5 ideas equivocadas sobre los dietistas-nutricionistas
lunes 23.oct.2017 por Aitor Sánchez 0 Comentarios
Los dietistas-nutricionistas somos probablemente el profesional sanitario más desconocido, tanto en lo que se refiere al trabajo que hacemos, como en quien puede denominarse así. Es algo curioso como se acepta sin problemas un "nutricionista" que ha hecho un cursillo de nutrición de tres meses, o que ha estudiado otra carrera, pero la nutrición le interesa mucho y ha decidido dedicarse a ello.
Eso no pasa con otros sanitarios ¿alguien iría a un dentista que ha hecho un cursillo de tres meses? ¿a alguien que se dedica a la cardiología porque le interesa mucho pero en realidad ha estudiado fisioterapia? suena absurdo, ¿verdad? y además todos sabemos que esos casos, de existir, serían ilegales. Bueno, lo cierto es que con la nutrición sucede lo mismo: ejercer sin la titulación correspondiente es ilegal, es intrusismo profesional. Sólo que está tan extendido que ni la administración ni nuestras instituciones hacen gran cosa para solucionarlo.
Y no será porque la mala alimentación no esté causando estragos. Así que vamos a compensarlo con un poco de realidad, y un poco de humor, en estas 5 ideas equivocadas sobre los dietistas-nutricionistas:
1. Son los que hacen dietas para adelgazar
Algunos sí. También se dedican a la nutrición deportiva, a la nutrición clínica, a la restauración colectiva, a la investigación, a la divulgación, a la docencia...
"Ya, ya. Pero yo hablo de los dietistas-nutricionistas normales. Esos se dedican a hacer dietas para adelgazar y dan menús con gramos de cada cosa y yogur desnatado en la merienda. O te mandan unos batidos en lugar de la comida."
No. Y primero debes saber algo: si tu idea de nutricionista es quien te vende polvos para batidos o quien te atiende en una franquicia de pérdida de peso que es más bien una tienda de productos, ten en cuenta que lo más probable es que ninguna de esas dos personas sean nutricionistas. La primera, de hecho, tienes las mismas posibilidades de que sea nutricionista que de que sea electricista. Y la segunda puede ser bióloga, veterinaria o auxiliar de enfermería, por ejemplo.
Puedes ver lo que hacen los dietistas-nutricionistas en consulta, además de pérdidas de peso, aquí (que elegante soy poniendo disimuladamente publicidad)
2. Te recetarán pastillas, infusiones y jarabes para que adelgaces rápido y sin sufrir
A ver ¿no hemos quedado en que lo de la operación bikini no es su actividad principal? ¿porqué sigues pensando solo en alguien que se dedica a adelgazar a otros y además sólo con un fin estético? por favor, lee de nuevo el punto 1.
En realidad esta es una buena pista para saber si has elegido bien: si te vende este tipo de cosas, has caído en malas manos y es mejor que te levantes y te vayas.
Un dietista-nutricionista trabaja con la alimentación y no con venta de productos engañosos. Si en tu caso es necesario recomendarte algún tipo de suplemento, lo hará, pero no te lo venderá en la consulta. De manera que no obtendrá ningún beneficio económico de que tu lo adquieras. Y no, nunca se tratará de quemagrasas, o de productos exóticos impronunciables y caros, o que solo puedas comprar en un lugar determinado. Si eso sucede, vuelve a lo de levantarte e irte.
3. Un/a médico o un/a enfermero/a que se dediquen a la nutrición también son dietistas-nutricionistas
No, salvo que sean profesionales que hayan estudiado ambas carreras universitarias (que los hay, sobretodo enfermería y nutrición , o farmacia y nutrición).
Nutrición no es una especialidad de medicina, es una titulación distinta, como puede ser fisioterapia (y no consideramos a un traumatólogo igual a un fisioterapeuta), psicología o farmacia. Y no, endocrinología no es nutrición, ni un endocrino es nutricionista. Tampoco los Másters capacitan para ejercer. Del mismo modo que un dietista-nutricionista con un máster en farmacología no puede ejercer de farmacéutico.
En realidad es bastante simple: sólo son dietistas-nutricionistas los que han aprobado la carrera de Nutrición Humana y Dietética. Y dietistas los que han aprobado el Técnico Superior en Dietética. Y ya está, no hay excepciones.
4. Siguen una dieta especial y calculada
Puede que si que presten más atención a lo que comen que el resto de la población. Que rechacen productos de consumo habitual por ser poco saludables como las galletas, o que lean las etiquetas con obsesión. Pero si crees que los nutricionistas tienen calculados al milímetro sus requerimientos y saben cuantas calorías, gramos de proteína o UI de vitamina D consumen a diario, siento decirte que probablemente no tienen ni repajolera idea. Tampoco saben si están cubriendo la IDR de calcio o si toman las raciones recomendadas de aceite. Ni siquiera tienen idea, al irse a la cama, de si han bebido o no dos litros de agua.
¿Sabes porqué? por qué eso no es lo importante. Lo más importante es lo de la primera linea de esta respuesta: hacer una buena elección de alimentos.
5. Cada vez que te ven llevarte algo a la boca, te están juzgando
No, a veces vamos de paisano. O sí. Nunca lo sabrás. Por si acaso, en su presencia come fruta y bebe agua, y el café sin azúcar y la cerveza sin alcohol.
Y en un restaurante pídete lo mismo que el o ella. Y no digas ninguna de estas frases en su presencia. Con estas precauciones estarás a salvo.
Lucía Martínez es dietista-nutricionista y autora del blog Dime Qué Comes