Los perros justos y el derecho natural
viernes 4.ene.2013 por Pepe Cervera 2 Comentarios
A veces los seres vivos mostramos rasgos que pueden parecer sorprendentes a primera vista. Por ejemplo, sabemos que los seres humanos queremos justicia en el trato; en presencia de situaciones manifiestamente injustas el cerebro reacciona, y se estresa; literalmente la desigualdad se asocia en nuestra mente con incomodidad y dolor. Es por eso que somos tan rápidos en detectar injusticias, sobre todo cuando nos perjudican; por lo que resultamos tan dados a protestar, y por lo que los niños enloquecen a los adultos con sus reclamaciones: 'no es justo' es una protesta infantil familiar para cualquier progenitor. Es la razón de que en el derecho se pueda hablar de la existencia de un 'derecho natural', y de que consideremos la igualdad como un valor evidente y supremo. Y lo más espectacular es que se trata de un rasgo biológico que compartimos con otros mamíferos, como los cánidos. Porque resulta que los perros reaccionan cuando se cometen injusticias contra ellos. El anhelo de igual trato parece preprogramado en algunos animales. La justicia existe, al menos en nuestro cerebro.
Según un experimento etológico los perros que no reciben recompensa tras hacer un truco, después de ver que otro perro sí que la recibe, muestran señales de estrés. Es decir, que hay una respuesta biológica ante una situación de trato desigual, como si el animal estuviese siendo objeto de persecución o ataque. Puede parecer obvio, pero no tendría por qué ser así; en la situación experimental el animal injustamente tratado no sufre ninguna merma que pueda dañar su salud, o su eficacia reproductiva. No hay una razón evidente por la que la evolución debiera favorecer un instinto de justicia en los seres vivos. Antes bien al contrario; la interpretación clásica de la selección natural como competición feroz, la naturaleza 'con garras tintas en sangre' de algunos evolucionistas decimonónicos parecería impulsar un instinto de injusticia basado en la superioridad. En la guerra, siempre se afirma, no caben leyes.
Hay varias posibles explicaciones a esta aparente contradicción. Podría ser que el instinto de trato justo fuese un efecto secundario de la estructura del cerebro; que un sistema nervioso más eficaz, seleccionado por esta causa, resultara ser por coincidencia amante de la justicia. Pero hay otra explicación más probable, que tiene que ver con la teoría de juegos y con las dos características que compartimos humanos y perros: y es que ambos somos mamíferos altamente sociales. Nuestra mayor eficacia reproductiva, favorecida por la selección natural, no se obtiene en competencia individual,sino como parte de un grupo que coopera. Y es probable que para funcionar bien dentro de un grupo cooperativo sea necesario, o al menos beneficioso, tener un sistema interno de trato igualitario. Quizá los individuos que tienden a tratar con justicia a sus compañeros tienden a vivir mejor, y por tanto a dejar más descendencia.
Los seres humanos somos tan intensamente sociales que el contacto con otros seres humanos es para nosotros tan importante, literalmente, como respirar: las personas que pasan demasiado tiempo aisladas acaban por enloquecer. La mente se rompe cuando no puede interactuar con otras mentes, como ocurre con náufragos o presos en aislamiento: el grupo social nos es necesario como el agua o el alimento. Por su parte la Teoría de Juegos nos indica que en las interacciones sociales los grupos compuestos únicamente por halcones (elementos egoístas) son inestables, y acaban por desaparecer. De modo que un amortiguador social puede ser necesario para formar grupos cooperativos grandes y estables, como aquellos en los que viven los perros, y nosotros mismos. Un sentido biológico de la justicia sería así lógico en animales complejos y sociales. Y un cierto 'derecho natural' basado en la igualdad y no en la ley sería real. La justicia estaría así dentro de nosotros; un pensamiento tal vez consolador, sobre todo en estos tiempos de injusticias. Tal vez el anhelo de igualdad forme parte tan intrínseca de la naturaleza humana como la inteligencia, o quizá hasta más.
Nadie dijo
Pasan los dias los años y que haces tu sino hablar? Para que sirve? Para evolucionar a tu ritmo. Pues baila baila ya que te gusta. Pero no esperes que los demas sigamos al jefe de la manada. Has hecho bien en casarte con Celia. Mejor habrias hecho en no despertarme a mi. Date por enterado que si me suicidé es porque no te aguantaba..ni antes ni ahora.
Nadie dijo
Durante 49 años has manejado los hilos sin yo saberlo. Ahora has perdido tu oportunidad...Impones todo a todo el mundo menos lo que hay que imponer, has tenido 2000 años para cambiar esto y ya el planeta a punto de destruirse tu sigues riendo...
por eso te llaman Jokerman...te va como anillo al dedo. Felicidades por tu mujercita y tus dos niños. Sois todos muy guapos ricos y famosos. Para que te vas a molestar en cambiar nada si a ti te va tan bien?
Las limosnas se las das a las putas que te cruzas todos los dias en la puerta. A ellas les puede interesar la reencarnacion, los 4 acuerdos y la dieta vegana. Cuando te bloqueen las ondas cerebrales no voy a evitar reirme yo. Eres un Perdedor. A los ojos de Celia no, por eso estas con ella y no conmigo. Tus inventos de destruccion son la huida a la que te refieres supongo.