Por soñar que no sea
"I have a dream". Yo tengo un sueño decía Luther King frente al Monumento a Lincoln en 1963. Hoy todos recordamos sus palabras. Hoy que EEUU celebra el Día de Martin Luther King. Hoy, víspera de la investidura de Barack Obama como presidente de los Estados Unidos. Nunca sabremos si Obama hubiera sido el sueño de Luther King, como lo es ahora de muchos americanos. Como lo es de Bruce Springsteen, que anoche le dedicada al futuro presidente su nuevo disco "Working on a dream".
Pueden comprobar que todo es cuestión de sueños. El de Luther King lo veremos hoy a través de los ojos de Gabriel Serrano, comisario de la exposición "Tengo un sueño", que se inaugurará el próximo día 21 en Nueva York. Springsteen nos lo hace llegar a través de sus letras, de su nuevo single "Life itself" que ya pueden descargarse en exclusiva en la página web de Radio Televisión Española.
Dionisio Ridruejo también tenía sueños, que se fueron transformando según caminaba por la vida. De ser un falangista convencido, la decepción y el desengaño lo llevan a la sensatez democrática. Su historia nos la trae Jordi Gracia, autor del libro "La vida rescatada de Dionisio Ridruejo", publicado por Anagrama.
¿Creían que se nos había olvidado? Ni en broma. Hoy también tenemos sueños macabros, tenebrosos, oscuros. Sueños con sabor a Poe. Sueños que nacieron hace 200 años como auténticos cuentos de terror.
Pasen... y déjense llevar por la imaginación. Que es gratis.
La dama dijo
Pues yo os propongo una película de Alan Alda llamada Dulce libertad. Una parodia del cine histórico americano. No solo muestra una parte de la historia "antigua" americana, sino de la "moderna".
Me pareció una sátira sarcástica e inteligente.
19 ene 2009