Uno no va a suplantar al otro. Van a trabajar juntos como "hermanos".
Así son los nuevos tiempos.
Si un tiempo atrás nos hubieran dicho que llegaríamos a ver a dos Papas conviviendo en una misma línea temporal, juraríamos por la Santa Biblia que se trata de un desfase de esos que imprimen carácter a los guiones de “Torchwood” ó “Docto Who”…
Tan sólo ha pasado una semana desde que el Papa Francisco se calzó las sandalias del pescador. Dos desde que hubo fumata blanca y fue elegido para sustituir al emérito Benedicto XVI. Sin embargo, parece que ya ha marcado la diferencia.
Sobre todo, si nos referimos a la cercanía y humildad que pretende transmitir. Especialmente, si hablamos también de sus apaciguadores y periféricos mensajes, cargados de alusiones a/hacia/hasta/para/por los pobres.
Instintivamente (¡cómo nos gusta a los periodistas apropiarnos de los personajes del momento!), si nos centramos en la cantidad de imágenes que sus gestos y acciones han generado y van a seguir generando: un día se sentó en el último banco de la capilla a la que acuden los trabajadores de El Vaticano. Otro día, decide no ocupar los habituales aposentos pontificios. Y, entre muchos ejemplos similares, este Jueves Santo, acudía a un centro de reclusión de menores en Roma para dar misa y actualizar una instantánea ya protagonizada. A la izquierda, le vemos siendo todavía Bergoglio; a la derecha, este jueves 28 de marzo:
Todavía hay quienes tienen dudas. Sobre todo, en su tierra… Menos -aparentemente- que hace quince días, pero aún… Eso sí, en voz baja. La bajada de tono parece ser la última orden.
Pero Bergoglio ya no es sólo Jorge. Porque el Pontífice -convertido en orgullo e ídolo nacional- nació en Buenos Aires, pero ya no es SÓLO argentino...
"Ex Jorge, ex Mario, ex Bergoglio, ex cardenal". Así titulaban el artículo en el que Jorge Fontevecchia escribe: "La misma sorpresa que nos produce ver a un argentino en una posición tan universalista nos impide comprender (y probablemente todavía también a él mismo) que progresivamente el actual obispo de Roma se tendrá que ir desargentinizando".
Otros, por el contrario, creen que -al menos durante los primeros años- influirá en su país... en la política, sin ir más lejos... porque, según estas mismas voces, ya durante sus primeros días de Pontificado, habría demostrado ser un "excelente... político".
…Es nada más y nada menos que el Jefe de un Estado poderoso y rico que sólo responde ante el Altísimo y, bueno, a nivel terrenal, ante los 1.200 millones de católicos que hay en el mundo. En territorio argentino, los fieles son más de 30 millones, casi el 80% de la población, así que su compatriota, Cristina Fernández de Kirchner, diría que pertenece “a todos y a todas”.
Sin embargo, a mí -personalmente- me pareció una despedida el mensaje que transmitió a los argentinos que, en la madrugada del 18 al 19 de marzo (fecha de su consagración), se sumaron aquella noche a la vigilia en la Plaza de Mayo de Buenos Aires:
Ahí, en plena madrugada, los organizadores del acto se pusieron en contacto telefónico con él y el presentador del evento -que parecía estar conduciendo más un “Mira quién baila” ó una tómbola- le dió paso para que los presentes pudieran escucharle a través de los altavoces: “Por favor, no se olviden de este obispo, que está lejos, pero los quiere mucho. Recen por mí”.
Hay aspectos y detalles que ya no tienen vuelta atrás. Es definitivo el adiós al sacerdote cercano del barrio de Flores… al jesuita que, para la prensa oficialista y aplaudidores varios de la Casa Rosada, habría sido demasiado “blando” con la dictadura...
Pero qué curioso… Tras la descafeinada reacción gubernamental a su nombramiento y ese empeñó mediático en remover el pasado para revivir y personificar en él a los eternos enemigos… llegó la reflexión y la llamada a la calma. De hecho, el jefe del gabinete presidencial, Juan Manuel Abal Medina, ha negado todo enojo por la elección de Bergoglio ("¿Cómo lo de Francisco puede ser algo malo?"). De paso, aprovecho la coyuntura para criticar a los medios que no comulgan con el gobierno, como "Clarín": "Inventan que estábamos enojados y después, como no lo estamos, dicen que cambiamos".
En la última semana, la presidenta se ha confesado -como ya sabíamos- muy creyente, pero -eso sí- poco practicante, aunque según ELLA: "Conozco a muchos que van todos los días a la iglesia y no estan TAN cerca de Dios", sentenció en plan homilía.
...Desde que regresó de Roma, sus discursos han hablado, principalmente, de combatir el odio y de impulsar la paz. Con motivo del "Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia" (este año marcaba el 37° aniversario del golpe de Estado que dio lugar a la ultima dictadura), hizo hasta acto de contrición: "No podemos tener la soberbia de pensar que nunca nos equivocamos".
Yo diría que sus más recientes mensajes han sido hasta similares -en forma y fondo- a los del Papa Francisco. Hay hasta quien dice que Cristina Fernández es el PRIMER MILAGRO del Santo Padre. Algunos, como podéis ver, han trasladado ese mensaje a las calles de la capital argentina:
Prácticamente desaparecido el fantasma del supuesto colaboracionismo (el Nobel de la Paz, Pérez Esquivel, considera que la suya fue "una diplomacia silenciosa" durante la dictadura), con más testimonios a favor que en contra en relación a casos como el del secuestro de los jesuitas Yorio y Jalics, AHORA todos quieren tener al Papa de su lado. Es -no nos engañemos- pura estrategia política... Y, a estas alturas, no debería sorprender a nadie. Lo que verdaderamente sorprende es lo que ha tardado el gobierno argentino -es decir, ELLA- en asumir la evidencia, que no tiene nada de divina.
En la Casa Rosada (y aledaños), nada se mueve sin que ELLA lo estudie, lo decida, lo apruebe ó desapruebe. En el ámbito que sea: desde la política monetaria -ahora con un dólar "paralelo" en la estratosfera- hasta la reacción oficial que ha de verbalizarse ante un hecho de fuerte alcance social, como fue el accidente de tren en la estación de Once el año pasado. Hasta hoy, nula.
La rodean amigos, asesores, colaboradores y afines y leales, pero sólo habla la presidenta (para eso tanta televisión pública y tantos dicursos en cadena nacional)... Y si hablan otros es porque así lo ha ordenado ELLA. Todo un riesgo. Personalismo aderezado con misticismo ó absoluta falta de confianza en los demás... ¡Vaya usted a saber si no es una mezcla de todo! O no... y lo que prima es la improvisación en cada momento.
El caso es que aquí, en una esquina de la Plaza de Mayo, ahora parece que ya hay mas papistas que en Roma.
Allí acudió Cristina Fernández, que fue la primera mandataria en ser recibida por el Papa Francisco. "Luego de pensarlo, la presidenta decidió que sería mejor resignarse a convivir con la realidad antipática", escribió James Neilson en "Perfil", un diario que -no sin sorna- habla de los intentos oficialistas por "cristinizar" al Papa.
Lo cierto es que, a partir de ese instante, todo cambió a este lado del Río de la Plata... Incluso Hebe de Bonafini, la presidenta de las "Madres de la Plaza de Mayo", más alineada que nunca con el mundo Kirchner (sobre todo, desde que su histórica Fundación está en el punto de mira de la Justicia por malversación de fondos públicos sin que a ella le salpique), ha reconocido públicamente la entrega y el trabajo pastoral de "Don Francisco", que es como se ha referido a él. Y esta mujer, normalmente, no se muerde la lengua.
Por su parte, Estela de Carlotto, de "Abuelas", ha concluido que "no vamos a hablar más" de Bergoglio ni su papel durante la dictadura, con la esperanza de que el nuevo rol le permita "abrir puertas para saber dónde están el resto de los nietos que faltan y los 30.000 desaparecidos".
..."Me había invitado a almorzar el nuevo Papa. Un argentino en la silla de San Pedro", escribiría ELLA en su cuenta de Twitter @CFKArgentina: "Al ingresar me invadió una tranquilidad perfecta y me sentí, por primera vez en ese lugar, más argentina que nunca".
"Llevaba un collar de perlas pequeñas, las más blancas que tengo. Las que me regaló Marta (su consuegra, recientemente fallecida), la mamá de Rocío (su nuera) en ésta, su última Navidad".
Desde España, así retrató la escena Alfonso Ussía: “Me ha parecido ejemplar y contundente la lección de humildad que le ha dado Cristina Fernández de Kirchner al Papa Francisco. Podría haberse presentado ante Su Santidad con una pamela negra de las que no caben ni en la Plaza de San Pedro, y lo ha hecho con un sencillo sombrerete con menos tela que el solideo del Santo Padre. Llevaba joyas y pulseras de oro, pero sin pretensión alguna. La amada presidenta de los descamisados, los montoneros, los peronistas y los desfavorecidos argentinos, no podía presentarse ante un compatriota ligera de adornos auríferos, porque una cosa es la sencillez y otra muy diferente acudir ante el Papa como si fuera una «tana» recién desembarcada”.
El contraste visual entre ellos, evidente. Lo digo por el negro y el blanco, no por discernir ahora quién es el yin y quién es el yang.
Las palabras fluyen entre ellos como se suceden normalmente entre dos personas que se conocen desde hace una eternidad. "Cuando estoy con Francisco", cuenta la presidenta en la red social, "le digo que como Megafón lo esperan batallas celestiales". Bueno, puede que también alguna que otra terrenal...
Hay intercambio de regalos. Como el mate 100% argentino que ELLA le regala y cuya imagen...
...enseguida vemos que forma parte de la campaña oficialista que, estos días, te puedes encontrar por las calles de Buenos Aires. Y pienso que sólo es el principio.
Para Tomás Abraham, en su artículo "La Doña, el Nene y el Santo Padre": "No es una mala noticia que una sociedad que hace años vive en estado de crispación por divisiones basadas en el odio, la envidia y la soberbia, de acuerdo a las palabras del Papa, lo haga ahora por grupos de portadores de sonrisas divinas, unos, y de sonrisas cancheras, otros".
De vuelta a El Vaticano y a aquel primer encuentro: La presidenta argentina comete un desliz producto de la confianza. Es humana y toca espontáneamente el brazo de Bergoglio. Lo retira enseguida. Y le pregunta al Papa: "¿Le puedo tocar?"...
...Es cuando él la besa.
Entonces, ELLA, como una niña a punto de recibir la Primera Comunión, dice: "Nunca antes un Papa me había besado".
Claro, todas las redacciones -atentas al minuto a minuto del partido- ponen en funcionamiento la maquinaria...
El relato sigue así, según @CFKArgentina: "Antes de pasar al comedor vuelve sobre sus pasos y me dice: Tengo algo especial para usted y quiero que lo guarde”. "Me entrega una rosa blanca. Es el símbolo de Santa Teresita, a la que siempre le rezo, me cuenta". "Es su santa preferida".
Hoy, sabemos -porque ELLA lo ha contado- que Cristina Fernández ya la ha metido en un libro para disecarla y que, posteriormente, se la lleven a la iglesia de El Calafate, su residencia en el sur argentino, cuya patrona es justamente Santa Teresita del Niño Jesús: "para que todos vean, los lugareños, los vecinos, los turistas, a esa rosa blanca que un Papa, que nació en Argentina, entregó en sus manos a la presidenta de todos los argentinos".
..."Nos sentamos a la mesa y le digo: Sabe que el día que lo eligieron en el santoral era Santa Cristina de Persia, la Sra de los Imposibles". "Se sorprende. (Zas, ya veo que Clarín en un rato titula: CFK le dijo al Papa que fue elegido gracias a ella…)".
"Me agradece mucho que haya ido. Le pregunto si acaso pensó que no iba a venir". “Uno nunca sabe” me contesta humilde. Tiene razón".
"Me habla de Malvinas, de la Patria Grande, de San Martín, de Bolívar… el Papa, se entiende?".
Es -Malvinas- uno de los temas que la presidenta, luego, destacará en rueda de prensa... Y una de las disputas internacionales por las que el Papa Francisco podría -solo "podría"- tomar partido...
Por lo pronto, para no interferir en las elecciones legislativas, NO va a viajar a su país de origen ANTES de octubre. "¡Cómo va a venir si todos lo quieren capitalizar", me decía uno de estos días Víctor, un taxista. El Vaticano sólo ha confirmado su asistencia en julio a la Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Brasil, aunque la prensa argentina daba por hecho -este martes- que su visita se producirá durante la primera quincena de diciembre.
Queda, por tanto, margen suficiente para que unos y otros se la preparen y -cada uno a su manera- intenten apropiarse del Pontífice. Porque ese parece ser el objetivo...
Tanto en la Tierra...
...Como en el Cielo.
Mirad -si no- lo que dijo desde Caracas, un Nicolás Maduro en plena campaña electoral: "Nosotros sabemos que nuestro comandante ascendió hasta esas alturas, que está frente a frente a Cristo. Alguna cosa influyó para que se convoque a un Papa suramericano. Alguna mano nueva llegó y Cristo le dijo, bueno, llegó la hora de America del Sur". Palabras por cadena nacional y al estilo del "club de la comedia".
Desde México, el académico alemán Heinz Dieterich, quien fuera principal asesor "teórico" de Hugo Chávez -el considerado "cerebro" del llamado "Socialismo del Siglo XXI", pero que se acabaría distanciando del presidente venezolano-, el que ha dicho que "Dios ha castigado a la presidenta argentina con el nombramiento de Bergoglio. Sólo el Diablo sabe por qué"... Uyyyy, muchos habrán visto en él y en tal afirmación al anticristo en persona...
Por su parte, Dilma Rousseff, que también tuvo la oportunidad de mantener un encuentro privado con el Papa Francisco, no ha faltado al rosario de declaraciones terreno-celestiales con frases como: "Si el Papa es argentino, Dios es brasileño"... Es imposible saber que informacion maneja la presidenta brasileña, a no ser que -con la vista puesta en el Mundial del 2014- tenga a Pelé a su lado -que seguramente tiene conexiones con el más allá- y pretenda ahora romper barreras y quitarle definitivamente el puesto a... ¿Maradona?
...Porque no sólo de política y religión vive el Hombre. También de mitos, algo que es único en Argentina. Y, claro, con un Papa tan futbolero como es Francisco, el universo del balompié, inevitablemente, tenía que entrar en juego...
Por si ya fuera poco el puesto que ocupan en el olimpo de los dioses el eterno "10" argentino y el "Messi... as", ya se habla y mucho de esta particular "Santísima Trinidad":
A nadie se le escapa que ya no podrá huir de nada ni de nadie. Quizás, por eso, el Jefe de la Iglesia Católica, repite insistentemente, una y otra vez: "Recen por mí, recen por mí".
Al preguntarle si de alguna forma está celoso, el cardenal argentino Leonardo Sandri ha llegado a decir -¡atención!- que hay que estar "loco" para querer ser Papa: "solamente a un loco puede ocurrírsele ser Papa con todos los problemas que hay. Le deseo lo mejor, no le tengo ninguna bronca". Sandri también ha hablado de la responsabilidad que el puesto representa y ha calificado de "completamente falso" el rumor extendido de que él mismo, junto con la diplomacia argentina en Italia, habrían intentado evitar la elección de Jorge Bergoglio. ¿Cómo? Pues filtrando, entre los cardenales, un dossier con información que debilitaría su nombramiento... Si efectivamente lo hubo, desde luego que no funcionó.
La ceremonia de asunción en la Plaza de San Pedro también dio para mucho. Cristina Fernández -al frente de una comitiva de 140 personas y en primera fila- recordaría, luego en Twitter, aquel 2005 en el que fue consagrado Benedicto XVI y al que asistió como esposa del entonces presidente Néstor Kirchner: "Cuánto tiempo. Cuántas cosas. Esta vez, en la Plaza San Pedro, él no pudo sentarse a mi lado".
Entonces, primera dama. Hoy, una presidenta única e inclasificable entre otros Jefes de Estado y entre otras reinas... como la futura de Holanda, la argentina Máxima Zorreguieta, que -aún con el Atlántico de por medio- contribuye (probablemente, sin saberlo) a este nuevo "Yo/Sho" monárquico argentino que recorre Buenos Aires, pasa por el norte de Europa y desciende hasta El Vaticano para regresar, de vuelta, a la tierra del drama, el psicoanálisis, el bife de chorizo y el tango.
El atuendo de la presidenta fue, cómo no, otro punto de atención. Imponente, con un llamativo sombrero made in Argentina, envuelta en ese negro que -en ELLA- es costumbre. A mi amiga María le decepcionó. Y es que nos creamos demasiadas expectativas. El "luto hot" -como llaman en su país a sus conjuntos con transparencias- sabíamos que tenía que dejarlo para otras ocasiones...
No quita que algunos periódicos españoles como "La Razón" y el "ABC" vieran en ELLA demasiada opulencia, justo después de que el Papa pidiese vestirse de austeridad. ¡Qué crueldad criticar su desplazamiento en jet privado hasta Roma! Hay una explicación: Tuvo que hacer uso de uno -perteneciente, según "Clarín", a la filial ESPAÑOLA de la firma "Tag Aviation"- porque el avión presidencial, el "Tango 01", tuvo que dejarlo en Marruecos para evitar un posible embargo a cargo de los fondos buitres. Sí, esos mismos que poseen deuda pública argentina y que, por cabezonería y sed de negocio, todavía no han cobrado. Recordad que ya lograron retener durante meses, en un puerto de Ghana, a la famosa "Fragata Libertad".
Última parte: el saludo al Papa ya consagrado.
También fue la primera en hacerlo y, al parecer, lloró, como luego haría el ecuatoriano Rafael Correa. Embriagada de emoción, en ese momento, le dijo al Papa: "Perdone, quiero pedirle que rece por la Argentina, por todos". Él, a su vez, de nuevo, le pidió que rezara por él. ELLA respondió: "Pero, por supuesto. Mucha suerte, le deseo muchos éxitos".
Todavía desconocemos si realmente los tendrá como líder politico y espiritual. Hay que esperar, dejar que pase algo más de tiempo, pero promete.
Según las encuestas que ya se han realizado en Argentina (de "Management & Fit", por ejemplo), vemos que el fervor del pueblo por su figura es, a día de hoy, inalcanzable: Aprobado por un 80% de los consultados -supera, con creces, la popularidad de la presidenta-, casi un 70% considera que va a influir en la política nacional, aunque la mayoría entiende que no tomará partido.
Vistos los datos, no hay suficientes razones como para no intentar apropiarse de él, de este nuevo Papa de nuevas formas que ya ha inspirado poemas, nuevos ritmos y letras musicales... hasta rutas turísticas por los lugares de su vida en Buenos Aires (una avenida de la ciudad de La Plata acaba de ser rebautizada como "Del Papa Francisco").
Así que, efectivamente, RECEN POR ÉL, si se lo pide el cuerpo.
Aprópiense -ó no- de sus mensajes.
Pero, sobre todo, voten... por quien quieran.
@_jcgallardo