La Gala del MET, el via crucis de la moda
martes 8.may.2018 por Rafael Muñoz 0 Comentarios
-MET GALA 2018-
Rihanna con un diseño de Maison Margiela.
A la llamada del MET fueron en procesión devotas de la moda, fieles de la costura, mártires del tacón y santas y santos de las agujas. El primer lunes de mayo todos los ojos se giran hacia el Metropolitan Museum de Nueva York porque Anna Wintour, la papisa de la moda, congregó a sus fieles a la ceremonia más especial de todas las que se han celebrado en el MET. Muchas y muchos se tomaron el protocolo como un acto de fe pero otras y otros se desmarcaron y como ocurre en algunas bodas ‘pasaron’ de la misa para ir directamente a la fiesta.
La gala sirve para inaugurar la exposición que se titula ‘Cuerpos celestiales: moda e imaginación católica’ y de paso recaudar fondos para la institución. Lo más llamativo es su enorme alfombra roja por la que este año han desfilado estrellas rutilantes como Rihanna, Madonna y Katy Perry, porque el mundo de la música, nos guste o no, es el que más está influyendo en la moda norteamericana, porque en Europa es otro cantar. Más celestial, si cabe.
Madonna no podía faltar. La diva siempre ha mantenido una tensa relación con el Vaticano por sus golpes de efecto y vestuario. Desde principios de los 80 se atrevió a colgarse del cuello cruces y rosarios, escandalizó más tarde con el vídeo Like a Prayer y en sus posteriores conciertos ha utilizado la estética religiosa con atrevimiento y, por supuesto, buscando la polémica. A la gala ha asistido junto al diseñador que mejor ha sabido reinterpretar la estética eclesiástica, Jean Paul Gaultier.
Madonna, fiel a Jean Paul Gaultier.
La casa Versace también ha jugado siempre con la iconografía religiosa, especialmente con las cruces. Por eso Donatella tenía mucha tela que cortar en esta exposición y en la gala. Sus devotas no faltaron y han vestido diseños de la casa italiana cantantes como Katy Perry, que ha ha llamado poderosamente la atención con unas enormes alas, Zendaya y Gigi Hadid. También Blake Lively. La actriz ha deslumbrado con un vestido joya que ha llevado más de 600 horas de trabajo y se cuenta que ha tenido que ir a la gala en un autobús debido a la larguísima falda que tiene el vestido.
Las colas largas, un guiño a los mantos religiosos que suelen llevar las imágenes de las vírgenes que se procesionan en la Semana Santa, han sido las protagonistas por su espectacularidad. Entre las invitadas que han apostado por ellas destacan Cardi B (vestida de Jeremy Scott), Bella Hadid (con diseño de Gareth Pugh), Diane Kruger ( con diseño de Prabal Gurung), Sarah Jessica Parker ( vestida por Dolce&Gabbana) o Ariana Grande ( que ha apostado un vestido estampado con los frescos de la Capilla Sixtina diseñado por Vera Wang). Una de las que más aplausos se ha llevado ha sido la actriz Kate Bosworth que ha vestido un diseño de Oscar de la Renta y un llamativo velo.
Pero el espectáculo, de nuevo, lo ha protagonizado Rihanna. La cantante se impone con un majestuoso diseño cuajado de perlas y cristales de Maison Margiela, seguramente firmado por John Galliano, que ha combinado con un espectacular tocado en forma de mitra papal de Stephen Jones. Rihanna sube así a los altares de la moda y se convierte en una diosa con derecho propio.
Blake Lively con un vestido de Versace. AFP
Otras invitadas han escogido un estilo más minimalista y monacal. Anna Wintour, fiel a Lagerfed, ha llevado un recatado diseño de Chanel en el que se puede ver un crucifijo. Hemos visto ángeles y demonios. Rebeldía y sensualidad han derrochado las chicas Vaccarello ( director creativo de Saint Laurent: Kate Moss, Mica Argaranaz, Anja Rubik, Amber Valleta, Charlotte Gainsbourg y Carlota Casiraghi, que se desmarca así del estilo que suele llevar en las fiestas monegascas.
Hace meses se dijo que podrían acudir el presidente de los Estados Unidos y la Primera Dama pero en una entrevista, concedida a finales del año pasado, Anna Wintour cortaba por lo sano los rumores diciendo que no acudirían. Hubiese sido una cita romántica para Donald y Melania Trump ya que en la gala del MET celebrada en 2004 él se declaró y le propuso matrimonio.
Katy Perry con alas y vestido de Versace.
Amal Clooney con vestido de Richard Quinn junto a George Clooney. AFP
Alicia Vikander con diseño de Louis Vuitton .
Amanda Seyfried con vestido de Prada.
Cara Delevingne apostó por la casa Dior.
Diane Kruger con una larga cola, de Prabal Gurung.
Kate Bosworth con diseño nupcial de Oscar de la Renta.
Zendaya, de Versace, emulando a Juana de Arco.
Hamish Bowles, Frances McDormand, Pierpaolo Piccioli, Anne Hathaway, Adam Shulman, Adut Akech y Troye Sivan.
Alessandro Michele, director creativo de Gucci, con Lana del Rey y Jared Leto.
Una de las más acertadas: Lily Collins, de Givenchy.
Bella Hadid con diseño de Gareth Pugh.
Kim Kardashian , de Versace.
Kate Moss, Mica Argaranaz, Anja Rubik, Amber Valleta, Charlotte Gainsbourg y Carlota Casiraghi con Anthony Vaccarello, diseñador de Saint Laurent.
Ronney Mara con un vestido de la casa Givenchy.
Sarah Jessica Parker con un barroco vestido de Dolce&Gabbana.
Miley Cyrus entre Stella McCartney y Salma Hayek.
Sean Combs.