Viejos zorros
En las redacciones de Internacional de todo el mundo, el
pasado lunes fue un día agitado. Los movimientos diplomáticos de Rusia, Estados
Unidos y Siria se sucedieron a un ritmo vertiginoso abriendo una nueva vía de
negociación en una crisis que parecía destinada a resolverse a golpe de
Tomahawk. Aparentemente, el secretario de Estado John Kerry cometía un desliz
al plantear que sólo la entrega de su arsenal químico salvaría a Damasco de un
ataque. Moscú le tomaba rápidamente la palabra y presionaba al régimen de Asad,
que poco después aceptaba la propuesta. El propio Obama veía la idea como “potencialmente
positiva” y, sin congela...