Brie Larson, triunfa en los Oscar

-Alfombra roja de los Oscar 2016-

Ha sido la triunfadora de la noche y esta vez se han cumplido los pronósticos. La actriz Brie Larson ya forma parte de la historia de los Oscar por ganar uno en la categoría de actriz principal, por su papel en la película Room. Pero Larson ya había ganado horas antes, fue nada más pisar la alfombra roja.

En un evento tan dado al disfraz y al ridículo, la joven actriz optó por vestirse, arreglarse, pero con naturalidad. El vestido, joven y de una firma que ha rejuvenecido en pocas temporadas, es perfecto para su edad y estilo, lo mismo que el peinado y el maquillaje. Todo correcto, bajo control. 

La actriz ha escogido un vestido de la casa Gucci, diseñado por Alessandro Michelle que también ha ido a la gala, y que además ha vestido a Jared Leto. El diseño de la actriz tiene tirantes, escote en forma de uvve y va teñido de azul lapislázuli, y destacan los volantes plisados de la falda que termina en una pequeña cola. Destaca en el conjunto el cinturón-joya, una maravilla que no ha pasado desapercibida a nadie.

 

Detalle del cinturón-joya del vestido de Gucci de Brie Larson. 

Brie Larson a su llegada a la alfombra roja de los Oscar 2016. 

 

Ha sido una alfombra roja sosa, desdibujada, triste. Al menos hasta que llegó ella. Y es que una vez más ha sido Charlize Theron la más espectacular de las invitadas a la gala de los Oscar 2016. No es la más elegante, pero sí la que más ha llamado la atención. Y todo por el osado vestido de la casa francesa Dior, con  la que tiene contrato y a la que presta su imagen para uno de sus perfumes. 

"Es un homenaje a Mad Max", ha dicho la actriz ante la pregunta de una periodista sobre el vestido elegido. Quizá un guiño a la fuerza de su personaje. 

El diseño es atrevido por el escote y por el color, un rojo intenso que no estamos acostumbrados a ver debido a que los tonos blancos, desde los radiantes a los rotos, y los empolvados, que prometen volver a ser tendencia, suelen dominar este tipo de citas. Queda claro que el vestido es espectacular pero más aun lo es la joya de Harry Winston, un llamativo collar de 48,8 quilates que junto a los pendientes y anillos formaba parte de un conjunto valorado en 3,7 millones de dólares. 

Pero el escote de la actriz no ha sido el único que ha llamado la atención en la alfombra roja, un escenario convertido en un campo de batalla, la batalla de escotes... (sigue leyendo)