El Mundial de Turín
Escribo con retraso sobre el mundial que acaba de terminar. Y lo hago con retraso porque el día no me da de sí. No he estado en Turín sino que he sonorizado desde Torrespaña y eso significaba llegar sobre las 12 de la mañana para meterme en el estudio, ordenador y papeles en ristre, hasta las 22:30 o 23:00 horas. Y luego recoger y marchar para casa.
La verdad es que cuando llegaba a casa , lo último que me apetecía era ponerme a escribir. Sólo quería meterme en la cama y dormirme. Y callarme, para poder tener la garganta en condiciones para las doce horas de transmisión del día siguiente.
He comido sándwiches por la mañana, a media tarde,...