Hacia una televisión realmente social y en manos del público
lunes 26.may.2014 por David Varona 0 Comentarios
Hoy me vais a permitir un poco de "autobombo". Quiero contar lo que estamos haciendo en RTVE.es con algunos eventos que emitimos en directo, como, por ejemplo, la final de la Champions League que ganó el Real Madrid el sábado en Lisboa.
Se habla mucho por ahí de televisión social, de compartir la tele, de que el usuario decide... Pero, en general, es solo una idea más o menos abstracta y difícil de cuantificar y de aterrizar. En RTVE hemos tratado de que el concepto tenga más sentido y, sobre todo, hemos buscado dar al usuario la mayor capacidad de decisión posible.
Desde que trabajo aquí, y van ya siete años, siempre he visto ese ánimo en todo lo que hacemos: dar al usuario el control. Convencido de que es el camino correcto, cuando estaba en Participación, contribuí a poner en marcha iniciativas pioneras, como un informativo de televisión comentado con Facebook, encuentros digitales y reales con personalidades de todo tipo y algo tan interesante como los 'hang-outs' que hacemos con Google+, que derriban cualquier barrera que separa a público y protagonistas, desmediatizando la comunicación.
Hemos luchado para que las redes sociales abran puertas reales entre público, periodistas y programas, estableciendo vías de comunicación a veces muy ricas. Todo, en la confianza de que ese contacto con la gente nos hace mejores.
Y ahora, desde el departamento de Proyectos, he podido participar en la puesta en marcha de soluciones que profundizan en la idea de que el usuario tiene que tener el control máximo del producto que hacemos. Que debe poder explorarlo, adaptarlo a sus necesidades y utilizarlo como quiera.
Particularmente, creo que el player multiseñal (multicámara) que estrenamos con los Juegos Olímpicos de Sochi es un ejemplo perfecto de esta entrega del control al usuario. Desde Sochi para acá hemos ido mejorando la experiencia, hasta llegar al punto que pusimos on line el pasado viernes para la final de la Champions. Esta última versión del multiplayer, como le llamamos internamente, es una auténtica consola de mandos para que el usuario elija lo que quiere ver.
Si en Sochi se podía elegir qué deporte ver, en la final de la Champions los internautas podían:
1 - Elegir entre cinco cámaras diferentes, incluyendo las que estaban fijas en Simeone y Ancelotti, y también una cámara 'spyder' o cenital.
2 - Ver hasta cuatro de esas cámaras simultáneamente, decidiendo en cada momento si se quería ver en grande, en pequeño (picture in picture), a pantalla completa... Eligiendo qué audio se quiere escuchar...
3 - Elegir la retransmisión en HD y verlo en un player de una calidad altísima.
4 - Elegir la retransmisión de Radio Nacional y combinarla con cualquiera de las señales de televisión.
5 - Seguir el relato minuto a minuto mientras se escucha la radio o se ven las imágenes.
6 - Consultar la encuesta de mejor jugador, y votar en ella.
7 - Comentar el partido con otros usuarios y leer esa charla social (filtrando también hashtags de Twitter).
8 - Ver (y compartir) qué vídeos están compartiendo los usuarios de la aplicación de second screen +TVE, que hacen su propia edición de los momentos más destacados del partido.
9 - Ver (y compartir) vídeos del partido que van entrando en A la Carta a lo largo del encuentro: goles, fragmentos importantes... Y, claro, combinada la reproducción 'on demand' con el directo.
Lo dicho: un panel de mandos como pocas veces se le ofrece a un usuario en Internet. La foto ilustra en parte lo que digo, aunque lo puedes comprobar en la página del directo.
Por cierto, que, por segunda vez (la primera fue la final de la Copa del Rey) se daba también la posibilidad de elegir la cámara que se quiere ver en las televisiones conectadas de última generación a través del servicio de Botón Rojo. Esta opción, que supone inyectar directos en streaming en la televisión como complemento a emisiones convencionales, es pionera en el mundo, y también va en pos de dar al usuario/espectador la mayor cantidad de control posible.
Me podría enrollar mucho más hablando de visualizaciones de contenidos procedentes de las redes sociales, de traslado de la participación social a la pantalla de televisión... Incluso de cómo aprovechamos esa 'edición popular' que se hace a través de +TVE para ofrecer un punto de vista diferente a la tele, que muestra los vídeos más compartidos por la comunidad de +TVE. Y esto es intersante, porque es la 'second screen' alimentando a la 'first screen'.
Pero me quedo con la idea central: si queremos hablar con propiedad de televisión social, tenemos que profundizar en estas líneas de trabajo. Darle al usuario todo el control, porque él es quien manda de verdad en lo que hacemos. Los usuarios lo agradecerán, estoy seguro.