Nosotros fuimos Gladio es un apasionante documental que relata la verdad sobre el secreto mejor guardado de la Guerra Fría: Los "espías durmientes". Ciudadanos anónimos fueron entrenados para convertirse en espías. Una red paramilitar secreta dirigida por la OTAN para formar agentes durmientes con el objetivo de detener un posible golpe comunista en Europa Occidental. Lo podéis ver este lunes, 15 de febrero, a las 21:00, en Documenta2.
Desde el descubrimiento de su filial italiana 'Gladio' en 1990, sigue siendo un misterio quién estaba detrás de esta organización. La OTAN no habla de ello, los archivos han sido sellados, sus agentes son desconocidos. El documental destapa ahora los secretos de esta organización.
La Operación Gladio fue una organización terrorista secreta anticomunista desarrollada en la Europa Occidental y apoyada y financiada por la CIA estadounidense. El nombre de Gladio se aplica generalmente a una serie de organizaciones paramilitares de diversos países, aunque lo más común es su utilización exclusivamente para referirse a los paramilitares italianos. Fue descubierta el 24 de octubre 1990 por el Presidente del Consejo de los Ministros italiano Giulio Andreotti; Italia, Suiza y Bélgica desarrollaron investigaciones parlamentarias. La trama fue condenada por el Parlamento Europeo en resolución del 22 de noviembre de 1990.
La Operación Gladio fue ideada después de la Segunda Guerra Mundial por la CIA y el MI6, y tenía como objetivo prepararse ante una eventual invasión soviética de la Europa occidental por medio de fuerzas armadas paramilitares secretas de élite dispuestas en diversos países capitalistas. Finalmente la situación degeneró en el empleo de varias estrategias de guerra sucia, tales como la infiltración, y las operaciones de bandera falsas (como en la estación de Bolonia, en Italia) para destrozar la imagen pública de partidos políticos (al señalarlos falsamente como los autores del ataque) no colaboradores con los EEUU (nacionalistas y comunistas), y así evitar su ascenso por las urnas.
Todos los países capitalistas de dicho continente poseían contingentes secretos. Muchos nazis derrotados tras la II Guerra Mundial fueron miembros de Gladio, que aceptaba solamente a "gente segura", es decir, militantes nacional-socialistas alejados del conservadurismo moderado y de la izquierda; librándose también de esta manera de juicios de guerra y en muchos casos manteniendo un alto nivel de vida.
Además de prepararse ante una posible invasión, estas fuerzas de retaguardia han sido utilizadas por la CIA para influir en la política de algunos de estos países. Un caso singular fue la implicación de Licio Gelli, jefe de Propaganda Due (P2), Stefano Delle Chiae también involucrado en la Operación Cóndor, o Vincenzo Vinziguerra en la "estrategia de la tensión" en Italia.
También en Italia, las masacres de Peteano (1972), de la Piazza Fontana (1969), de la estación de trenes de Bolonia (1980) y el golpe fallido "Golpe Borghese" (1970) fueron obra de Gladio. El asesinato del Primer Ministro Aldo Moro, llevado a cabo por las Brigadas Rojas en 1978, también se ha vinculado a la oposición de Gladio a su política de Compromiso Histórico. En Grecia, las fuerzas de Gladio estuvieron involucradas en el golpe de estado de 1967.
Podéis descubrir todos los secretos de esta organización, este lunes, 15 de febrero, a las 21:00, en Documenta2.
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