El olivo y el abuelo: realidad y ficción
Por David Bernal
“Haces una película en contra de que se arranquen los olivos y se vendan. Pero hay una escena donde se arranca un olivo. ¿Cómo contamos esto de una manera creíble?”. Esta fue, en palabras del productor Juan Gordon, la paradoja a la que se enfrentó el equipo de El Olivo a la hora de rodar. La idea de arrancar uno de verdad iba en contra de los valores de la historia. Hacerlo con efectos digitales tampoco tenía sentido porque la protagonista, Alma, se encarama a él tanto de niña como de adolescente. Finalmente optaron por construir un olivo artificial que fuera creíble. Aunque para eso primero había que encontrar uno que sirvi...