Durante los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936, el atleta afroamericano Jesse Owens y el alemán Lutz Long sorprendieron al mundo con una extraordinaria amistad. En la final de salto de longitud se enfrentaban Owens, un atleta afroamericano que se convertiría en el héroe de los juegos al ganar cuatro medallas de oro, y Long, el atleta favorito de Hitler. Todo parecía que les enfrentaba y sin embargo su gesto , su abrazo, conmovió al mundo. Menos a Hitler y a los suyos que lo vieron como un desafío. Una historia apasionante que podéis ver en el documental Jesse Owens y Lutz Long: un abrazo que hizo historia; este miércoles,17 de agosto, en Documaster, a las 23:40 en La2 de TVE.
Jesse Owens provenía de una familia pobre y se vio obligado a trabajar desde los seis años junto a sus hermanos recogiendo algodón, mientras sus hermanas se encargaban de la casa. Owens y su familia huyeron del sur y se mudaron a Cleveland, donde confiaban encontrar mejores condiciones de vida gracias al desarrollo industrial que se estaba dando en aquel momento. Allí, se matricula en el instituto de Fairmont, donde conoce a Charles Riley, su primer entrenador. Riley se dio cuenta de las aptitudes de Owens y decidió enseñarle las técnicas más básicas. Fue en la universidad de Ohio cuando conoció al entrenador que lo llevaría a la fama, Larry Snyder.
Lutz Long, por su parte, nació en el seno de una familia acomodada de farmacéuticos en la ciudad de Liepzig. A los 12 años construyó su propia pista de salto de longitud en el jardín de su casa y a los 16 se inscribió en el Club Deportivo de Liepzig, donde pronto dominó otras disciplinas, tanto individuales como colectivas. Long era uno de los atletas predilectos de Hitler al representar el ideario de la raza aria. Sin embargo, aunque nunca fue especialmente crítico con el gobierno, el atleta no se identificaba con dichas ideas. En varias cartas remitidas a su madre, Long afirmaba que “la raza y el color de piel no tienen importancia, no determinan el destino de un pueblo”. (Sigue leyendo la noticia sobre el documental Jesse Owens y Lutz Long: un abrazo que hizo historia).
“Cuando pasé, el Canciller [Adolf Hitler] se levantó, me saludó con la mano y yo le devolví la señal. Pienso que los reporteros tuvieron mal gusto al criticar al hombre del momento en Alemania.”
—Jesse Owens, en una entrevista al Tampa Tribune antes de fallecer en el hospital de cáncer
del 01/04/80, páginas 1 y 3-6:
"Es difícil imaginar mi felicidad. Cuando corría, hubo un momento en que me pareció que tenía alas. Todo el estadio se mostraba tan animado, que me contagió y corrí con más alegría; pareciendo que había perdido el peso de mi cuerpo. El entusiasmo deportivo de los espectadores alemanes me impresionó profundamente, especialmente la caballeresca actitud del público. Pueden decir a todos que agradecemos la hospitalidad germana"...
- JESSY OWENS, publicado por el "Correio do Povo" de 4/VIII/1936
Publicado por: GAdoctrinado | 18/08/2016 en 04:25
"En la Alemania nazi, lo trataron como a un igual", comentó William J. Baker, el biógrafo de Owens.
"Cuando volví a mi país natal, DESPUÉS DE TODAS LAS HISTORIAS [QUE SE INVENTARON] SOBRE HITLER, no pude viajar en la parte delantera del autobús en mi propio país. Volví a la puerta de atrás. No podía vivir donde quería. Ni siquiera fui invitado a la Casa Blanca a darle la mano al Presidente de mi país."
- Jesse Owens, campeón olímpico Estadounidense en Alemania 1936. (The Jesse Owens Story, de 1970)
“realmente presencié a Hitler estrechando sus manos con Jesse Owens y felicitándolo por lo que él había logrado."
— Eric Brown, piloto más condecorado aún vivo de la marina británica, Documental de la BBC “Britain's Greatest Pilot: The Extraordinary Story of Captain Winkle Brown” desde el minuto 5:35, June 1, 2014.
“ambos estrecharon sus manos y Owens portaba en su billetera una foto con Hitler, Owens me dijo “FUE UNO DE LOS MOMENTOS MÁS LINDOS DE MI VIDA” la foto había sido tomada en la mesa de los triunfadores y por eso los reporteros no lo testimoniaron. Yo lo vi, ¡YO LO VI!”
— Sigfrid Mishner, periodista deportivo, “Daily Mail” británico 2008
El racismo alemán no odiaba las demás razas, sólo era pro-germánico buscando una sociedad culta y sana, y que los demás pueblos hicieran lo mismo.
Publicado por: GAdoctrinado | 18/08/2016 en 04:26