Todos a dieta- La noche en vela
lunes 29.oct.2018 por Aitor Sánchez 0 Comentarios
Como dietistas- nutricionistas no podemos prohibir ningún alimento en general, la responsabilidad que tenemos es la de informar a la gente de que no lo consumas, bien por tu caso particular o bien porque en general se le considera un alimento malsano, tales como ultraprocesados cargados de azúcares, grasas de mala calidad y mucha sal.
¿Para perder peso hay que pasar hambre?
Definitivamente no, las dietas de adelgazamiento se han hecho durante mucho tiempo desde una perspectiva equivocada sin tener en cuenta, por ejemplo, la saciedad de las personas. Dietas con un número de calorías, sin estar personalizadas para cada persona que no está adaptada de forma conductual a cada persona. Pero como no contamos con la presencia de las dietistas-nutricionistas, que para algo nos pasamos años en la universidad, pues no tenemos un profesional sanitario dedicado a esto en atención primaria.
No hay una dieta ideal, hay una dieta para cada persona. Hemos considerado muchas veces que las dietas son regímenes muy estrictos, como si fuera un paréntesis, durante un tiempo y luego ya no. Lo que tenemos que crear es una relación saludable con la comida que nos permita estar sano.
El problema de la obesidad en España no viene a consecuencia de chuletones, aunque haya que reducir su consumo. El problema viene a raíz de los ultraprocesados, que son muy palatables, están cargados de azúcar y de todos estos ingredientes de mala calidad, que hacen que sigamos consumiéndolos sin darnos casi cuenta. Tenemos que prestar atención a los demás estímulos que nos hacen tener preferencia por esos alimentos ultraprocesados, por ejemplo, con la televisión. No es lo mismo que pases dos horas sentado viendo la televisión que jugando a un videojuego, porque la publicidad que recoge el primer canal, mayoritariamente, es malsana.
Algunos países ya han legislado la publicidad, por ejemplo, en Suecia la publicidad de ultraprocesados a niños está muy controlada. Y no son medidas proteccionistas, es simplemente, velar por la salud pública y trabajar esa responsabilidad social.
Por poner otro ejemplo, Japón tiene asignaturas sobre nutrición y les ha ayudado a reducir el sobrepeso. Más que una asignatura propia necesitamos una educación para la salud general, en actividad física, seguridad alimentaria, cocina, hábitos saludables, ... Que les van a dar a los más pequeños a tener recursos para su día a día y para cuando sean adolescentes o universitarios. Para que dejen de hacer pasta con tomate, por el simple hecho de que es lo único que saben hacer.
¿Gordibuenas y fofisanos?
Sobrepeso y obesidad son incompatibles con una salud óptima, está genial hacer reinvindicaciones que se salga de los estereotipos sociales. Para hacerlo, no tenemos que irnos a los extremos, los que han trabajado durante años para bombardear sobre los cuerpos delgados, ahora se van al sobrepeso y la obesidad. Está bien que actuemos con normalidad frente a sobrepeso y obesidad pero hay algunas cosas que son evitables y otras que son patológicas y tenemos que parar desde el punto de vista sanitario.
¿El desayuno es tan importante?
Hay muchas lecturas en cuanto al desayuno, porque hay un tema social, de transición alimentaria. El desayuno ha cambiado mucho, en los últimos 30 años hemos cambiado mucho qué desayunamos. Antes podríamos cenar sobras, una legumbre,... pero ha pasado a ser copado por productos ultraprocesados. Si perpetuamos esta idea que desde el punto de vista nutricional no está justificada, el desayuno no es la comida más importante del día, a pesar de que es una buena oportunidad para educar y estar en familia.
¿Y entonces qué desayuno?
No ha habido nunca una justificación nutricional para que el desayuno tenga que ser leche, zumo y cereales. El zumo es una bebida que no hay que priorizar y que no puede compararse a una fruta, le hemos desprovisto de la fibra y ya no tiene ese efecto saciante.
Un desayuno saludable consiste en introducir alimentos saludables en ese horario. Lo que no está justificado es tomar ultraprocesados porque sí en cuanto te levantas.
Todo en exceso es malo, como el veneno
El hay que tomar de todo hoy en día, viendo la oferta... va a comer de todo, de todos los ultraprocesados: galletas, embutido, donuts, zumo. Esto es muy malinterpretable, porque no hay nadie debutando con diabetes tipo II en los hospitales por haberse comido judías verdes todos los días.
Podéis escuchar el programa completo a partir del minuto 18:20: