Fuego

Hoy cojo el blog en cuanto llego a la redacción -normalmente me pongo con él cuando el programa ya ha acabado-, porque me he levantado -nos hemos levantado- con una terrible noticia que deja al post anterior en una posición un tanto inoportuna: dos bomberos fallecían esta madrugada mientras trabajaban en las tareas de extinción de un incendio en Galicia. Me ha sonado como un golpe: ayer hablábamos de los escasos sustos que los incendios nos daban este año y hoy debemos lamentar dos pérdidas humanas. Porque el bosque se puede acabar recuperando, por costoso que sea, por triste y desolador que resulte ver cómo el fuego devora la Naturaleza... pero perder vidas humanas no tiene comparación. Por supuesto, nos retractamos de lo que decíamos ayer.

Hoy, viniendo hacia la redacción, el cielo de Madrid tenía un tono especial. Siempre lo tiene, nunca repite estampa. Nebulosas rosadas y amarillas, rasgando esa lona aún nocturna que cada vez va adquiriendo un azul más oscuro... Pese a los regalos que a veces nos otorga este cielo madrileño, anoche fue imposible ver las lágrimas de San Lorenzo.

Comments

[Anónimo dijo]

¡Ojalá los trajes de los bomberos llevaran alas ignífugas para ponerles a salvo!

¡Buen fin de semana! con playa o sin ella, con nubes o paisaje cerúleo.

P.D.: Un «10» en humanidad y profesionalidad

[Alberto García dijo]

Pues sí, es una pena. Hoy hacía viento y ayer hizo mucho calor en el conciertazo de Hombres G. Calor humano acompañado de cócteles y comida. Lástima que el aparcamiento no sea uno de los aliados de Madrid. Habrá que galopar, aunque siempre nos quedará Playa Girón, primera victoria al imperialismo yanqui.