¿Se puede comprar la elegancia?
jueves 19.may.2016 por Rafael Muñoz 0 Comentarios
-Hélène de Rochas, todo estilo-
Retrato de Hélène de Rochas.
Su nombre es sinónimo de elegancia y siempre estuvo en la cima de las listas del glamour y el buen gusto. Su vestuario despertaba admiración, tanto como su peinado, cuidado con mimo.
Hélène de Rochas fue musa de modistos como su amigo Yves Saint-Laurent o Olivier Theyskens, que fue director creativo de la casa Rochas entre 2003 y 2006. Es un icono del chic francés y un ejemplo del estilo de vida de la llamada ‘café societé’ de mediados del XX, una época dorada para la moda europea.
Casi 200 piezas, y la mayoría de Saint Laurent.
Hélène fue un espejo para muchas mujeres, un modelo de elegancia a seguir. Su peinado fue imitado y su estilo, también. Pero, ¿se puede imitar un estilo? ¿se puede comprar la elegancia? En París, en este mes, se puso a la venta su vestuario. Se vaciaron sus armarios y sus maravillosos vestidos se expusieron en Cornette de Saint Cyr y entre ellos destacaban los diseños de Saint Laurent, su favorito.
“Fue el único que logró combinar el espíritu creativo de la alta costura con los deseos y necesidades de la mujer moderna”, dijo en una ocasión.
Vestidos que pertenecieron a Hélène de Rochas.
La tienda mostró diseños exclusivos, vestidos de noche, chaquetas, diseños estampados de los setenta y complementos. En total hay más de 200 piezas, entre ropa y complementos, y la mayoría, casi un 80%, es de Saint Laurent. Todo era especial, todo elegido con gusto.
La venta ha sido un éxito. Por ejemplo, un vestido de alta costura de 1967, que tenía un precio de salida de 3000 euros, se ha vendido por 21 896€. ¿Se habría pagado lo mismo si su dueña fuera una desconocida?
Vestido túnica y diseño de 1967 de Saint Laurent.
El estilo y la elegancia no se pueden comprar, está claro, pero sí contemplar. Esta tipo de ventas son una buena ocasión para hacerlo y para acercarse a la personalidad de una de las mujeres más elegantes de París. Hélène tenía charme.
No es la primera vez que las pertenencias de la viuda de Marcel Rochas se ponen a la venta o subastan. Hace años sus hijos, François y Sophie, vendieron sus joyas, con piezas de Van Cleef & Arpels o René Boivin, y después el lujoso mobiliario de su piso parisino.
Chaqueta cruzada con encaje de Hélène de Rochas.