6 posts de noviembre 2010

Wikifiltraciones y wikichismes desde Londres

El viernes ya se lanzó el aviso alarma: las próximas revelaciones de Wikileaks (nada que ver con Wikipedia, como ha dejado claro uno de sus fundadores, Larry Sanger, quien acusa a Julian Assenge&Co de ser enemigos de los EEUU y sus ciudadanos): pondrán en un aprieto a la diplomacia estadounidense, dañarán la imagen del Reino Unido y la special relationship entre los dos países... Que, a pesar del familiar y festivo puente de Thanksgiving, Hillary Clinton se había pasado horas al teléfono poniendo sobre aviso a distintos gobiernos y el embajador de los EEUU en Londres había hecho lo propio con el gobierno británico.

The Guardian volvió a ser anoche el periódico británico elegido para compartir los documentos confidenciales obtenidos por Wikileaks, las "Wikifiltraciones".

Las dos principales revelaciones -o constataciones- que The Guardian destaca en el primer momento son: que los líderes árabes (de Arabia Saudí, Bahrain, Jordania) han estado pidiendo en privado que los EEUU ataquen a Iran para evitar que tenga armas nucleares, y que las Secretarias de Estado, Condoleezza Rice y Hillary Clinton, han pedido a sus diplomáticos que obtengan datos personales de los altos cargos en la ONU.

Por la parte que me toca me voy a concentrar en el contenido que afecta directamente al Reino Unido, según lo que se ha publicado.

-Lo del espionaje en la ONU se supone que les afecta porque el Reino Unido es uno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad. Los datos que se piden llegan hasta el número de la tarjeta de crédito o de puntos de las lineas aéreas, y a los datos biométricos y contraseñas personales.

-Críticas demoledoras a las operaciones militares de los británicos en Afganistán. Las discrepancias militares entre los dos aliados en sus guerras son ya un clásico, pero hasta ahora habíamos oído o leído sobre todo las críticas de los mandos británicos a las tácticas y modos de los estadounidenses.

-Que un miembro de la familia real, el Príncipe Andrés*, hizo unas declaraciones "inadecuadas, impropias" (inappropriate) sobre un organismo británico y un país extranjero.

-Que en abril de 1990, en una visita a Londres poco después de su liberación, Nelson Mandela enfureció cuando le impidieron entrevistarse con Margaret Thatcher (para transmitirle las razones por las que él se oponía a la política de Thatcher respecto al CNA, considerado un grupo terrorista) y que fue el Congreso Nacional Africano, su partido, en la persona de Zwelakhe Sisuluo, hijo del histórico Walter Sisulu, quien lo impidió.

-Atrás en el tiempo también, en 1985, un diplomático estadounidense informa de los altercados en distintas ciudades británicos describiendo el Reino Unido como un país racista. Escribe que las minorías étnicas son el equivalente de las clases oprimidas y explotadas que describió Dickens en su época.

-Volviendo al presente o pasado inmediato, la Embajada de los EEUU en Londres se interesó en enero -según las wikifiltraciones- por la amistad entre el parlamentario conservador Alan Duncan y el hoy ministro de exteriores, William Hague, y el primer ministro, David Cameron, y qué cargo podría tener en un futuro gobierno. Alan Duncan es homosexual.

-Otro cable describe a un ministro laborista como un perro de caza cuando hay mujeres alrededor. Y cuenta cómo se vio obligado a disculparse ante acusaciones de acoso sexual. The Guardian no desvela el nombre del ministro por miedo a las leyes británicas de difamación.

-Según The Guardian, los cables incluyen juicios poco favorables sobre Gordon Brown, David Cameron y el futuro del gobierno de coalición entre Conservadores y Liberales. Anuncia la publicación de los detalles para esta noche-mañana.

El Foreign and Commonwealth Office (Ministerio de Exteriores) y Downing Street (la oficina del Primer Ministro) han condenado la filtración de todos estos documentos porque consideran que puede dañar los intereses nacionales y poner en peligro vidas humanas, y esperan más.

The Guardian explica que oculta algunos datos que aparecen en los documentos por miedo a las leyes británicas antidifamación. Pero defiende la publicación de los contenidos porque dice que no le corresponden a la prensa proteger al poder y recuerda que lo de secreto electrónico (los cables, los e-mails...) es una contradicción en términos. Del mismo parecer es Christopher Meyer, embajador británico en Washington durante los gobiernos Blair, quien dice que habría sido imposible, o mucho más dificil, filtrar semejante cantidad de documentos en papel.
Según The Guardian, tres millones de personas tenían acceso a esos documentos.

El contenido de lo desvelado hasta ahora deja sobre la mesa dos cuestiones: el doble lenguaje que usan a veces los gobiernos, diciendo una cosa en público y, otra en privado; y dónde está, si es que la hay, la frontera entre diplomacia y espionaje...periodismo...o chismorreo.


El término más repetido respecto al efecto de las wikifiltraciones es embarrassment. Bochorno, incomodidad.


(*) Justo cuando acababa de publicar esta entrada me ha llegado el tweet del Guardian con el contenido de los cables de la embajada de los EEUU sobre el Príncipe Andrés, hijo de la Reina y enviado especial para el Comercio del Reino Unido. Resumiendo, que de manera sorprendentemente sincera y ruda criticó a los servicios anti-corrupción y a la prensa británica (en espcial al Guardian) por meter demasiado las narices en las investigaciones sobre sobornos. Comparó Francia con la corrupción de países de Asia Central como Kirguistán. Según el Guardian, el nombre del Príncipe aparce a menudo citado en los cables como ejemplo de alguien que ha acumulado millones en Kazajistán, país rico en gas y, según los mismos documentos de los EEUU, con un problema de corrupción endémica.

Mar de Irlanda

Es el mar que separa la isla donde estoy de Irlanda. Lo cruzamos el mes pasado en una visita relámpago para eso que pretenciosamente en periodismo llamamos tomar el pulso. El cúmulo de actividad informativa estos días a este lado de ese mar ha aconsejado que nos quedáramos en Londres (siendo testigos de la segunda movilización de estudiantes) mientras mi compañera Marta Rodríguez cubría la información en Dublín.

Si Sarah Palin puede ver Rusia desde su casa, como satirizó Tina Fey, yo puedo ver Irlanda desde la mía. (Espero que no se malinterprete este comentario jocoso e irónico).

¿Por dónde empezar?
Por los tópicos. Que lo son y siempre tienen algo de engañoso, pero que suelen asentarse sobre una base real.

La isla de emigrantes, que en quince años vio algo que durante siglos creyó imposible, que parte de su diáspora volviera a casa y que fueran otros, de Europa del Este, de China, quienes emigraran a Irlanda. Fue bonito mientras duró. El mes pasado hubo en Dublín una feria para asesorar a quienes quisieran emigrar a países como Australia, Canadá o Nueva Zelanda, y cuatro mil irlandeses acudieron en dos días para que les aconsejaran. Los irlandeses vuelven a emigrar.


Pobre. Un país asociado a la pobreza, a la miseria, pasó a tener una de las rentas per cápita más altas de Europa y el salario mínimo más alto después de Luxemburgo, 8,65€/hora, que ahora rebajarán a 7,65%.


País pequeño. Es imposible entablar conversación con un irlandés para encontrar claves que te permitan entender los acontecimientos y la reacción social y que no salga en la primera frase la referencia a que es un país pequeño. Son 4,5 millones de habitantes, como suelen decir ellos, hay más fuera que dentro. Es un país pequeño y por eso, sigue el razonamiento, no ha habido, salvo una de estudiantes, grandes manifestaciones hasta ahora, "porque nos conocemos todos". Es un país pequeño y eso facilitó el compadreo entre constructores, banqueros y gobiernos durante la burbuja inmobiliaria.

Desposeídos. Un país de desposeídos, de sin tierra, una colonia usada por los reyes de Inglaterra para dar tierras a sus súbditos de la Gran Bretaña. Un país con anhelo de propiedad. Un país con anhelo de propiedad y mucha tierra donde construir que se dejó llevar por la fiebre compradora cuando todos los bancos daban crédito a todo el mundo. Por comprar, incluso compraron algunos de los hoteles más caros de ¡Londres!, una de las ciudades con el mercado inmobiliario más escandalosamente caro del mundo. Parecía una venganza histórica, además de una ironía...insostenible.


Independencia. Soberanía. Un Estado joven, que apenas logró su independencia de Londres hace unos 90 años a costa de mucha sangre y dolor, y aún así fue parcial, los seis condados del Norte siguen bajo la Corona británica. La semana pasada el Irish Times publicó un editorial durísimo en el que se preguntaba ¿La Independencia para esto? (Was it for it?) y reprochaba al gobierno (del Fianna Fáil, el partido de Eamon de Valera, el partido que ha gobernado más de 50 años la República de Irlanda) que haya reducido la República a una situación en que necesita el rescate, la tutela, la intromisión de poderes externos, la Unión Europa y el Fondo Monetario Internacional. Y, el colmo de las humillaciones, tener que aceptar los "chelines" del Chancellor británico, unos 7 mil millones de £. Por otra parte, a este lado del Mar de Irlanda, el gobierno tiene que convencer a su partido, el Conservador, y a la prensa tabloide, de que con esos 7mm £ no pretenden salvar al euro (¡hasta ahí podíamos llegar!) y a los irlandeses, sino ayudar a un "vecino y amigo en apuros", que, además y sobre todo, es muy importante para la economía británica. El Reino Unido exporta a la República de Irlanda más que, sumados, a Brasil, Rusia, la India y la China. Los bancos británicos, como los alemanes, tienen más de 140 mil millones de € en los bancos irlandeses, los bancos irlandeses emiten libras esterlinas y muchos norirlandeses -ciudadanos británicos- tienen sus cuentas en bancos irlandeses. La República de Irlanda se independizó políticamente en los años 20, pero estuvo unida a la libra esterlina hasta los 70 (cuando entró en la Comunidad Europea y el Sistema Monetario Europeo) y su economía sigue muy unida a la del Reino Unido.


Humillación, engaño, vergüenza y traición son términos que se le echan en cara estos días al gobierno de Brian Cowen, el Taoiseach (Primer Ministro), además del de ineptitud. "Somos un país joven y durante unos años se nos podía perdonar el cometer errores, pero ya no, ya llevamos casi un siglo de independencia", esta reflexión me la hizo un escritor en la última visita a Dublín. Brian Cowen está absolutametne desprestigiado. Parece que logrará retrasar las elecciones generales hasta principios del año que viene, una vez aprobados los presupuestos (se votan el día 7) y el acuerdo para el rescate de la UE y el FMI, pero algunos miembros de su partido piden en voz alta que dimita, que le deje el trabajo hasta entonces a otro y que, desde luego, no se presente como líder a las elecciones.


Europeístas, pero... Los irlandeses son europeístas porque saben que las cosas les han ido mejor desde que entraron en ese club del que han sido receptores de fondos de cohesión, y que ha reforzado las distancias políticas con Gran Bretaña. Pero no han dudado en darle portazos a la UE en los referendums de la Constitución. Al final, a base de repetir referendums, el año pasado dieron el sí al Tratado de Lisboa, y una de las condiciones previas que pusieron fue que la UE les garantizara que respetarían su soberanía en cuestiones como la neutralidad militar, el aborto y la fiscalidad. De ahí que ahora Francia y Alemania lo tengan tan mal para doblegarlos en el impuesto de sociedades, que es del 12,5%, la mitad que la media europea y clave en la política industrial para atraer multinacionales como Google. La "fórmula mágica" del crecimiento de los 90 fue: hablamos inglés, tenemos una población joven muy preparada y unos impuestos bajísimos. Pasen, vean y elijan Irlanda como su sede europea.


Los dos vectores, el de Europa y el nacional, tiran en direcciones contrarias estos días. La UE pide estabilidad política y acuerdos económicos cuanto antes para calmar a los "mercados" internacionales y estabilizar el euro, pero el vector nacional lleva la voluntad de los irlandeses a reclamar elecciones ya, y que sea un nuevo gobierno el que termine de pactar con la UE y el FMI y de ajustar los presupuestos (que atarán de pies y manos al próximo gobierno).


Humor. Una salida para los pueblos desgraciados es el humor, sacarle punta a sus miserias. Reírse de ellas para hacerlas un poco más llevaderas. Los irlandeses, esta crisis y este rescate no son una excepción.

Brian Cowen y el rescate de la UE (EU) y el FMI (IMF), según el cartoonista del Irish Times:


Vamos a aprovechar la ocasión para recuperar un clásico. ¿Qué más clásico hablando del apego a la tierra -de la que hay que irse para sobrevivir- y el anhelo de tener posesiones de los irlandeses que Tara, no la montaña, sino la Plantación? La inserción del video está desactivada, pero aquí va el enlace.

PD IMPORTANTE: Por motivos en los que no me voy a extender porque me dan un poco de rubor he tenido desatendida hasta hoy una cuenta de correo suplementaria de tve. Pido perdón a todas aquellas personas que desde hace más de un año han estado mandando e-mails a esa dirección. A todos, mi agradecimiento por los correos y mis más sinceras disculpas, de todo corazón, por el olvido. A partir de ahora consultaré esa cuenta. New Year's resolution.
..............................................................................................................

Actualizado el sábado 27: En portada del Irish Post, el semanario de los irlandeses en la Gran Bretaña, la Declaración de Dependencia de Irlanda:

Los pubs, el tabaco y la entrevista

Escribo esto llevada por la sorpresa que me han producido las declaraciones del presidente de Altadis, la principal tabaquera española, sobre la nueva propuesta de ley sobre el tabaco en España. Por lo que dice o sugiere y porque lo dice un británico.

Por ejemplo, que la ley de España será de las más radicales del mundo (a la vista de cómo se aplica la actual soy más bien escéptica, hasta que no lo vea no me lo creo). Sorprende que eso lo diga un británico. En el Reino Unido hace ya más de tres años que no se puede fumar en ningún lugar cerrado que no se considere de estricto uso personal. Un ejemplo, últimamente he alquilado varias veces coche y una de las advertencias es que en el coche de alquiler no se puede fumar. Porque no es de uso personal, cuando tú lo devuelvas lo alquilará otro cliente. Y, tal como comenté en un post anterior, el Colegio de Médicos quiere que también se prohiba fumar en los coches particulares, si van menores y, según las encuestas, es una propuesta que cuenta con el apoyo de más de la mitad de la población.

Pero en lo quiero hacer hincapié es en la afirmación que hace de que por culpa de la ley del tabaco en el Reino Unido han tenido que cerrar un 10% de los establecimientos hosteleros.

Si hay un establecimiento hostelero unido al tabaco en la cultura británica es el pub. El lugar para tomarse una pintas y "socializar", relacionarse, con los vecinos tal y como ha inmortalizado la serie Eastenders desde hace más de un cuarto de siglo.

Pues bien, es cierto que los pubs están en crisis. Es cierto que hay cierta alarma por el ritmo al que están cerrando, desapareciendo, los pubs. Incluso hay una plataforma social para salvarlos (http://www.backthepub.com), pero cuando me he puesto a indagar la razón de esos cierres me he encontrado con que todos los artículos y todas las denuncias señalan como causa la crisis económica, que los clientes fallan porque les resulta demasiado caro ir al pub, no porque no les dejen fumar. Lo dice por ejemplo la British Beer and Pub Association. Prefieren comprarse las cervezas en el supermercado (a veces con grandes rebajas) y bebérselas en casa. En los pocos artículos en los que se menciona la prohibición de fumar en el interior del pub se cita como algo que puede haber contribuido, pero no se considera la causa principal. Los lobbies que luchan contra el cierre de pubs reclaman del gobierno británico que baje los impuestos al alcohol y otras cargas fiscales o burocráticas, no que relaje la ley anti-tabaco.


En algunos análisis se atribuye la crisis también a un cambio en el estilo de vida y gustos, o modas, porque, por ejemplo, los pubs que tienen mayor oferta gastronómica están capeando mejor el temporal y crece el número de establecimientos sofisticados especializados en vino o tipo Café (al estilo mediterráneo), y esos establecimientos están absorbiendo una parte de la clientela que antes tenía el pub de la esquina.

Según una encuesta de este año, el 80% de la población de Inglaterra (el último país/nación/lugar del Reino Unido donde se aplicó la prohibición; primero fueron Escocia y Gales) respalda la actual ley, incluida la prohibición en restaurantes y pubs.

La web del NHS, la sanidad pública británica, ha publicado este año un balance de la ley anti-tabaco y de los efectos del tabaco en los fumadores de "segunda mano" o pasivos.


Por último vuelvo a hacer una reflexión: los no fumadores somos mayoría en España, si nos ponemos militantes y boicoteamos los restaurantes y cafeterías donde se fuma, los hosteleros se darán cuenta de que con humos pierden más clientela de la que ganan.

¿Otoño caliente?

Ayer, miércoles, hizo un día espectacular en Londres, fresco, pero seco y soleado. También lo fue, según cuentan las crónicas, el 31 de marzo de 1990, el día de la famosa manifestación contra la poll tax, impuesta por el gobierno de Margaret Thatcher, que acabó con 113 personas y 20 caballos heridos, y 340 manifestantes detenidos.
No es ninguna frivolidad especular con que el tiempo ayudó a que la manifestación de estudiantes de ayer fuera numerosa y se alargara hasta que cayó la noche (o sea, las cinco de la tarde). Dudo que hubiese durado y se hubiesen animado tanto hoy con el temporal de viento y lluvia que tenemos encima.

Ayer entre estudiantes y profesores sumaron unos cincuenta mil manifestantes contra la subida de las matrículas universitarias. Dicho rápido, el gobierno Cameron recortará en un 40% la financiación pública a las universidades y, para compensar, subirá el tope actual a la matrícula que las universidades pueden imponer. El gobierno Blair estableció un tope de 3.290£/año, ahora proponen subir ese tope hasta 9.000£.
Para defenderse de las críticas el gobierno británico insiste en que no se trata de matrículas que haya que pagar por adelantado, sino de una deuda que el estudiante acumula y que sólo deberá reembolsar, si al terminar la carrera encuentra trabajo y gana más de 21.000£ al año.

La manifestación transcurrió pacíficamente y la policía -criticada y escaldada por la actuación el año pasado durante el G20, que acabó con la muerte de una persona- la consideró una manifestación de bajo riesgo y para la que no tenía que hacer una demostración de fuerza. No contaba con que al calor, nunca mejor dicho, del sol de tarde algunos manifestantes al pasar por delante de la Torre Millbank (muy cerca del Parlamento, a orillas del Támesis) tuviesen la idea de entrar por la fuerza y asaltarla. En ese edificio tiene su sede el Partido Conservador, el del Primer Ministro y mayoritario en la coalición de gobierno. Hubo asalto violento y la policía se vio desbordada.

El saldo: algunos cristales rotos, una quincena de heridos, una cincuentena de detenidos y, sobre todo, estupor, escándalo y condena por el vandalismo de esos manifestantes. Y con ello el fin de un discurso que han estado repitiendo a este lado del Canal en los últimos dos meses y que dice más o menos así: a pesar de que los recortes y reformas de nuestro gobierno son mucho más fuertes que los de Francia, aquí no hay revueltas como las de allí porque no tenemos su tradición revolucionaria (léase "cafre") y porque aquí la mayoría de los ciudadanos son conscientes de la necesidad de reducir el déficit y hacer un esfuerzo común (léase "no como esa panda de mimados que son los franceses").

En mi modestia yo me curaba en salud y decía aquello de "de momento". De momento no hay revueltas como en Francia o Grecia. De momento. Veremos cuando las medidas empiecen a concretarse y hacerse efectivas. Ahora estamos entrando en la fase "concretarse". Las medidas no empezarán a aplicarse hasta el año que viene como pronto.

No sé si lo de ayer fue el principio de un otoño-invierno caliente de protestas, y ésa es la pregunta que muchos se hacen hoy aquí, pero, desde luego, lo de ayer recordó a los amnésicos que éste no es un país inmune a las revueltas, aunque no hayan tenido una guillotina, ni una Comuna. Y a pesar de que, comparado con el festival francés de destrozar escaparates e incendiar coches ajenos, lo de ayer en Londres fue una anécdota.


Cuando el bolsillo aprieta

¿Cuántas conductas cívicamente ejemplares dejarían de serlo, si no fuera por el temor a las multas? No, no hace falta que me contesten, que igual nos llevábamos unas cuantas decepciones.

El bosillo pesa y aprieta. Y cosas que no haríamos en principio las acabamos haciendo por razones económicas. Y eso es lo que Cameron y Sarkozy, Sarkozy y Cameron -tanto monta, monta tanto, en el espíritu del Tratado de hoy- les han dicho a sus ciudadanos y, en especial, a la prensa británica.

Francia es la tercera fuerza militar del mundo; el Reino Unido, la cuarta. Ambos países son potencias nucleares y entre ambos -según ha recordado el presidente francés- suman la mitad del presupuesto militar europeo. Ambos han sido imperios y que se han hecho la competencia y enfrentado en un sinfín de batallas. Los británicos -los ingleses, en especial- no olvidan 1066, el año de la invasión de los Normandos, sin la que, por otra parte, no serían quienes son... Pero Guillermo el Conquistador, Napoleón y el Almirante Nelson son historia muy pretérita. El presente de colaboración lo más que se remonta es un siglo, a la Primera Guerra Mundial, a las veces en que durante el siglo XX británicos y franceses han sido aliados frente a un enemigo común.

En Londres hoy el primer ministro británico, David Cameron, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, han firmado dos tratados por los que aumentará muy significativamente la colaboración militar entre los dos países. "No tiene sentido -ha defendido Cameron- duplicar gastos cuando ambos podemos compartir algunas instalaciones". Los portaaviones, por ejemplo (ya comenté cómo afectaban los recortes a la Defensa británica en otra entrada), los centros de pruebas o de investigaciones nucleares, otro ejemplo. Y entrenarse para operaciones conjuntas en las que militares británicos obedezcan a oficiales franceses, mon Dieu!, y viceversa. "Es un acuerdo basado en el pragmatismo, no sólo en los sentimientos" ha sentenciado David Cameron.

Consciente de las reticencias de muchos británicos, en especial de la prensa más conservadora, Cameron ha asegurado que esta cooperación con Francia no mina la soberanía nacional, ni es un embrión de un futuro ejército ¡europeo! El ánimo y tono de las reticencias lo ha verbalizado el periodista de ITV cuando, frente al Presidente de la República Francesa, le ha preguntado al Primer Ministro británico "¿cree usted que puede fiarse de los franceses en los próximos 50 años?

Por la tarde en la Cámara de los Comunes, y en línea con algunos análisis que publica la prensa, le han preguntado al ministro de Defensa ¿qué pasará, si vuelve a haber una guerra de las Malvinas? ¿Pondrá Francia su portaaviones a disposición de la RAF? ¿Que ocurrirá si, como cuando la invasión de Irak, París y Londres no tienen la misma postura en un futuro conflicto?

Anoche Nick Robinson, periodista de la BBC, recordaba qué solía decir Margaret Thatcher cuando se planteaba la cuestión de una mayor cooperación militar con Francia. "¿Cómo defendieron París los fraceses?" dijo que solía preguntar la entonces primera ministra para responderse: "Nunca lo intentaron".

Pero a la fuerza ahorcan y por mucho que les pueda doler en su orgullo nacional y a sus prejuicios y desconfianzas seculares respecto a los franceses las penurias económicas se han impuesto, y franceses y británicos compartirán instalaciones y medios militares. Y si hay un argumento al que los británicos son receptivos y Cameron explota es el del pragmatismo. Lo dicho, eso de la honra está muy bien, pero si no se tienen los barcos para defenderla...


Actualizado el miércoles 3, con la contribución de Matt, uno de los cartoonist del Daily Telegraph:

"Why Poles?" ¿Por qué polacos?

El fin de semana pasado me lo tomé libre para salir de Londres porque es algo necesario personal y profesionalmente. Además de la conveniencia de airearse, un corresponsal debe intentar conocer el país en el que vive y del que informa y para ello hay que salir de vez en cuando de la ciudad en que está y que suele acabar siendo una burbuja o un mundo paralelo a ese país. Les ocurre a Washington DC y a Nueva York, y le ocurre a Londres.

En esta ocasión me fui hacia el oeste. Y en una gasolinera entre Cheltenham y Gloucester la persona que atendía la caja al oirnos hablar a mi marido y a mí me preguntó "¿de dónde son?". Y éste fue el diálogo que le siguió:

-De España.

-¿De dónde exactamente?

-Depende, en mi caso, yo soy de Barcelona.

-Ah, Cataluña.

-Sí, efectivamente.

-Los catalanes dicen que son catalanes, no españoles.

-Bueno, es algo parecido a lo de Gales o Escocia...

-Y...¿es cierto que el resto de españoles les llaman polacos?

-Pues, sí.

-Y ¿por qué polacos?

-Pues no lo sé. Lo siento.

-Es que yo soy polaco.

-Pues lo siento, pero de verdad que no lo sé.

-¿Qué les hemos hecho los polacos a los españoles?

-No lo sé. Lo siento. No sé qué pintan ustedes en todo esto.


El pobre hombre se quedó muy frustrado porque por unos momentos creyó que yo lo sacaría de dudas y no fue así.

PD1 Esta anécdota confirmó dos estadísticas personales en el año que llevo aquí:

Una, que en el Reino Unido más o menos todo el mundo está al corriente de la diversidad y otras peculiaridades de la piel de toro (la semana pasada el oculista, mientras me revisaba la visión, estuvo divagando sobre el hecho de que Galicia "haya producido a Franco y Castro").

Dos, que la gran mayoría de las personas que trabajan de cara al público (cajeros/as, camareros/as...) que tienen acento eslavo cuando sale a la conversación de dónde son me comentan que son de Polonia (capital, Varsovia). Según la Oficina Nacional de Estadística, con la entrada de Polonia en la Unión Europea la población polaca del Reino Unido pasó de 75.000 a finales del 2003 a 520.000 a finales de 2009, y en algunos artículos los cifran en 700.000 e incluso un millón. También se menciona que, con la crisis, algunos están volviendo a Polonia.

PD2 Este fin de semana ha sido de un otoño de postal. Los árboles parecían un cuadro impresionista.


Gloucester

Cheltenham

Gloucester


Bourton-on-the-Water

Burford

Miguel Ángel Idígoras


El título de este blog “London.es” no es más que una declaración de intenciones. La realidad de esta ciudad británica –que para muchos es la menos británica de las ciudades británicas- y de un país pero desde la perspectiva de un español.
Ver perfil »

Síguenos en...

Últimos comentarios