Los megapresupuestos como argumento de venta
lunes 11.abr.2016 por Juan Herbera 0 Comentarios
La semana pasada reproducía un artículo de Dan Schechter publicado por The Wrap en el que se analizaba la remarcable resistencia de la asistencia al cine en el mercado norteamericano en los últimos 50 años y se alertaba del impacto que sobre el avance de la industria iba a tener el consumo doméstico. Continúa el autor con una segunda aportación, titulada esta ¿Cómo utilizan los estudios el presupuesto de los blockbusters para impulsar la asistencia a los cines?
Vuelvo a recomendar muy encarecidamente tener junto a la traducción que me dispongo a reproducir el artículo original (pinchando aquí), que incorpora gráficas muy ilustrativas como la que abre el post, en la que se informa de los estrenos en el mercado norteamericano entre 2000 y 2014 según el tipo de compañía, diferenciando por majors (agrupadas en la Motion Picture Association of America, MPAA), subsidiarias de las majors y el resto de empresas (lo que denominaríamos distribuidoras independientes). Los destacados son los siguientes:
- El número de estrenos crece (cerca de 700 comparados con los 500 de hace una década)
- Las películas independientes son las que concentran la totalidad del incremento
- Las producciones de los grandes estudios han descendido sustancialmente en número desde su máximo en 2006
El dinero invertido en la producción cinematográfica ha crecido un 50% desde 2000, con la mayoría de los nuevos dólares yendo a propuestas de gran presupuesto
Por tanto, ¿qué ha hecho Hollywood últimamente para disminuir ese movimiento potencial a que el consumo doméstico puede someter a la industria cinematográfica?
La producción de películas crece, desde las 557 en 2009 a las 694 de 2015 (5% de aumento por año). Pero los estrenos de las majors decrecen, de 111 a 91; todo el incremento proviene de novedades de las mini-majors y las independientes.
No obstante, los estudios siguen gastando dinero. Así pues, ¿en qué se lo están gastando?
Los grandes estudios de Hollywood siguen intercambiando presupuestos por películas de altísimo coste, también llamdos tentpoles en terminología inglesa. En los últimos 15 años, el promedio de los presupuestos de producción ha aumentado más del 50% (o aproximadamente un 3% anual). Las películas con presupuestos superiores a $100 millones suponen en la actualidad más del 15% del total.
Así como los estudios vierten más dinero en los tentpoles, lo retiran de los títulos de bajo coste (aquellos con presupuesto de entre $5 millones y $20 millones) y empujan a las películas de tamaño medio (presupuestos de entre $50 millones y $100 millones) al terreno de los tentpoles.
La siguiente gráfica muestra el número de estrenos de las majors, sus subsidiarias y las mini-majors entre 2000 y 2014 según el presupuesto de las producciones (menos de $5 millones, de entre $5M y $20M, de entre $20M y $50M, de entre $50 y $100M, de entre $100M y $150M y de más de $150 millones). El autor deja los sigueintes destacados:
- Los presupuestos se hacen cada vez mayores, hay más títulos con costes de $100 millones o superiores
- El nivel de títulos de bajo coste (entre $5 millones y $20 millones) está siendo desplazado
- Nada indica que esta tendencia esté cambiando
Por tanto, ¿cuánto dinero ha emigrado actualmente hacia las película de gran presupuesto? Probablemente más del que imagináis.
El gasto total en producción de los grandes estudios de Hollywood se ha incrementado en casi un 50% desde 2000, alcanzando los casi $9.000 millones en 2014. Casi todo el crecimiento proviene de títulos de alto presupuesto, con las películas con un coste de $100 millones o más añadiendo más de $1.000 millones al gasto total desde 2010.
La última gráfica presenta la evolución del gasto en producción de las películas norteamericanas entre 2000 y 2014 según su 'tamaño', mostrado en billones de dólares ($1 billón=$1.000 millones) y con los mismos grupos de coste de producción vistos en el gráfico anterior. Los destacados:
- El la década que desemboca en 2010, los presupuestos de producción crecieron desde los casi $6.000 millones hasta los cerca de $9.000 millones
- En los últimos cinco años, las mega-películas ($100 millones o más de coste) han crecido en su conjunto en más de $1.000 millones
- La mayor parte del descenso proviene del nivel de películas de bajo coste (de la categoría de entre $5 millones y $20 millones)
Los estudios continúan orientando la complacencia de los consumidores a pagar por películas de gran presupuesto con escenarios y efectos visuales que deben verse en una sala de cine para poderse apreciar al máximo. Esa fue la premisa de la revolución del 3D, que exploraremos en un próximo artículo.
En cuanto al mercado español, en esta ocasión solo puedo aportar algunas cifras provinientes de mi base de datos en lo que a número de estrenos se refiere. No tengo controlado el 100% de los mismos, pero sí un altísimo porcentaje. El año pasado, 2015, sería el que presenta un número más alto desde 2007, que es, a su vez, el segundo con un mayor número de estrenos: 452 en 2015 frente a 445 en 2007. De por medio, 2010 con el número más bajo, 380. El incremento en esos cinco últimos años habría sido del 19% (en el mercado norteamericano, entre 2009 y 2014, el aumento fue del 24,5%). También en nuestro país se ha producido reducción muy significtavia del número total de estrenos que provienen de las majors. En los últimos años el aumento es consecuencia de las películas que llegan de mano de compañías independientes con un importante incremento de lo que podríamos denominar micro-distribuidoras que comercializan micro-producciones. También su peso en la recaudación global es micro.