Eterno y juvenil

 

 

 

Tiempo, frescor, fruta y grandeza son algunas de las claves que permiten crear un vino memorable. Y todas ellas están presentes en este Colección 2014 (19 euros) de Pazo de Señorans. Una casa empeñada desde sus comienzos en la búsqueda de una nueva dimensión para el albariño: ocupar un lugar en ese espacio reservado a los grandes blancos de cualquier parte del mundo.

Vendimia manual y selección de uvas marcan el inicio de un proceso, sin secretos, que incluye varios meses de crianza sobre lías en acero inoxidable y no menos de dos años de afinado en botella. La forma, ajena a cualquier injerencia, de recrear aromas, sabores y sensaciones. Y de construir una marca fiel a la tradición, al entorno, la variedad y el clima.

Como destacada elaboración de esas Rías Baixas, enamora desde el primer momento por su delicadeza y la belleza de sus apuntes florales. La suma de recuerdos a piel de cítricos y frutas con hueso, bañadas en su exquisita acidez, terminan de definir una muy compleja expresión. Le acompañan también notas punzantes como agradable contrapunto a su intensidad y volumen. Algunas de las muchas sorpresas de otra gran añada que provoca una emoción y un recuerdo casi eterno y todavía juvenil