Cierra el wachap y ponte a leer... por si se va la luz
jueves 3.oct.2013 por Agustín Alonso G. 0 Comentarios
El Gentrificador en Radio 5 nació hace pocas semanas con la vocación absoluta de ser un espacio para primeras obras, nuevas iniciativas y voces de menos de 30 años. Artistas, creadores, personajes habitualmente sin hueco claro en los grandes espacios de información cultural.
Cuando supe de la próxima publicación de la primera novela de Lara Moreno, antes de que empezase la promoción, me puse en contacto con ella para hablar del libro aquí. Digo esto como justificación porque no era consciente de que siendo de Lumen, o sea de Random House Mondadori, o sea teniendo el apoyo de una maquinaria publicitaria, estaría en El Ojo crítico, ABC, EFE con un titular que no es periodismo sino publicidad, El Cultural, etc. Tendría suficiente espacio sin necesidad de que yo le hiciese un hueco a su voz.
Pero, en fin, se trataba una primera novela, y me hubiera parecido feo no entrevistarla después de un mes persiguiéndola, así que aprovechando uno de esos días de espejismo radiante que es el veranillo de San Miguel, me cité en el Alma Café con ella. Iban a ser sólo veinte minutos, para no robarle mucho tiempo tras semanas de viajes aquí y allá presentando su obra. Pero acabó convirtiéndose en un café de hora y media en el grato local de la calle Santa Isabel, en territorio comanche de la gentrificación cool.
Enriquecedora conversación con Lara, con la que charlé del proceso de 5 años desde que empezó la novela hasta su publicación, de la chispa germinal de la historia surgida un día en la sierra madrileña, de la esclavitud de redes sociales y gadgets diversos. No filosofamos mucho, sin embargo, y eso me gustó. Me la imaginaba intensa y bajita. En cambio, me encontré una tía perspicaz y espigada a la que le gusta Breaking Bad y que se burla del título de "jóvenes" que seguimos dándonos los treintañeros peterpanistas a nosotros mismos.
Por si se va la luz, que de eso iba esto, es una novela de estilo contenido y poético, distanciado emocionalmente casi hasta la asepsia, que cuenta la vida de una joven pareja en crisis que se refugia en una aldea. Las diferentes voces de sus habitantes irán modelando el cuerpo de la historia, cuya mínima acción transcurre sobre todo en el interior de ellos.
La trama de Por si se va la luz, jugando con su título, se mueve precisamente en una penumbra habitada por seres y mundos vacilantes como el pábilo de una vela que se consume. El intento desesperado de volver a lo primitivo escapando del mundo hiperconectado e inabarcable de la ciudad, el núcleo de un sistema que hace aguas.
En la novela de Lara hay vuelta a lo rural y hay una sombra de tonos postapocalípticos, pero no tiene nada que ver con Intemperie, de Jesús Carrasco, novela de Seix Barral que se ha convertido con la ayuda del marketing en una de las sensaciones del panorama literario español en 2013. Y, sin embargo, es inevitable subrayar la coincidencia temporal de ambas novelas, que permitirá a muchos avezados periodistas hablar de tendencia, generación literaria o incluso de cambio del paradigma.
Durante la lectura de la novela me ha acompañado Repave, el segundo álbum -discazo- de Volcano Choir, proyecto de Justin Vernon paralelo a Bon Iver. Aunque cuando tocó elegir música para el quesito de esta semana me decanté finalmente por un primer álbum publicado en 2013. La canción es "Monument", de los británicos Fossil Collective.