Transparencia europarlamentaria en las redes sociales
La mayoría de europeos ven a las instituciones y los políticos que las dirigen como si vivieran en un castillo aislado, en lo alto de una montaña y ajenos a los problemas cotidianos de los ciudadanos. En Bruselas conocen esa situación y aunque intentan reducir esa distancia, los ciudadanos no acaban de sentirlos cercanos. Una de las opciones más utilizadas por los servicios de información y comunicación es internet. Desde hace años invierten personal y fondos para reducir la brecha entre unos y otros.
El debate del estado de la Unión, celebrado el miércoles 14, en Estrasburgo, se pudo seguir en streaming, y posteriormente el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, era entrevistado por tres youtubers con miles de seguidores en ese canal y transmitido a través de twitter con el hastag #AskJuncker. La idea era que cada uno de ellos preguntara, -sin haber pactado nada anteriormente, lo que quisieran-. Solo una de las entrevistadoras, la francesa Laetitia Bribes denunció presiones de Google y Youtube para que moderara el tono de las preguntas. La Comisión niega que tenga relación con esas presiones.
No es la primera vez que un comisario se pone a disposición de youtubers o twitteros para debatir algún tema. Todavía no es una práctica habitual, pero este último caso es un ejemplo de las dificultades y trabas que supone para los responsables comunitarios adaptarse a los nuevos medios de comunicación.
Hoy en día podemos seguir las sesiones del Parlamento, en streaming, en nuestro teléfono móvil, acudir virtualmente desde nuestra casa, a una rueda de prensa de las dos grandes instituciones europeas, o comentar vía facebook nuestras dudas con el presidente del Parlamento Europeo, como ocurrió la víspera del debate sobre el estado de la Unión. Durante media hora los seguidores de esta red social preguntaron libremente a Martin Schulz, algunas cuestiones que preocupan en estos momentos a los ciudadanos. Más de 1 millón cuatrocientas mil personas han visto el vídeo. Su oficina del Parlamento en Cataluña cuelga vídeo-retratos de algunos eurodiputados, y la oficina del PE en Madrid tuitea en cada sesión plenaria, vídeos y acuerdos que van aprobando los eurodiputados. Son solo algunos ejemplos de la labor de comunicación que hace esta institución para informar de la vida diaria de la eurocámara. La única institución elegida directamente por los ciudadanos.
En una entrevista que realicé hace unos meses con el portavoz del Parlamento Europeo, Jaume Duch, hablábamos de ese gran reto que es aproximar las instituciones a los ciudadanos y como internet ha facilitado ese acercamiento.
Jaume Duch.- Con el avance de internet y de las redes sociales, nuestra institución tiene por primera vez la posibilidad de llegar directamente al ciudadano, o al menos al ciudadano que está interesado o que en algún momento pueda estar interesado por los asuntos europeos. Son ciudadanos que sienten la necesidad de saber qué está haciendo el Parlamento Europeo, qué hacen los diputados, a qué se dedica el eurodiputado al que votó, o aquel otro al que no votó, qué temas se están debatiendo, qué está pasando, y eso puede seguirse ahora a través de internet y las redes sociales.
Canal Europa.- ¿Qué dificultades encontráis para llegar hasta el ciudadano, para ofrecerle información sobre los temas que se tratan en el PE?
Jaume Duch.- El problema es la lejanía, el PE no está tan cerca de la gente como el parlamento nacional, los de las comunidades autónomas o los ayuntamientos. Lógicamente esa lejanía se traslada a la acción política. Al ciudadano le cuesta saber qué hace la eurocámara, qué poderes tiene, en qué decisiones participa. Nosotros hemos de transmitir una realidad, que se trata de una institución en evolución, -como la propia UE-, pero ahora es una institución muy poderosa e influyente, algo que no tenía hace diez o veinte años.
Canal Europa.- Eso significa un gran esfuerzo de personal y económico para la propia institución
Jaume Duch.- Más que un esfuerzo es una obligación, que además está recogida en el Tratado de la Unión Europea, basada en el principio de participación democrática y transparencia. Tenemos que poner a disposición de la gente toda la información, explicarles qué es lo que pasa, que puedan seguir en directo las sesiones plenarias a través de internet o las de las comisiones parlamentarias. Ponemos a disposición del ciudadano todo el trabajo de los europarlamentarios, lo que debaten en las las diferentes comisiones, y eso se hace facilitando la lista de participación de votaciones, para que sepan que ha votado cada diputado. Todo tiene que estar a disposición de quien quiera consultarlo. Eso es dinero, es esfuerzo, pero también es calidad democrática.
Canal Europa.- Por experiencia propia, sé que acceder a la página del Parlamento es entrar en un mundo amplio, con infinidad de documentos tanto escritos como visuales, gráficos o de sonido. Y supongo que sabéis que es lo que le busca al ciudadano, por qué temas se interesa el internauta o que aspectos son más atractivos.
Jaume Duch.- Lógicamente sabemos qué secciones son las que más se visitan en las páginas de la web. Muchas veces son unos temas concretos y en ese sentido es curioso porque hay temáticas que pueden interesar a los españoles y que no tienen ningún interés para finlandeses o suecos. Pero sobre todo comprobamos que se consultan mucho más las páginas prácticas, principalmente las que están relacionados con los derechos, como el derecho de petición, para acceder a una beca, para una estancia profesional en el Parlamento, cómo funciona la iniciativa ciudadana legislativa.... Este tipo de información, que es muy práctica, por supuesto es la que más se consulta. Las páginas que interesan mucho a los ciudadanos es la ficha del diputado, para saber quién es el diputado, su curriculum, a qué comisiones pertenece, en qué temas interviene, que contactos tiene. Ahí se nota el interés por conectar con la actividad de la institución y la interactividad entre los ciudadanos y los diputados. Es algo que funciona muy bien a través de las redes sociales
Canal Europa.- Estamos hablando de una intitución política y los que organizáis esa información, supongo que tenéis muy claro diferenciar entre actividad política o información. ¿Es difícil mantener la objetividad?
Jaume Duch.- Nosotros hacemos dos cosas. Una es la tarea didáctica, donde no entramos en el terreno político, tenemos que ayudar a la gente para que entienda lo que hace el PE, para qué sirve y cómo funciona, porque eso es como abonar el terreno para que los partidos políticos puedan hacer su trabajo. La gente no está interesada en debatir o dirigirse a nosotros, sino a los diputados. Por eso, la segunda cosa que hacemos es facilitar la comunicación entre unos y otros. Creamos plataformas, plataformas en las que la sociedad, los electores, los ciudadanos por un lado y los diputados por otro, puedan estar en contacto, discutir o influir. En algunos casos hemos comprobado como sin ninguna organización establecida, la gente de la calle ha conseguido influir en algunas decisiones que posteriormente han tomado los diputados.
Canal Europa.- Y ahí entran las redes sociales, ¿Yo creo que no os perdéis una y estáis siempre atentos a lo que surge en internet?
Jaume Duch.- Nuestra política es que en internet, casi por principio, hay que probarlo todo, y luego si funcionan se sigue y si no se dejan. Eso quiere decir que estamos presentes en todo tipo de redes sociales, en cuanto comienzan a tener alguna importancia. En este momento trabajamos en 12 plataformas que van desde Facebook a Instagram, pasando por Pinterest y acabando por Linkedin. Somos la tercera institución política con más seguidores en el mundo, con más de un millón y medio de followers. Además somos muy activos en otras plataformas como twitter o youtube.