Mitras contra muros
viernes 4.jun.2010 por RTVE.es 1 Comentarios
Llevan varios meses levantando su voz. Ahora esa voz se oye algo más porque la están levantando a las puertas de la Casa Blanca. Me refiero a los obispos americanos que están reunidos en Washington, en lo que llaman la Consulta Regional de las Conferencias Episcopales de las Américas sobre la Emigración. Y el trasfondo de todo es la famosa ley SB1070, que criminaliza la inmigración ilegal, promulgada a finales de abril en el estado de Arizona. Dicha norma convierte en delito la presencia ilegal en el estado y otorga a los departamentos policiales la autoridad de cuestionar el estatus de una persona si existe “sospecha razonable” de que es un inmigrante ilegal.
Llevan varios meses los obispos de El Salvador, Guatemala, México y Honduras criticando la ley. Después se unieron los obispos norteamericanos. También los españoles. Ahora se escenifica la protesta de forma mucho más evidente y a más "altura" con este encuentro en la capital norteamericana. Digo lo de la "altura" porque está el arzobispo Antonio María Veglió, presidente del Pontificio Consejo para los Migrantes, una especie de ministro del Papa para estos asuntos.
Veglió ha tenido que recordar lo evidente: "los migrantes se han convertido en esenciales para la economía de los EE.UU”. Al tocar el tema de los “Inmigrantes irregulares”, el arzobispo destacó que muchos de ellos “han estado viviendo en el país durante años, trabajando y contribuyendo a la economía y al sistema de seguridad social”.
El número de deportaciones en el 2008 superó las 350 mil personas y en Centroamérica “uno de los resultados no previstos ha sido el aumento de la violencia de las pandillas juveniles”. Los hijos de los inmigrantes, crecidos en los Estados Unidos, que es el único país que conocen, ven su futuro en peligro a causa de la dificultad de completar su formación. La Iglesia los apoya a través del proyecto DREAM (Desarrollo, sostenimiento y educación de menores extranjeros), y se esfuerza por contribuir a la regularización de 12 millones de inmigrantes irregulares al menos reconociendo su existencia.
Acabó Veglió invocando la hospitalidad: "que no es tanto una tarea cuanto una manera de vivir nuestras vidas y de compartir.Es uno de los temas centrales en el cristianismo desde los tiempos de la Iglesia primitiva. La acogida, la compasión y la igualdad de trato son parte de una respuesta cristiana apropiada, que rompe las barreras sociales".
Frente a la ruptura de las barreras, la gobernadora de Arizona, la de la polémica ley, le ha propuesto ayer a Obama que levante un muro en la frontera mexicana. Así están las cosas.
julieta carpinteiro dijo
La economìa de Estados Unidos es el ùnico "fruto gigante" que nace gracias al injerto de varias semillas llamadas "inmigrantes".