Hablemos del tiempo.

SC_12-05_HABLEMOS_DEL_TIEMPO

Hablar del tiempo está infravalorado, es el recurso fácil, ante la falta de ideas o el deseo de no incomodar en una situación incómoda. Es una salida típica que se apoya en un tópico.

Hablar de la primavera lluviosa que estamos teniendo, creo que es un principio estupendo para una conversación, si se acompaña con la contemplación de la gama de verdes que lucen los jardines y el campo, un ejercicio de comunicación cargado de estímulos.

Éstos días he vuelto a viajar en Metro, ha pasado mucho tiempo desde la última vez que lo hice con cierta asiduidad y en éste retorno he descubierto el autismo sobre todo de la gente más joven. El tren paró en una estación y se subió una pareja mayor, el hombre dudó cómo picar su billete, enseguida otro señor de la misma edad le indicó cómo debía hacerlo, el tren iba lleno, se presentaron e iniciaron una conversación, que empezó en el tiempo y acabó en los orígenes madrileños de ambos, me siento extranjero en mi tierra dijo el hombre que no sabía picar el billete.

Yo me sentí extranjero en el Metro, porque  recordé que cuando viajaba a diario en los trenes del suburbano madrileño la gente no hablaba tampoco, pero se observaba, había cruces de miradas y los viajeros no parecían ausentes.

Sin canto ni grillo. Javier Hernández.