Las hogueras, elemento común europeo para celebrar San Juan
sábado 24.jun.2023 por Ángela Gonzalo del Moral 0 Comentarios
Foto: Mads Claus Rasmussen / EFE
Este fin de semana muchos países europeos han celebrado una de las fiestas más populares y comunes en el continente: la noche de san Juan. Todas ellas impregnadas de misterio, leyendas y magia.
La manera de celebrarlo es muy diferente en cada lugar, pero todos muestran la alegría de la época más feliz del año. Aquella en que se recogían las cosechas. O en nuestra época, sinónimo de la llegada de fiestas, vacaciones o de mayor tiempo para estar en la calle.
Los países nórdicos lo celebran aprovechando al máximo los largos días. Interminables en algunos casos. A las afueras de Reijiavik, la capital islandesa lo hacen a ritmo de música, en el Secret Solstice Festival... Las actuaciones se suceden o se solapan durante 72 horas de sol continuado. Y todo entre piscinas geotérmicas, un glaciar o a través de un túnel de lava.
En Suecia celebran el midsommar. Siempre conectados con la naturaleza se trasladan al campo, jardines, o cabañas de verano. Mantienen las tradiciones con danzas, adornándose con coronas de flores, escuchando fábulas y leyendas, bebiendo y comiendo. La forma más atávica de celebrar la llegada del buen tiempo y la alegría es plantando una cruz de madera cubierta de hojas donde se congregan para bailar alrededor. Los finlandeses disfrutan esa noche junto a los lagos con hogueras -kokkos-, pescando y bailando.
En la Sakt Hans, los daneses queman figuras de paja con forma de bruja para ahuyentar los malos espíritus, y los noruegos plantan alguna hoguera y cruces de madera, mientras se reúnen a cenar y contar historias de trols. Igual que en otros pueblos del norte de Europa las mujeres recogen flores y las colocan bajo la almohada para soñar con un futuro matrimonio.
En Noruega encendían el fuego especialmente a lo largo de la costa. Mientras otros prefieren verlas desde el mar. En Alesund, tienen el récord de la hoguera más alta del mundo, con 47 metros de palés de madera. Hace 150 años llegaban a encender unas 50 hogueras, actualmente solo una.
La víspera del sankthans, los noruegos acudían en masa a las iglesias o lugares de culto buscando curación de enfermedades y alivio del dolor.
Los pueblos eslavos reciben de una manera especial el inicio del verano. Allí en vez del fuego todo está relacionado con el agua. Debido al calendario ortodoxo, el Iván Kupala, o noche del bautizo de San Juan, se celebra a principios de julio. Sus inicios también fueron paganos, y era para esas fechas, igual que al inicio del año, cuando la iglesia permitía bañarse o nadar en ríos y lagunas.
En Letonia arrojan las coronas del año anterior para espantar los malos pensamientos y dejar atrás los viejos problemas.
En Lituania, en los castros de Kernav, el monte Rambynas o en Jonava, las mujeres confeccionan guirnaldas de hierba y flores, se encienden enormes hogueras, la gente baila y canta y, cuando oscurece, salen en busca del misterioso helecho en flor.
Dice la tradición báltica, la botánica lo niega, que ese es el único día del año en que florecen los helechos una planta que atrae a la buena suerte, la sabiduría o la prosperidad... especialmente para aquellos que la recolecten. Este día es también la onomástica de uno de los nombres de hombre más populares de Lituania: Jonás.
En Portugal es la noche preferida por los portuenses. Oporto celebra con verbenas populares en la calle y con martillos de juguete la fiesta de Sao Joao. Con ellos golpean a la gente para desearles buena suerte. No faltan los fuegos artificiales lanzados desde el emblemático puente de Dom Luis.
Un lugar privilegiado para verlo... y disfrutarlo, es el distrito cultural gastronómico WOW Porto, un balcón excepcional situado en Vila Nova de Gaia, frente a la histórica ciudad.
En Irlanda la víspera de san Juan se encendían hogueras en las cimas de las montañas, cruces de caminos y campos. La hoguera era fuente de buena fortuna y sus llamas protegían a los presentes. Se mezclaban las tradiciones cristianas de la noche de San Juan con vestigios de los antiguos celtas.
En la colina de Tara considerada la antigua sede de los grandes reyes irlandeses, en este monte funerario y centro de rituales se ha celebrado la llegada del verano a lo largo de miles de años. En la actualidad numerosos grupos de personas vestidas con tradicionales mantos druidas y capuchas ofician ceremonias paganas con las primeras luces del día.
En Austria, reciben a esta estación del año con la fiesta del fuego encendiendo hogueras en las cimas de las montañas. Cada vez se ven menos, porque como ocurre en muchos países las estrictas medidas de seguridad para evitar incendios, las han ido relegando. Pero una de las vistas más atractivas eran ver las hogueras mientras se navegaba por ríos como el Danubio.
Foto: ©Oscar Rodbag-Archivo Pnaltpirineu
Fuego, música, pólvora, deseos, diversión marcan la que está considerada como la noche más mágica del año en muchos lugares de España. Verbenas y fiestas populares para celebrar la noche más corta, especialmente en Alicante con la cremá, el paso del fuego de San Pedro Manrique, a noite da queima en A Coruña y las revetlla de San Joan o la Nit del Foc en Cataluña.
En los Pirineos cuando cae la noche, los habitantes de la zona bajan con antorchas encendidas desde las cumbres de las montañas hacia los pueblos y ciudades. Con ese fuego prenden las fogatas preparadas en el centro de los municipios. Los jóvenes suelen llevar las ramas de fuego como un símbolo de paso de la adolescencia a la madurez. Todo ello acompañado con música, cantos, bailes folclóricos y comidas colectivas.
Donde celebran de una manera especial esa noche mágica es en Alicante. Con monumentos, como llaman a las hogueras. Aunque las fiestas duran del 20 al 29 de junio, es el 24 cuando se celebra la Cremà y luego la Banyà, que es cuando los bomberos apaga con agua todas las hogueras.
En la mayoría de países del hemisferio norte, donde el solsticio de verano es en junio, estas celebraciones suponen el pistoletazo de salida de las vacaciones, fiestas populares y el tiempo libre.