Una proeza
lunes 27.mar.2017 por Ignacio Pérez Lorenz 0 Comentarios
Los datos, más de 4.600 copas utilizadas y 1.500 botellas abiertas. Frente a ellas inicialmente 240 catadores compitiendo por parejas. Siete vinos en cata a ciegas sirvieron para seleccionar a las diez parejas finalistas.
Y de nuevo siete vinos para elegir a los ganadores. Dos hombres fueron capaces de adivinar –también a ciegas- que uno de ellos era Diamond Creek, un tinto de Napa Valley y otro Berthet-Bondet Château-Chalon, un vino del Jura, Francia, que recuerda al jerez.
La proeza de acertar esas marcas y acercarse mucho a la respuesta correcta en otras preguntas (país, zona, denominación de origen, variedad o variedades utilizadas y bodega) la realizó la pareja formada por el comercial de una empresa informática, Ignacio Villalgordo y el hombre de Parker en España, Luis Gutiérrez. Se llevaron los treinta mil euros destinados a los vencedores de esta edición de Premio Vila Viniteca y dos mil más en copas y decantadores de la casa Riedel. Nos dejaron a cambio la sensación de que ahora estamos bastante mejor.