Oficinistas del asfalto
¿Quién no ha hecho carreras de sillas? Y no me refiero en el colegio, donde las sillas no tenían ruedas, sino en el trabajo.
En la localidad alemana de Bad Koenigha han convertido en realidad el sueño de muchos: echar carreras de sillas. Hasta 64 personas participaron hace unas semanas en esta competición anual. Con una distancia de 200 metros y varias rampas en el recorrido, algunos participantes llegaron a alcanzar 35 kilometros por hora.
A las órdenes de "En sus sillas. Listos. Ya", corredores locales, de Colonia, de Stuttgart e incluso de Luxemburgo, se impulsaron con sus piernas - algunos sentados y otros tumbados - por la calles flanqueadas de curiosos, familiares y amigos de los participantes. La mayoría de éstos alzaron como favorito a Heiko Winter, quien vestido de vaquero y "a lomos" de Jaqueline (una silla covertida en yegüa), defraudó a los asistentes después de que tuviese un problema mecánico tras saltar una de las rampas del recorrido. Winter no perdió la sonrisa.
Por lo que sabemos, no había ni podio para los tres más rápidos ni premio para el ganador, pero ¿quién quiere un premio por poder cumplir uno de los sueños de cuando uno era pequeño?
Miguel F.V.F.
P.D: Un servidor nunca ha participado en carreras de sillas en el colegio o en la oficina.
Melqui dijo
¿35 km. por hora? ¡Eso hay que probarlo!
27 may 2011