Esperando el fin del mundo
sábado 12.nov.2011 por Marciano Pizarro 6 Comentarios
…Y como parece que se retrasa un poco, qué mejor que esperar el fin del mundo disfrutando tranquilamente de la edición terráquea de Melodías Pizarras. Ya puede el cielo caérsenos encima, que oyendo a Cab Calloway, Little Richard, y los Skillet Lickers, como que da un poco lo mismo.
Miss Sissi dijo
El 11-11-11 el Apocalipsis oyó Melodías Pizarras y decidió que los humanos merecemos otra oportunidad!
Srta Chinchilla dijo
Queridos amigos! ¡Que feliz me hace sentarme junto al transistor y escuchar estas perlas que me dan tanta nostalgia de un tiempo que se supone que no he vivido! Normalmente les escucho al volante pero hoy puedo al fin dejarles esta nota de saludo y agradecimiento con cariño y una petición... He intentado localizar una grabación de "Wake up and dream" del inefable señor Porter pero no lo consigo... ¿Me darían ese placer?
Miguel Berlin Pizarro dijo
Estimados primos, tan concentrado estaba en mi fin de semana Toledano, estudiando como un poseso, que se me olvidó darle corriente a mi transistor. Pero algo en mi interior se revolvió, por la necesidad de los grandes temas pizarreros, y me advirtió de mi desliz temporal. Y es que sin la dosis semanal de Pizarra no sé que haría en la lejana Prusia!! Salud y Pizarra!!
DJ Pirriqui dijo
Vaya par de programones, Maestros. Vamos a tener que pedir todos los fines de semana un fin del mundo, pero pizarro!
Mrs. Slate dijo
¿Qué sería de las tardes de viernes y sábados sin esos maravillosos sonidos pizarristas? Sin duda una tediosa espera al fin del mundo... Esperemos estas fantásticas melodías nos acompañen hasta el final para poder despedirnos con un deleitante ¡¡salud y pizarra!!
Innis dijo
Creo que soy una de las oyentes más jóvenes de vuestro programa, pero nunca puedo comentar porque siempre os escucho cuando estoy sacando a mi perro. Llevamos siguiendo esta rutina desde hace unos seis meses, pero este último viernes nos salvastéis no unos buenos arañazos. Uno de los parques de nuestra ruta está lleno de gatos salvajes y nos empezaron a rodear para atacarnos. Cuando intentaba agarrar a mi perro para que no se acercara a esos bichos sarnosos, se soltaron los cascos de mi móvil y empezó a sonar a toda pastilla la canción de la mula de Jack. No sé si fueron las risas de los músicos o las ventosidades simuladas, pero el resultado fue buenísimo: mientras se apartaban asustados, nosostros dos pudimos salir corriendo.
No puedo dejar de agradeceros la elección de esa canción en vuestro programa, porque no nos han vuelto a molestar desde entonces.