Volvemos a la selva amazónica
viernes 2.oct.2009 por RTVE.es 3 Comentarios
Este próximo domingo Pueblo de Dios vuelve a uno de sus lugares favoritos: la selva amazónica. En este caso en el sureste de Perú . Allí vamos a encontrarnos con los misioneros dominicos españoles que abrieron varias misiones a lo largo del río Urubamba.
Para llegar a la misión de Timpía, donde nos esperaba el español Santiago Echeverría, tuvimos que cruzar el famoso Pongo de Mainique, un cañón fluvial donde las aguas del Urubamba se rebelan peligrosamente. El Pongo es un lugar mítico para los pueblos indígenas del lugar. Muchos murieron intentando pasarlo. Nosotros tuvimos suerte: el Urubamba bajaba relativamente tranquilo.
La solidaridad española llega aquí de manera directa y eficaz. Desde Madrid, Selvas Amazónicas, es la organización que se encarga de conseguir y enviar las ayudas para las muchas necesidades de las misiones. Educación, alimentos, proyectos de desarrollo, actividades pastorales, etc.
Los dominicos españoles han hecho una apuesta muy fuerte por el desarrollo de estos pueblos amazónicos de Perú, olvidados y marginados durante siglos por sus compatriotas de la costa y por los distintos gobiernos. Sobre este asunto, las revueltas de los pueblos indígenas y el apoyo de la Iglesia Católica peruana, emitimos hace un par de meses otro reportaje, "La herida abierta de la Amazonía", que podéis ver en nuestra videoteca.
En la foto, el equipo de Pueblo de Dios con Santiago y con Francisco Faragó, responsable de Selvas Amazónicas.
Ojalá os guste
Hasta pronto
Anónimo dijo
El reportaje tiene buena pinta. Estoy deseando verlo. Gracias.
Lourdes
Teresa, Madrid dijo
Durante todo el día han estado repitiéndose en mi cabeza, muchas de las imágenes tan espectáculares de vuestro reportaje. Cierto es que nada tiene que ver esa zona del planeta con el documental anterior de Mauritania, en la que hasta la naturaleza se pone en contra de su dura supervivencia, cada gota de agua que obtienen es casi como el mejor regalo de la vida.
En cambio, en esta zona de la Amazonía peruana, es impensable tal explosión de belleza, que surge a lo largo del Urubamba. Sentí anhelo por el tipo de vida de esta gente, alejados de tantos problemas que nos agobian en las grandes ciudades y me pregunté: ¿Es así el estado ideal más cercano a la felicidad?. Entrañable me pareció Santiago Echeverría, su entrega con esta gente y su labor tan ejemplar.
Si tuviera que elegir una imagen de vuestro reportaje, me quedo con la sonrisa de todos esos niños, al atardecer, corriendo hacia el río. Es la expresión más perfecta de la felicidad, la ilusión y la libertad.
Enhorabuena por esta crónica. Un saludo muy afectuoso para todos desde Madrid.
Anónimo dijo
Teresa, gracias por tus comentarios. Sí, el lugar es extraordinario y la gente muy hospitalaria. Pero esa belleza paisajística esconde grandes necesidades de sanidad, de educación, de falta de oportunidades para los pueblos indígenas de esa zona de la Amazonía. Los misioneros son una ventana abierta a la esperanza pero los problemas sociales y económicos de estos pueblos son verdaderamente importantes.