¿En qué se diferencia el cerebro de las personas introvertidas y extrovertidas?
viernes 3.mar.2017 por Equipo CogniFit 0 Comentarios
- Las personas introvertidas tienen más materia gris, relacionada con un mejor pensamiento abstracto y mejor toma de decisiones.
- Las personas extrovertidas buscan más aventuras, desafíos sociales y asumen más riesgos.
Por Andrea García Cerdán, Psicóloga CogniFit (Evaluaciones neuropsicológicas y estimulación cognitiva)
¿Te has preguntado alguna vez por qué los introvertidos y los extrovertidos son tan diferentes? Una persona introvertida prefiere actividades tranquilas, lejos de fiestas o grupos grandes de personas. Una persona extrovertida prefiere lo contrario: cosas nuevas, mucha gente, música alta… ¿Sus cerebros funcionan diferente? La ciencia nos lo desvela.
La mayoría de nosotros no somos ni extrovertidos puros ni introvertidos puros. Ambas dimensiones son los extremos de un continuo, y en general tendemos a situarnos entre ellas. Algunos caerán del lado de la extroversión, otros del de la introversión y otros en el centro. Tampoco hay un rasgo mejor o más deseable que el otro, ni unos son más inteligentes que otros.
Un error frecuente es identificar la introversión con la timidez. La timidez puede darse en cualquier persona, independientemente de si es extrovertido o introvertido.
La timidez es una sensación de inseguridad o vergüenza, que una persona siente ante situaciones sociales nuevas. Las personas tímidas suelen tener déficits en habilidades sociales.
La introversión es más una motivación. Los introvertidos se interesan por sus pensamientos y sentimientos, por su mundo interior. No tienen por qué ser tímidos (simplemente no buscan muchas relaciones sociales).
Eysenck, en la década de los 60, describió la extraversión como una dimensión de la personalidad. Y esta dependía de nuestro nivel de activación cerebral. Los extrovertidos tenían un nivel de activación bajo y por ello necesitaban aumentarlo mediante estímulos externos (relaciones sociales, café, música fuerte…). Los introvertidos tendrían un nivel de activación muy alto, por ello, para equilibrarlo, tenderían a las actividades tranquilas. Sin embargo esta teoría no se ha visto muy respaldada científicamente.
Las personas extrovertidas tienden a emprender aventuras, desafíos y asumir riesgos. Esto es debido a que muestran respuestas más fuertes a la emoción y recompensa. En 2005 un estudio demostró que las diferencias entre ambos tipos de cerebros se deben a la acción de la dopamina. Este neurotransmisor cerebral se encarga de transmitir información relacionada con la recompensa y el placer. En el estudio, los investigadores usaron un escáner cerebral para medir las respuestas de los participantes que estaban haciendo una tarea de apuestas. Encontraron que cuando las apuestas conducían a resultados positivos, los extrovertidos mostraban las respuestas más fuertes en las regiones cerebrales relacionadas con la emoción y la recompensa (amígdala y núcleo accumbens). El cerebro extrovertido tiende a “empujar” a estas personas a la búsqueda de “recompensa”. Por eso, es probable que busquen más aventuras, desafíos sociales o asuman más riesgos.
Las personas introvertidas son más sensibles al castigo, por lo que tienden a respetar las normas: Según otro estudio, los extrovertidos, son más sensibles a la recompensa y los estímulos placenteros que los introvertidos. Las personas introvertidas son más sensibles al castigo, por ello también tienden a respetar más las normas. Es decir, los extrovertidos aprenderán más mediante recompensas y los introvertidos mediante castigos. Por ello, a la hora de educar a nuestros hijos, hay que tener muy en cuenta su temperamento.
Las personas introvertidas tienen más materia gris, lo que está relacionado con un mayor pensamiento abstracto y una mejor capacidad de toma de decisiones: Otro estudio llevado a cabo en 2012 por la Universidad de Harvard, descubrió que los introvertidos tenían mayor materia gris (compuesta por cuerpos neuronales) en la corteza prefrontal, un área relacionada con el pensamiento abstracto y la toma de decisiones, que los extrovertidos. Esto puede explicar por qué los introvertidos tienden a sopesar todas las opciones antes de tomar una decisión, y por qué los extrovertidos suelen vivir más el momento, tomar más riesgos y ser más impulsivos.
Características del cerebro introvertido:
- Baja activación de los circuitos de recompensa. Son menos sensibles a las recompensas.
- Más sensibilidad a los estímulos aversivos, lo que explica que aprendan las normas mejor.
- Tienen más desarrollada la zona del cerebro relacionada con la planificación, pensamiento abstracto y toma de decisiones, lo que explica que sean más racionales a la hora de tomar una decisión y no se dejen llevar por las emociones del momento.
Características del cerebro extrovertido:
- Su sistema de recompensa está más activado. Son más sensibles a los estímulos positivos y placenteros. Esto explica por qué son buscadores de sensaciones y asumen más riesgos.
- Tienen menos sensibilidad a los estímulos aversivos o negativos. Por ello los castigos no son muy eficaces en estas personas.
- Tienen menos desarrollada el área cerebral encargada de la planificación. Por ello suelen ser más impulsivos y viven más el momento. Planifican menos.
Todas estas diferencias explican por qué los introvertidos y los extrovertidos se comportan de manera diferente. Realmente existe una base neurológica en sus conductas y motivaciones. Sin embargo, no podemos decir que las diferencias cerebrales sean la causa de esas diferencias de conductas. Bien puede ser que los diferentes comportamientos hayan modificado el funcionamiento y la estructura de su cerebro.