Javier Gutiérrez es el corresponsal de TVE en México y Centroamérica. Antes de la aventura americana, Javier ha sido coordinador del fin de semana en el Telediario de TVE y ha cubierto información nacional e internacional.
Los mexicanos utilizan más las palabras penal o reclusorio que las de cárcel o prisión, pero da lo mismo… Yo de lo que quiero hablar hoy es de las 8 horas que pasamos mirando la puerta de este edificio de Veracruz, esperando a que saliera José Pérez Díaz.
El miércoles pasado estaba haciendo una mini maleta para irme de vacaciones de Semana Santa a un pequeño pueblo de pescadores en Veracruz(Estado) cuando tuve que cambiar de equipaje… El destino era parecido, también Veracruz, pero distinto: la capital del Estado… y las vistas, en lugar de al mar, fueron a los muros de una cárcel, reclusorio o penal o prisión.
Lunes, martes, miércoles…
Tres días y decenas de llamadas con pocos resultados… hasta que el miércoles, serían cerca de las nueve de la noche, Minerva Amado, de comunicación social de la PGR (Fiscalía Federal) me llamó y me dijo que los documentos donde “iba la libertad de Pepe” saldrían ¡¡¡por fin!!! al día siguiente para el juzgado de Veracruz y que posiblemente el “Jueves Santo” le “podían poner en libertad”…Y fue el jueves santo por la noche…
Cinco para las 11, como dicen en México. O sea, a las 11 menos 5…
De aquí le llevaron a migración y ahí es donde se encuentra en estos momentos, hasta donde yo sé. De este edificio –también en Veracruz- saldrá para el aeropuerto Benito Juárez del DF y de ahí a España…
¿Cuándo? No es fácil la respuesta: como pronto en unos días…pero tal vez en unas semanas.
Lo que yo quiero contar son algunas vivencias de esas 8 horas de espera…
Diana -la hija de la mujer con la que José Pérez Díaz ha compartido los últimos 12 años de su vida- iba y venía… no sé si se mordía las uñas…pero es esa imagen de inquietud y cansancio de quien lleva esperando allí desde las 7 de la mañana…
Por cierto, Diana terminó hace 4 meses su carrera de Derecho y éste ha sido su “primer caso”… No, no es su abogada, pero ha ayudado estos días a la abogada que no ha podido estar a las puertas de la cárcel…
Diana me cuenta que para ella José o Pepe o Roberto (el nombre con el que vivió en México hasta que le detuvieron el 23 de marzo) ha sido –y es- su padre desde hace 12 años. Es una chica de 26 años súper “buena onda” como dirían en México. A mí me parece sincera.
Quiero hacer aquí una aclaración, para lo que ya he escrito y para lo que voy a seguir escribiendo: no estoy de ningún lado… no tengo ni idea de si José Pérez Díaz se “apropió” de esos 6.000 millones de pesetas. Ni defiendo ni acuso… No es el caso, lo que me apetece es “describir” esas impresiones que no puedes contar cuando haces una noticia.
Hablo con Diana durante un rato; estamos sentadas en una especie de muro de cemento y a 3 metros –enfrente de nosotras- está la cárcel. Es curioso, los presos, dentro, que se deben aburrir lo que no está escrito, empiezan a corear:
--- Que liberen a Pepe, que liberen a Pepe…
Y pienso yo: ¿Por qué no piden que les pongan en libertad a ellos?
Mientras hablamos, debajo de nosotras hay unaespecie de alcantarilla y veo pasar a varias ratas de considerable tamaño… la verdad, hay suciedad en los alrededores de esta cárcel que se encuentra dentro de la ciudad… Me dicen que es una de las peor conservadas de México.
La madre de Diana también se llama Diana… cuando llegamos estaba dentro de la prisión. No era día de visitas y no se puede entrar, a no ser que pagues. Cincuenta pesos (unos 3 euros) y asunto solucionado.
Una curiosidad: Diana -madre- cuando fue a entrar a la prísión se tuvo que cambiar de ropa; iba vestida de negro y ninguna visita puede ir vestida con blusa o camisa negra o de color pardo?... son los colores de los trabajadores de la prisión y hay que evitar confusiones.
Sale Diana de la prisión y me pongo a “platicar” con ella. Me parece una persona muy normal y confiada…en lugar de tratar de evitar a una periodista, todo lo contrario. Primero me deja que le haga unas cuantas preguntas para la tele y después intercambiamos “información” –como colegas- sobre dónde están los documentos que tienen que llegar a la cárcel para esa puesta en libertad de la que ya hablé…
Con naturalidad Diana –madre- me cuenta cómo se enteró de que Roberto no era Roberto sino José. Fue ¡¡¡el día que le detuvieron!!!
---Pepe me llamó y me dijo: "te tengo que contar algo… estoy detenido porque..."
Yo me lo creo…Mientras hablamos a veces se le escapa “Roberto” en lugar de Pepe…De hecho el hijo que tuvieron se llama también Roberto.
Me permito contar todo esto porque ella me lo explicó también delante de la cámara…
Delante de la cámara también me dijo que no sabe nada de ese dinero y que ella no puede decir si José Pérez Díaz es culpable o inocente…que ella lo juzga sólo a partir del tiempo que han compartido juntos y que para ella esos años son positivos…por eso ha decidido continuar a su lado.
Y no descarta que continúen juntos su vida en España. Eso sí, de España, me confiesa Diana, les contaba poco...
Ocurrieron más cosas durante la espera…
Los periodistas que se encargan de los “sucesos” en Veracruz tienen una especie de “tenderete” al lado de la cárcel donde esperan las noticias… Todos me parecieron muy simpáticos. Me sorprendió que algunos estaban allí desde hace días haciendo guardia a que saliera “el español” -como le llamaban ya en la cárcel-y sabían muy poco de él… Empezaron a hacerme preguntas cómo cuantos años llevaba en México, cuantas “pesetas” se había traído de España, si vivía o no en Veracruz… Aclaro, eran los gráficos los que tenían todas esas dudas.
Y también me sorprendió que casi todos le consideraban “culpable”. Hasta el directorde la prisión, “amigo” de los periodistas, me dijo algo así como “pues que nos diga donde están algunas de esas pesetas.”
(...)
A las 9 de la noche llegaron los documentos y a las 5 para la 11 “el español” salió de la prisión.
---Pues por el principio, ¿no?, me diría alguien sensato.
Y eso es lo que intento hacer desde el domingo -ahora ya es lunes por la tarde en México- y en ello estaba cuando una llamada de teléfono lo ha cambiado todo...
Este post, se ha quedado desfasado antes de publicarse... así que he tenido que empezar por el final...
¿Cual es el final?
Por el momento, el final posible es que José Pérez Díaz, más conocido como Pepe el del Popular, podría salir de la cárcel en los próximos días y quedar en libertad.
¿Por qué?
Pues porque según un auto del juez español que se encarga de su caso los delitos por los que estaba en busca y captura internacional y por los que le detuvieron el 23 de marzo en México HAN PRESCRITO.
Y este juez firma lo siguiente "declarar extinguida la responsabilidad criminal de José Pérez Díaz y ordenar inmediata puesta en libertad (...) y en un párrafo anterior dice: "por lo que no es pertinente proponer al gobierno su extradición."
En resumen: que José Pérez Díaz no tendría que comparecer ante la justicia española. Es lo que yo entiendo.
Pero todavía queda recurso de apelación.
Ah!!! esa llamada era la que me contaba todo lo que arriba escribo. En realidad ha sido más de una llamada... pero tampoco hay que contarlo todo.
Para quienes todavía no sepan quien es José Pérez Díaz pido disculpas. Lo explico a continuación.
Y ahora sí que os dejo con el principio de mi post: (espero que siga interesando)
No sé lo que estaría haciendo en marzo de 1991 ni cuales fueron las noticias que esos días destacaron los periódicos, la radio o la televisión... Pero lo confieso: yo no supe quién era José Pérez Díaz hasta el miércoles 25 de marzo de este año...
Por eso, cuando me llamaron mis compañeros de Madrid para decirme que lo habían detenido en México y que averiguara cómo había sido y dónde se encontraba, lo tuve que reconocer: mi memoria no recordaba que en el mes de marzo de hace 18 años un hombre llamado José Pérez Díaz había huido de España y al mismo tiempo "habían desaparecido presuntamente" 6.000 millones de pesetas en la sucursal que él dirigía... que se habló de cuentas paralelas...que había unas 250 personas y entidades -incluído algún partido político, por ejemplo- afectadas, etcétera.
Rápidamente te pones a hacer llamadas para averiguar algo... y das los primeros datos... Algunos erróneos, según me corrigió el detenido unos días después...No me lo inventé, por supuesto, pero algunas de esas fuentes a las que recurres me dijeron que fue detenido con una mujer y que podría ser su esposa, Esperanza, con la que huyó de España... Pues bien, cuando le detuvieron iba solo y Esperanza nunca ha estado con él en México. Es lo que me dijo José.
Bueno, hablando con Oscar -mi jefe- se nos ocurrió la posibilidad de intentar hacerle una entrevista... Yo lo veía difícil; Empecé por llamar a la cárcel... Tuve suerte, me pusieron con el director jurídico y me dijo que hablaría con él y que al día siguiente me daría una respuesta.
Pero esto es México y los tiempos son distintos...A la gente le cuesta mucho decir que no...así que cuando le volví a llamar -al director jurídico- que por cierto, fue muy amable, no pude averiguar si había hablado con el detenido o no... No sé realmente cual era la respuesta... Le entendí algo así como que debería hablar con el director de la prisión...
Vuelta a empezar. Pero el problema es que fue imposible hablar con el director; estaba reunido; había salido a comer (3 de la tarde); había salido a comer (6 de la tarde)...había...estaba...era día de...
Por cierto, lo primero que hice fue intentar hablar con su abogado...pero nadie sabía su nombre ni su teléfono...
Pero como seguí llamando a más teléfonos y a más personas, en una de esas llamadas me dieron un buen consejo: llama a la prisión y pregunta directamente por él... Es lo que hice y resultó. Yo pensé que tendría sus dudas para hablar con un/a periodista, pero me equivoqué.
Y José Pérez Díaz no me dijo que NO...
A partir de ahí hablé con su abogado español, pedí todos los permisos necesarios para entrar en la cárcel e hicimos la entrevista...
Duró más de media hora, así que intentaré resumir:
Lo primero y lo que más veces repitió:
"Me equivoque en un momento, tomé la decisión que está clarísimo fue equivocada de irme de España y después no tuve los medios ni el valor de decir, regreso y afronto el tema."
A la pregunta de "culpable o inocente" contestó:
"Inocente. Tenga la completa seguridad de que no me llevé ni una sola peseta de ese dinero." (...) "Suponiendo -que no es cierto- que se hubiera hecho mal uso de ese dinero para nada sumarían los 6.000 millones de pesetas (...) es una cifra que me suena a chiste".
---¿Y entonces por qué huyó?
"Ojalá yo estuviera en condiciones de contestarle con claridad, pero puede afectar a mi proceso jurídico (...) y me lo tengo que reservar (...) le repito: que fue por las presiones que estaba recibiendo permanentemente."
--- ¿De quién?
"Son presiones de la entidad bancaria donde yo trabajaba, al entorno de la entidad bancaria." (...) "Yo creo que el banco sabe perfectamente que yo no me llevé dinero, creo que es algo que el banco siempre supo."
Fueron muchas preguntas, a veces repetidas, para intentar obtener más información, pero José Pérez Díaz, asesorado por sus abogados, no acusó a nadie... Aparentemente estaba tranquilo, pero fueron bastantes veces las que acudió a la botella de agua que tenía a su lado... daba pequeños sorbos; también se rascaba con frecuencia sus piernas o su cuello.
El lugar no era cómodo. Una habitación de apenas 15 metros cuadrados... Con mucho ruido...era la sala de espera para entrar al despacho del director y los teléfonos no paraban de sonar...
De España se vino directamente a México. Se vino solo. Con él trajo unas 700 mil pesetas. Aquí trabajó como camarero, venderor de pinturas y después de muebles. El 23 de marzo -cuando le detuvieron- era representante comercial de una empresa de azulejos. Tenía que viajar a Chicago por trabajo y por eso fue a pedir visado al consulado de Estados Unidos. Ya lo había hecho en dos ocasiones anteriores, pero comenta que no le "pidieron sus huellas."
"Me mandan poner las huellas y en el momento que me mandan poner las huellas digo ya me cazaron". (...) "Me dicen: Su visa ha sido aprobada. Yo fui convencido que me iban a agarrar."
Y no se equivocó. Le detuvieron y desde entonces está -en calidad de preventivo- en la prisión Ignacio Allende de Veracruz... (Al menos hasta las 7 de la tarde del lunes 6 de abril)
Ya sé, dije que resumiría y sigo escribiendo.
Esto es lo que dijo sobre los afectados:
"Si hay afectados que por la forma dehacer los depósitos en aquel momento el Banco popular no recuperaron su dinero soy el primero en pedirles disculpas y perdón y que sepan que nunca fue mi intención quitarles una sola peseta."
Puede que haya personas que quieran saber algo sobre su vida familiar. Cuento hasta donde él me contó: En México rehizo su vida, comparte su vida con una mujer mexicana y tienen un hijo. Con su mujer española y sus cuatro hijos españoles, el contacto es escaso...
La entrevista también tuvo momentos emotivos, sobre todo cuando habló de su padre y su hermana...
"Quiero dar un abrazo a mi padre, a mi hermana, que les quiero mucho y que tengan la seguridad que estoy bien y voy a afrontar esto con la mayor dignidad posible. Espero verlos pronto en España".
Todo esto y mucho más es lo que contó José Pérez Diaz en la entrevista...No ha pasado una semana y puede que su vida cambie de nuevo...
Yo no sé si en estos momentos "Pepe el del Popular" repetiría "espero tener la oportunidad de contar todo." ...como nos dijo el miércoles pasado.
Quiero acabar ese "larguísimo" post de la misma manera en cómo finalicé una de las noticias que escribí para TVE:
¿Cuanta parte de verdad hay en lo que nos ha contado?
Sólo él lo sabe...La justicia será la que diga la última palabra.
Javier Gutiérrez es el corresponsal de TVE en México y Centroamérica. Antes de la aventura americana, Javier ha sido coordinador del fin de semana en el Telediario de TVE y ha cubierto información nacional e internacional.