Los perros de Kirguizistán (I): ladran
Tengo una imagen en la cabeza que no puedo quitarme de la cabeza. Y un sonido. Curioso que, después de todo lo que vimos y oímos en Kirguizistán, no deje de pensar en la oscuridad de la noche de Biskek. Una ciudad llena de vida durante el día, pero silenciosa y oscura por la noche. Justo en lo que uno puede pensar cuando se habla de una típica ciudad soviética.
Y recuerdo a los perros ladrando. Rabiosos, nerviosos, extremadamente escandalosos. La noche y los ladridos. Quizás un buen título para un post sobre el Kirguizistán de hoy, que no podrá mirar hacia el mañana sin tener muy presente el ayer.
...Este vier...