Veintisiete. No perdamos el tiempo
¿Qué puede hacer uno cualquiera para ayudar a resolver la maldita crisis no siendo banquero sino poeta lírico? ¿Qué pueden hacer los poetas no licenciados en económicas para espantar a la innombrable, a la bicha, a la puta crisis? ¿Por qué perder el tiempo el poeta en cantar al amor, a la luz del ocaso, a la mar o a la belleza de una rosa mientras existen corazones que se paran por falta de glóbulos rojos, banquetes de cáscaras, padres que madrugan no para ir al teatro y se cantan padrenuestros con la letra casi igual desde hace dos mil años?
Y ¿qué se puede hacer, desde la radio, para hacerla menguar a la crisis? No hay demasiado dinero aquí, pero buenas voces, de esas siempre andamos sobrados. La mejor labor espiritualmente humanitaria de la radio ha sido siempre esa sagrada actividad que consiste en atender las "peticiones del oyente". El Audio Para Recordar de turno no es otra cosa que un momento perdido de la radio del 9 de mayo del año 1979, es decir que hace tanto tiempo de aquello que aún
abundaban los espacios radiofónicos de poesía pura y dura. La oyente que pidió aquella noche fue Rocío Blanco. Quería escuchar el "No perdamos el tiempo", de Gloria Fuertes, un poema que se pregunta y se responde sobre qué diablos pueden hacer humildemente, modestamente, los poetas, mirando a esa parte del mundo que les rodea de la que no se puede cantar su belleza porque no la tiene. Poesía pura y dura de Gloria Fuertes, en la radio de una noche de mayo de 1979.
Déjà vu dijo
Poco inspira el panorama para la poesía florida, con políticas tele-dirigidas gobierne, quien gobierne. Esta mujer con voz rota, siempre me gusto su poesía, por ser diferente.
http://www.youtube.com/watch?v=pxZTm2M2hiE
15 abr 2012