más españoles en el Liverpool que en el Madrid. Reflexiono en mitad de la resaca... Los ingleses parten como favoritos para el round definitivo, pero todo está abierto.
Han sido dos noches de pasión: disfrute y sufrimiento. Como en el circo romano, la angustia también forma parte del show. En dos semanas vuelve el espectáculo y el gozo. A quienes no sonrían entonces, la angustia se les transformará en amargura definitiva. Pero mientras hablamos del fútbol nos olvidamos de otras miserias. Y eso no está mal...