Alto y bien
domingo 2.jul.2017 por Ignacio Pérez Lorenz 0 Comentarios
Allí y ahora casi todo parece diferente. Sobre todo un paisaje salpicado al pie de sus carreteras por nuevas bodegas y cepas recién plantadas. Es el precio de ser el vino de moda y la denominación de origen de más éxito, al menos comercial.
Está claro que hay ruedas y ruedas y que la zona tiene capacidad para satisfacer todo tipo de paladares. De agradecer que entre tanta novedad surjan proyectos que busquen también la grandeza que ya ofrecen, desde hace algún tiempo, unas pocas bodegas consideradas hoy como clásicas.
El último en sumarse, un curioso e interesante Camino de Magarín 2015 (16 euros) del grupo Torres. Su intento para ocupar un lugar en ese firmamento ha comenzado por escoger a la verdejo como única variedad. Los siguientes pasos, tres tipos de fermentación (acero inoxidable, huevo de hormigón y barricas de roble francés) y una crianza prolongada (cuatro meses) sobre lías.
Los viñedos, de entre 10 y 15 años, se completan con el impulso de cepas más viejas. Y dedican, como hacen en otras zonas, especial atención a conocer y seleccionar sus parcelas. Tanto esfuerzo se traduce en un vino serio, intenso y complejo basado en un estilo tan exigente como se pueda imaginar. Alcanzar en la primera edición el nivel al que parecen aspirar nunca es posible pero nadie puede negarles que apuntan alto y apuntan bien.