Noticias Fitur 2020 (I)
miércoles 22.ene.2020 por Ángela Gonzalo del Moral 0 Comentarios
De las muchas propuestas turísticas que estos días podremos ver en Fitur hemos escogido varios destinos que nos permiten descubrir algunas ofertas de turismo nacional, que nos ofrecen escapadas de un día o de un fin de semana largo, sin hacer largos recorridos.
Valladolid y sus cinco denominaciones de origen
Bañada por la cuenca del Duero, la provincia de Valladolid es tierra de vino. Lo atestiguan sus cinco denominaciones de origen y cuatro rutas certificadas. Con 22.000 hectáreas, dedicadas al cultivo de la vid, los viñedos forman parte de su paisaje como los castillos y sus pueblos con historia. El enoturismo nos permiten descubrir esa riqueza paisajística y cultural, a través de las denominaciones Rueda, Cigales, Ribera del Duero, Vinos de la Tierra de León y Toro.
La oferta gastronómica se enriquece con el Museo Provincial del Vino de Peñafiel, comidas y cenas en restaurantes y bodegas, o a través de la propuesta Riberas de Castronuño-Vega del Duero, que proponene una cena a la luz de las estrellas -ahora que estamos cerca de San Valentín, puede ser una buena opción para parejas-. Algunos de los platos típicos de la región son la ternera sayaguesa, la morucha, sopa castellana, cordero, periquillos, perronillas, mermeladas, morcillas, quesos de cabra y oveja, conejo, perdiz, pichón y el lechazo al horno.
A lo largo de todo el año se realizan diversas actividades lúdicas relacionadas con el vino, como las visitas teatralizadas o recreaciones históricas, catas de vino sin alcohol, pensadas especialmente para las familias, rutas a caballo, piragüismo o participar en algunas tareas del campo, correr entre las viñas, rutas ciclistas junto al canal de Castilla, o visitar bodegas subterráneas a 13 metros de profundidad.
En Toro se puede contemplar la Vega del Río Duero, desde el mirador del "Paseo del Espolón", observando los viñedos plantados en oteros. El emblemático río está carcado de simbolismo y une tierras de Valladolid con otros grandes territorios vinícolas de España y Portugal.
Otra apuesta presentada en Fitur es el tren de Vino de Noche, que se inaugura este año y permite pernoctar en algún municipio de las diferentes D.O., e incluye dos días de ruta vinícola. Esta oferta se añade a otra ya existente, que es el tren del vino. Parte desde Madrid y regresa el mismo día, con teatralizaciones a bordo, incluyendo visita a bodegas, cata en algunas de las más importantes bodegas de la provincia y comida.
Benicássim apuesta por la salud
Desconectar del estilo de vida frenético y agotador para encontrar el equilibrio entre cuerpo y mente. El municipio castellonense de Benicàssim es sinónimo de sol, playa y conciertos. Ahora da un paso más y sin renunciar a su ADN turístico, presenta un ambicioso proyecto, basado en el bienestar físico y mental, que está recogido en la plataforma Benicàssim Experience. Con esta iniciativa turística los responsables municipales quieren atraer a los turistas que apuestan por no dejar de lado su salud mientras disfrutan de sus vacaciones o aquellos que han escogido esta ciudad para disfrutar de su jubilación. Una población cada vez más numerosa que quiere cuidarse.
Llevar a la práctica la famosa frase de Juvenal Mens sana in corpore sano, a través del deporte para mejorar la salud, mientra se realiza un turismo sostenible. Es decir que engloba cuatro aspectos: deporte, salud, turismo y sostenibilidad.
Con una excelente climatología, de más de 300 días de sol al año, situada entre el mar y la montaña, la población de la Costa de Azahar crea un club de Producto y un distintivo de Destino saludable, bajo el lema Benicàssim Experience. El objetivo es ofrecer al visitante una oferta de experiencias healthy, gastronomía slow food, actividades al aire libre, y de envejecimiento activo. Benicàssim destaca también por su variedad gastronómica basada en productos propios de la dieta mediterránea, reconocida por la OMS como una de las más saludables del mundo.
Eso sin olvidar sus 5 playas, extendidas a lo largo de 7 kilómetros de costa, que junto al turismo familiar, la han convertido en un destino tradicional durante décadas, y a los que ha añadido otras iniciativas culturales como la Ruta de las villas, que permite conocer unos 20 palacetes de la Belle Époque o la recreación histórica en la Torre Sant Vicent !Benicàssim, torre a la vista!, que se celebra a mediados de junio. Eso sin olvidar sus grandes citas musicales, convertidas en un referente del verano como el FIB-Festival Internacional de Benicàssim, a mediados de julio, que da paso al festival de magia Imagina Benicàssim, que se celebra una semana después (del 23 al 26 de julio) y el Rototom Sunsplash a mediados de agosto.
La Vera, presenta naturaleza y riqueza histórica
La Mancomunidad Intermunicipal de La Vera presenta sus grandes apuestas turísticas como la Ruta del Emperador, el cementerio alemán o el Monasterio de Yuste. Esta población extremeña forma parte del itinerario cultural europeo de la Ruta de Carlos V, convertido en uno de los emblemas y recursos turísticos más desarrollados de la comarca, que fue la primera en ver el potencial del emperador hispano-alemán como atractivo turístico, convertida en ruta europea en 2015.
La Vera, situada al norte de Cáceres ofrece interesantes paisajes de castaños, robles, dehesas, monte bajo, gargantas, chorros, cascadas y piscinas naturales, lo que demuestra que el agua es un elemento siempre presente en la zona. Pueblos pintorescos como Jarandilla, Villanueva, Jaraíz, Valverde o Pasarón con casas levantadas en madera, barro y piedra. En los balcones se pueden ver ristas de pimientos secándose al sol y caminos históricos adaptados para realizan senderismo.
El pimentón es una de las señas de identidad de la cocina veretana. En el museo del Pimentón de Jaraíz de la Vera, se puede descubrir todo lo que rodea a este producto y las fases de producción (cultivo, cosecha y secado) así como las herramientas que se utilizan en los diferentes procesos. Algunos de los platos de La Vera son la ensalada de zorongollo, el ajo de patatas, el mozu de pescado, la sopa verata, el Rin Ran. Entre los postres destacan follos, riturcius, perrunillasalmorracas, obispos, floris frisáis, etc.
El emperador Carlos V, atraído por la serenidad del lugar, escogio el Monasterio de Yuste para pasar los últimos años de su vida. Su presencia y la obra política están particularmente presentes en los lugares históricos y manifestaciones culturales que mantienen viva la memoria de este soberano paneuropeo del siglo XVI en La Vera.
Compuesta por 61 sitiales, 31 altos y 30 bajos, además de un banco de 3 asientos, la iconografía de la sillería de la iglesia del Monasterio de Yuste esta protagonizada por la fauna, tanto real como fantásticas, cargada de simbología de vicios y virtudes. La sala de audiencias del Palacio está presidida por un retrato de la Emperatriz Isabel. Carlos V estuvo tan unido a ese cuadro que lo llevó siempre consigo.