Otro referéndum
Otro referéndum que cubrir para esta corresponsalía. Y es, otra vez, en Irlanda. Y resulta difícil no hacer algún chiste después de los referéndums y re-referéndums de los últimos años. Votad, votad, malditos, hasta que salga sí entonaron la Unión Europea y el gobierno irlandés con el Tratado de Niza, primero, en 2001, y el de Lisboa, después, en 2008. Los irlandeses los rechazaron a la primera, pero acabaron aceptándolos a cambio de algunas concesiones a su soberanía por parte del resto de la Unión Europea. A la segunda fue la vencida. Ahora le toca al pacto de disciplina fiscal.
Los gobernantes europeos se esmeraron al redactar ese pacto en que no se considerara técnicamente un nuevo tratado y así evitar esos incómodos referéndums que vetan o retrasan la entrada en vigor de nuevas reglas. Este viernes 25 de los 27 países firmarán ese pacto. También lo hará el gobierno irlandés, sólo quedarán al margen el Reino Unido y la República Checa. Y en esta ocasión para hacerlo efectivo bastará con que lo ratifiquen 12 países. En el caso de Irlanda, hoy la cosa se ha complicado un poco.
El Fiscal General (máxima autoridad en cuestiones legales) ha dicho que era necesario someterlo a referéndum. Y así será.
Los tres principales partidos (los dos que gobiernan, Fine Gael y Laboristas, y el que gobernaba y ha pasado a la oposición, Fianna Fáil) apoyan el pacto fiscal y ya han anunciado que harán campaña a favor del sí. El Sinn Féin, reforzado como partido de oposición en el sur, en la República, está en contra porque considera que es un pacto de austeridad.
Que los principales partidos apoyen el sí no es ninguna garantía porque ya saben que cuando a los ciudadanos se les pregunta, contestan, y uno nunca puede dar por seguro qué van a decir. En esta ocasión a nadie se le escapa lo impopular que es la Troika (Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) que los ha "rescatado" económicamente a condición de imponer -y supervisar-fuertes políticas de austeridad.
Si los irlandeses rechazan el pacto, la consecuencia es que Irlanda no podría optar a otro rescate económico. ¿No aceptas las reglas?, pues no hay más dinero. Pero, en principio, no afectaría a los planes de los demás gobiernos europeos firmantes porque, como decía, basta con que lo ratifiquen 12, no los 25 firmantes.Tampoco significaría la expulsión de Irlanda del euro, pero es fácil adivinar que ése será el gran argumento de la campaña del sí, si queréis seguir en el euro -y a pesar de todo, nos conviene seguir en él- votad que sí.
No hay fecha para el referéndum irlandés, pero se especula con que sea esta primavera.
PD Para el referéndum que sí ya hay fecha es el de independencia de Escocia. O al menos ésa fue la exclusiva de la edición escocesa del nuevo Sun on Sunday del grupo Murdoch. Sábado 18 de octubre de 2014. Lo dicho, en esta corresponsalía se nos acumulan los referéndums.
@annabosch