A Villarrubia de los Ojos. Buena gente!
Ahora que estamos calentitos, recién salidos del horno, esto es, del estudio, ¿qué tal? Aquí capeando el temporal como podemos. Es una broma. Tengo la maleta detrás de mí. Nos vamos a Villarrubia de los Ojos, Ciudad Real. Allí nos esperan con la uva recién recogida y con los Ojos del Guadiana muy abiertos en el término municipal. Todo un pueblo vinculado a la agricultura que nos recibe en la Cooperativa El Progreso. Desde allí, rodeados de cepas que producen cada año alrededor de 70 millones de kilos de uva, os hablaremos de esa forma de vida que, afortunadamente, sigue dando de comer a toda una comarca. Por cierto, casi la mitad del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel pertenece a Villarrubia de los Ojos. Buena gente, nos han dicho. Lo veremos con los enólogos, agricultores, responsables de la cooperativa, alcaldesa, etc, etc, etc. Será después de dormir en un árbol (esto, recordadme que os lo cuente algún día) Y hoy me gustaría ponerles a estos buenos caldos un poquito de pan recién hecho. Con una reivindicación: un cero para todos aquellos que han hecho que las panaderías y hornos cierren, vendiendo un sucedáneo de pan congelado. Lo pongo en la boca del mejor panadero del mundo, premio 2012. Andreu Llargués ha vuelto de Alemania con este reconocimiento internacional, distinción que otorga la Unión Internacional de la Panadería y la Pastelería.
P.D. Entre los motes del lugar, éstos: “veranillo de San Miguel, 15 días antes, o 15 días después”. Por el veranillo nos vamos. Nos han dicho que probaremos los coñitos. No os asustéis, es un dulce.