Revolución Juande
Él mismo dice que le ha llegado la hora de doctorarse. A Wembley, al de siempre y al de ahora, sólo van los elegidos para una final y los que juegan contra los pross. Juande Ramos lo hará con el Tottenham y sólo cuatro meses después de aterrizar en un equipo que estaba hundido en el furgón de cola. La apabullante y espectacular victoria sobre el Arsenal (5-1) sigue siendo tema de comentario en el norte de Londres y en muchos sitios más. La soberbia demostración de sus futbolistas invita a pensar que el manchego se ha hecho con las riendas. Hasta parecía inimaginable que gente como Berbatov, Jenas o Malbranque pudieran esforzarse y trabajar tanto sobre un campo de fútbol, pero así fue. Ellos tres, de estilo más frío, y todos sus compañeros. Ya en el partido de ida, en el Emirates, se comprobó que los spurs van en serio y saben a lo que van. De momento, a la final de la Carling, sin olvidar la Copa UEFA e incluso la Copa, aunque el sábado visiten Old Trafford. La Premier acabó pronto para ellos, se supone, quizás escalen algunos peldaños, pero los que luchan por el cuarto puesto quedan demasiado lejos. Se reservarán para el día del Chelsea.
El Tottenham pretendía dar el salto de calidad este año, luchar por ese codiciado sitio en la Champions. Con una plantilla equilibrada, también con algunas carencias y lesiones en la retaguardia, pero con un ataque demoledor (Berbatov, Robbie Keane y Darren Bent, fichado por una millonada exagerada y ahora lesionado). Y con el entrenador de los últimos tres años. Pero todo se vino abajo desde el primer día. Aquella derrota inicial en Sunderland precedió al trastazo frente al Everton en casa y ya no hubo forma de levantar cabeza. Martin Jol, cuestionado desde la primera derrota, perdió el control por completo. Los jugadores hacían goles, sí, pero el equipo concedía más. No obstante, conviene señalar que la fortuna no acompañó en aquellos resultados, que el Tottenham exhibió mejor fútbol que dividendos y que no mereció perder en el campo del Manchester United ni que el Liverpool le empatese en Anfield en el último minuto. Pero la inercia negativa impuso su ley y Juande Ramos se vio obligado a aceptar la oferta.
Dejando muy tocados al Sevilla y a su propio representante, como se ha sabido ahora. "Es tan buen entrenador como mala persona", ha dicho quien era su agente y no supo nada de negociaciones ni de firma. Y que Juande quería salir del Pizjuán antes de que llegaran las vacas flacas. Sí parece un tipo retorcido, por lo que has vivido y te cuentan, pero esto tampoco debe preocuparle mucho. Bastante ha tenido con forzar la situación para que el Tottenham haya demostrado en los dos partidos frente al Arsenal que ahora mismo podría competir con cualquiera. Como el Sevilla de los últimos años. Los cinco goles endosados al Arsenal después de nueve años sin ganarle quedan en el recuerdo de la afición. Una goleada inapelable al mayor y más cercano rival, considerado hace muy poco como el equipo con fútbol más vistoso (no vale que Fábregas entrara desde el banquillo, como Adebayor, que faltase alguno...). Revolución. El primer día, Berbatov y Keane, suplentes. Aquel toque de atención y la mentalidad de trabajo inculcada en unas cuantas semanas minimizan incluso los casos Robinson y Defoe. A los dos les ha dicho que se pueden marchar si les conviene; los dos, en el banquillo, aunque el atacante no se aburre tanto como el portero.
El fútbol desplegado en este último derby resulta espectacular por su intensidad y vértigo. Se trata de poner un ritmo de juego, con o sin balón, tan alto que para el rival sea inabordable. Además la máquina no puede parar. Se corre lo mismo al defender que al atacar. No hay tiempo para centrocampismos. Fútbol directo, simple, al tiempo de calidad, con mimbres (Lennon se salió el martes), aunque también de mucho consumo. Y los conceptos claros que el manchego ha sabido inculcar en su nuevo vestuario. Compromiso y ambición, entre otros, para sostener la presión al adversario y la exigente tensión del duelo. Con mano dura y sabiduría. En los momentos justos. Juande sabe lo que se hace. No le faltó mucho para llevarse la liga con el Sevilla. Seguro que ya piensa en la próxima Premier y en la opción Champions, en plantar oposición con su pizarra y sus métodos. Dice que lo vivido el martes es simple consecuencia del trabajo que han realizado los futbolistas, algunos revalorizados como nunca. Jugadores que celebraron también como nunca el partidazo que les lleva al templo de Wembley. Hasta Berbatov, y eso que no mojó. Juande también tiene controlado al búlgaro. Sabe que sus vidas no van a ser paralelas y ahora, a pocos días de que se cierre el mercado, le pica, ha dicho que a Berbatov le encantará la idea de jugar una final en Wembley, que él verá si merece la pena aguantar un poco más en White Hart Lane.
Aprovechamos para comunicar próximas transmisiones Premier en TVE:
Jornada 24
Martes 29 enero
Arsenal-Newcastle (por confirmar, La 2)
Miércoles 30 enero
Manchester United-Portsmouth (21.00, Teledeporte)
Jornada 25
Sábado 2 febrero
Tottenham Hotspur-Manchester United (16.00, La 2)
Domingo 3 febrero
Fulham-Aston Villa (17.00, Teledeporte)
Estos partidos también se podrán seguir a través de www. rtve.es/premier