Twitter, no lo hagas, no censures contenidos políticos
viernes 27.ene.2012 por David Varona 7 Comentarios
Corren malos tiempos para la Internet libre que todos queremos. Al acoso policial sobre las descargas ilegales, se sumaba ayer el anuncio del FBI de que planea construir un sistema que le permita rastrear las redes sociales en busca de posibles delitos. Ahora llega el sorprendente anuncio de que Twitter está dispuesto a bloquear mensajes en un determinado país si su contenido no es adecuado a las leyes del citado territorio.
Twitter disfraza la idea de mejora de su capacidad para "adaptarse a las leyes locales". En la práctica es una puerta abierta a la censura.
La propia red social decía hace unos meses que no pondría barreras de este tipo a sus contenidos. Si había que borrar un contenido por inapropiado (agresivo hacia alguien, amenazante, humillante...) se borraría a nivel mundial. De esa forma, los contenidos de índole política quedaban excluidos de posibles bloqueos, porque se consideraban amparados por la libertad de expresión que debería amparar a toda internet. "La libertad de expresión es fundamental", decía entonces Twitter, "algunos tuits pueden facilitar cambios positivos en países sometidos a represión".
Y tenía razón Twitter en aquel comunicado. Como ya hemos comentado en este blog, la red de microblogging ha sido el caballo de batalla sobre el que han galopado las revoluciones sociales del último año. Tanto en Estados Unidos, como en Rusia o todo el mundo árabe. Sin Twitter, sin Facebook y sin teléfonos móviles, todo habría sido diferente, más lento. Incluso podría no haber sido.
Por eso, sorprende tanto ahora este nuevo comunicado de Twitter diciendo que, para acogerse mejor a las legislaciones locales, podría bloquear mensajes en determinados territorios. No borrarlos a nivel global, si no aplicar censuras a escala local. Así, un país podría decirle a Twitter que determinados contenidos (agitadores, críticos, revolucionarios...) no lleguen nunca a usuarios dentro de sus fronteras.
La red social dice que bloqueará tuits en lugares con "diferentes ideas sobre los contornos de la libertad de expresión".
La expresión es tan vaga que vale todo: cualquiera puede tener ideas diferentes sobre esos "contornos". Y esto ha sido siempre así, pero nunca antes las redes sociales se habían planteado la posibilidad de cerrar el paso a mensajes que puedan resultar incómodos para gobiernos o estados con una visión restrictiva de la libertad de expresión.
Porque, ¿quién decide cuál es el límite? ¿Puede China, por ejemplo, llamar a Twitter y decirle que no quiere que por su territorio pasen mensajes que hablen de libertades políticas? Y si lo hace, ¿cómo decide Twitter qué mensajes pasan y cuáles no? ¿Dónde pone el listón? ¿Cómo se establece el baremo? ¿Cómo se controla tanto contenido si no es con apagón total? Parece que el país que exija la censura tendrá la sartén por el mango.
Intereses económicos
Twitter no se puede utilizar hoy en día en China: está prohibido por el régimen comunista. Pero Twitter, como todas las demás redes sociales y grandes empresas de Internet, quiere que los chinos accedan a sus contenidos. Un potencial de casi mil millones de usuarios ablanda las convicciones democráticas y liberales de cualquiera... El juego incluye millones de dólares en publicidad y un crecimiento en términos de masa crítica de usuarios que dé viabilidad y futuro al proyecto.
En pocas palabras, si Twitter garantiza al Gobierno chino que bloqueará lo que ellos digan, la Gran Muralla empezará a abrirse para el pajarito azul. Y añado que hablo de China por poner un ejemplo, pero me vale Cuba, me vale Irán, me vale Corea del Norte y, si me apuráis, me vale Rusia, un país enorme, muy poblado, donde la libertad de expresión siempre parece estar en el aire.
La magia de las redes sociales, lo que ha hecho que se conviertan en el fenómeno más grande de Internet desde la aparición de Google es la libertad que dan a la gente. El usuario de Facebook o Twitter se da cuenta rápidamente de que tiene en sus manos una herramienta única, poderosa, capaz de influir, de producir cambios. Es lo que los anglosajones llaman "enpoderarse", tomar poder, cobrar conciencia de que se pueden hacer cosas gracias a la combinación de una mente crítica, conocimiento libre, tecnología y una herramienta de comunicación sin barreras.
Si Twitter se carga esta combinación, a lo mejor entra en China y sus dueños se forran. Pero a la mejor muchos usuarios dejamos de utilizarlo. Es más, con la reacción que se puede ver ya hoy en Twitter, lo más probable es que Twitter haya apretado el botón de "autodestrucción".
Por eso, hay que decírselo muy claro a Twitter: No lo hagas. No censures. No hagas caso a los países que restringen la libertad de expresión. No a la #CensuraTwitter.
(8) dijo
Gracias Sr. David...me alegra muchisimo su post de hoy. Nuevamente Gracias mil.
Namaste.
Suscribo plenamente las palabras del Sr.David Varona, en este post,con respecto a la soez noticia anunciada por Twiter and Compañy!
Mundo virtual dijo
Así se empieza....Ya veremos!Una de las cosas que me gusta de Twitter esprecisamente esa ! http://es.smeet.com/
(8) dijo
...porque no se trata de censurar, se trata de educar....ve enseñar, de informar a la gente el pensamento humano es muy poderoso, y que el universo interactua con el pensamento, que es mejor ser benevolo...que es mas enriquecedor y liberador el buen pensamento...que es mejor y mas liberadora la paz y el amor que la violencia...educar en vez de censurar.... informar desde el cariño...hacer escuelas y no guerras o armas...hacer escuelas...amar amar y servir antes que destruir...Gracias.
Arenasjp dijo
Querido David:
He empezado a leer tu artículo y se me vienen algunas preguntas. ¿Cómo se puede calificar de acoso el hecho de que la policía aplique la ley? ¿Cómo se puede acosar lo ilegal? ¿Y qué tiene que ver aplicar la ley con la libertad? A los dueños de Megaupload se les aplicará la ley con todas su garantías. Informame en caso de que los hubieran encerrado en un gulag.
Más abajo sigues con la dilogía seguridad-libertad. Creo que es un conflicto que suele resolverse de manera muy sencilla: si soy yo el que viaja en el avión, espero una seguridad implacable; si es otro el que viaja y yo me hallo en mi sillón, escogeré la libertad nebulosa. Allá se las compongan.
Por supuesto que Twitter censurará en países sin libertad. También lo hace Google. Pero es que le exigimos peras al olmo privado. De tanto usar gratis, se nos deforma el gusto y acabamos demandando lo que no nos corresponde. Si no estoy errado, Twitter es una empresa privada que deja usarse sin cargo alguno, porque a sus dueños les da la gana. ¿Nos pondríamos a protestar porque el de Mercadona no vendiera arroz integral? Creo que optaríamos por ir a comprar a otro lado. Hasta el día de hoy, creo que no es obligatorio usar Twitter. Entendería el pataleo, si pagásemos. Aunque en la era del todo incluido es normal que terminemos protestando hasta por lo que no es nuestro. Total, retuitear es tan sencillo como indignarse: puedes almacenar los tuits y los indignes en un rincón, que no estorban.
Ay,Twitter, paladín de la libertad. Si no recuerdo mal, en Egipto apagaron Twitter durante semanas. Toda nuestra desatada excitación por el uso de las redes sociales se esfumó en minutos, cuando supimos -cándidos nosotros- que Twitter también lo usan los malos.
Pero internet tiene eso: nos hace a todos adictos a la pataleta. La pataleta engancha, no te vayas a creer, como todo lo infantil. El cariz internáutico infantil que todo lo moja se ve en el indigno tratamiento que el periodismo da a los criminales de Anonymous. Coincidirás conmigo en que si a mí y a mis colegas nos da por llenarte la cerradura de tu casa con silicona y no te dejamos entrar, somos una pandilla de gilipollas. Pero he aquí que el periodismo se nos pone anarquista y le pone un denso palio a esos delincuentes del ratón. Será por tocarles la cabecita a los pezqueñines amodorrados, que ahora tendrán que pagar por ver series. Qué cochinada. Que Tom Cruise cobre y yo tenga que currar gratis. ¡Qué desfachatez!
Animo a todos los tuiteros enojados que junten su dinero y hagan un Twitter insobornable que no ceda a chantajes. Seré el primero en usarlo gratis. No será difícil. Todos sabemos cómo nos gusta a los españoles arriesgar nuestro dinero para crear empresas tecnológicas.
Claro que me gusta la libertad, pero no creo que el problema sea Twitter. ¿Qué tal si les hacemos la pataleta a Fidel Castro y a Wen Jiabao? A no ser que sospechemos que es más fácil retuitear que tirarle de las barbas a un tirano.
Un abrazo.
Juan Pablo Arenas. El Buscador de Radio 5.
Marko dijo
Parece increíble el movimiento, giro, advenimiento de un nuevo orden en la red. Esta claro que tal como estamos no se sostiene si este mundo va a tomar tanto protagonismo a medio y largo plazo (medidas temporales que algunos no contemplan en embarcarse en ciertos "negocios") capaces de agitar masas donde no hay habito histórico, tumbar gobiernos, campañas varias y objetivos sospechosos. Así no puede quedar, no, no, no, demasiado tiempo campando a sus anchas, ya se sabe que la cabra tira al monte.
http://www.youtube.com/watch?v=Lqih2d2Viuw&feature=related
David Varona dijo
Hola, Juan Pablo. ¡¡Qué bueno tenerte por aquí opinando!!
Te contesto:
Me parece que se mezclan los conceptos… Por un lado está el tema de Megaupload, por otro el de Twitter. No defiendo a los dueños de Megaupload. Tampoco estoy muy convencido de que deban ser detenidos por el FBI. Creo que están siendo utilizados como caso ejemplarizante.
Sí creo, en cambio, que la industria audiovisual se enfrenta a la necesidad de renovarse profundamente. Es un modelo comercial agotado y no sirve de nada que luche por conservar un estatus que el público le niega y nunca le va a devolver.
De todas formas, pienso que ese debate no es el que atañe a este post. Aquí estamos hablando de lo que yo considero que es una merma en la liberta de expresión.
Twitter puede hacer lo que le dé la gana, sin duda: para eso es una empresa privada.
Pero sus usuarios tenemos todo el derecho del mundo a exigirle que nos dé el servicio que nos había prometido. Es verdad, no nos cobra nada… Pero, ¿le hemos pedido que sea gratis? No. Por tanto, no pueden ampararse en ese argumento para modificar los términos del contrato y del servicio como les dé la gana. Twitter es una herramienta privada, pero con ella hacemos cosas los particulares y, gracias a este uso, Twitter gana dinero. El acuerdo es ese. Ahora no pueden cambiar a su antojo ese pacto y decidir que no vamos a poder hacer con la herramienta lo que queramos, siempre que no viole leyes. Y aquí voy: emitir mensajes políticos, por muy comprometidos que sean, no debería ser censurado por una empresa que prometía justo lo contrario.
Ah, por cierto, China se ha felicitado por la idea de Twitter, cosa que debería ponernos en alerta.
Sí, sí, ya sé: tuiteando no se derriban gobiernos tiránicos. Pero sin las nuevas tecnologías, la gente tiene menos poder. No son más que eso: herramientas que la gente utiliza para promover cambios. Por si solas no sirven de nada, pero la gente les da sentido.
Por otra parte, coincido contigo en que las formas de los Anonymous son impresentables. Al menos, en muchas de sus acciones. Pero, la verdad, no sé por qué se identifica la crítica a Twitter con la defensa de Anonymous. Son cosas, para mí, completamente diferentes.
Un abrazo y gracias por participar!!
miguelYmiriam dijo
Siempre fuiste una apasionada del twitter... Hubo quien se mostró reacio durante un tiempo... ¿Dónde hallar la siguiente pista? A twittear!