Es curioso ver como hay cosas que no cambian. Una vez le fui a enseñar a un amigo el sketch
“el aparejador ” y lo busqué en youtube -sí, yo también, snif-. Pero me llevé una sorpresaca porque había muchísimos comentarios. Me dije “si que ha gustado…” pero no, enseguida vi que la mayoría de comentarios eran de un encendido debate que había provocado la tontería en cuestión. Arquitectos contra aparejadores… pero que se llegan a mandar a la concha de su madre y todo…
echarle un vistazo si os aburrís un rato.
Los dos primeros años de carrera en Cuenca Julián, Ernesto y yo vivíamos en la residencia de estudiantes Bartolomé de Cossío. Muchos de nuestros compañeros estudiaban arquitectura técnica –aparejadores, aunque a muchos de ellos no les gustaba el término. Preferían “arquitecto técnico”-. En Cuenca no había Arquitectura, así que no sé lo que estudiarán en la superior, ahora, en la técnica, se mataban a estudiar. Lo juro.
De hecho nosotros, algo menos ocupados – de Bellas Artes y Magisterio de música - muchas tardes nos dedicábamos a entrar a la sala de estudios donde estaban nuestros compañeros sudando la gota gorda y dar por el ojete (aprovecho para pedirles perdón a todos y decirles que algunos maduramos más tarde).
Muchas de las bromas que les hacíamos tenían que ver precisamente con eso: que si fueras arquitecto me podrías echar, pero eres aparejador… tal tal –chorrás del aburrimiento-. Esa tontería aún nos hace gracia y por eso se nos ocurrió el sketch.
Cuando lo grabamos Ernesto eligió la ropa y se basó en Luisan, un amigo arquitecto técnico de la residencia al que consideramos un gran cachondo.
Total, que hace unas semanas Ernesto actuó en Toledo, y a la salida vio a Luisan (después de años) - ¿En quién os habéis basado, hijos de puta?- le espetó. De muy buen rollo. Y me hace ilusión que lo sepa, porque se lo dedicamos con todo el cariño a él y a todos los arquitectos técnicos de aquella residencia.
El sketch, como casi todos los nuestros, se hizo para entretener y no para que nadie discuta, hombre. Yo, personalmente me quedo con las risas que nos echamos Borra y yo haciendo la canción e imaginando a escuadra y cartabón.
¡FELIZ NAVIDAD, MUCHACHADA!