Hoy no puedo... ¡Tengo un "Sachsenring" tremendo!
Curiosa la frase, ¿eh? Lo voy a explicar porque así resulta incomprensible. Volvíamos de una semana de vacaciones (para quienes la tuvimos) y antes, de Laguna Seca (California en verano, con un GP espectacular) y de pronto, ¡zas!... ¡Circuito de Sachsenring!... lluvia, frío, distancias enormes entre los dos 'paddocks', accesos complicados, en fin... que no es el circuito más cómodo, ni el más agradable.
Vaya por delante que nos entusiasma nuestro trabajo y lo pasamos en grande... y que es una bendición viajar tanto y currar en algo tan apasionante. Estamos encantados. Pero, claro, también tenemos nuestras preferencias y en el calendario algunos Grandes Premios se nos atragantan un poco. Éste es uno de ellos.
Por eso cuando estábamos llegando a Chemnitz (la ciudad alemana donde nos alojamos durante el Gran Premio) alguien dijo: "¡Joder, qué bajón... ¡ahora Sachsenring!" El 'palabro' ya incluye todas esas incomodidades de las que hablaba. A Javier González, nuestro productor, y a mí se nos ocurrió que podíamos rebautizar la palabra. Desde ese momento, en la jerga 'motogepera' del equipo de TVE, Sachsenring se traduciría por 'bajón'. Y empezamos a construir frases muy graciosas imaginando situaciones parecidas: que te llaman para salir un sábado noche, pero estás cansado... pues "no puedo, tío, ¡que tengo un 'Sachsenring' tremendo!".
Buscábamos la risa fácil para que no nos diese un 'Sachsenring' emocional. Y nos consolábamos irónicamente pensando que enseguida vendría... ¡Donington!, jajaja (que es tres cuartas partes de lo mismo). David Figueira, mi compañero de RNE, lo clavó en su día: al circuito inglés lo llamó 'Donington Pack'... porque en el paquete ya viene también la lluvia, el frío, restaurantes cerrados a las 9 de la noche... En fin.
Por suerte, nos apasionan las motos, el mundial está más emocionante que nunca y lo seguimos pasando genial. Si no, echadle un vistazo al vídeo que adjunto. Son las 'chorreces' de Sachsenring. Nos picó el bichito de la risa para quitarnos el bajón.
¡Hasta la próxima!