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¿Dónde está Clara Anahí?

Esta pregunta sin respuesta atormenta a la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, María Isabel Chorobik de Mariani --conocida como Chicha-- desde hace más de 30 años.

El 24 de noviembre de 1976, un contingente de 200 policías y militares bajo las órdenes de los generales Camps y Suarez Mason, asaltaron una casa en la ciudad de La Plata, empleando tanquetas, helicópteros y bazookas, buscando una imprenta clandestina de la extrema izquierda peronista. Los uniformados asesinaron a la nuera de Chicha y secuestraron a su nieta de tres meses, Clara Anahí. Una práctica común en los centuriones del general Videla, que consideraban a los niños como botín de guerra. De una guerra sucia contra la subversión, que causó la desaparición de cerca de 30.000 detenidos.

Nunca más volvió a saberse de Clara Anahí, que desapareció entre las brumas de la dictadura militar, entre medio millar de niños arrebatados a sus madres, para ser entregadas a las esposas estériles de los verdugos castrenses o de sus cómplices civiles. La mayoría nacieron en cautividad, ya que los verdugos esperaban a que las prisioneras parieran antes de matarlas, para apoderarse de las criaturas. Pero también hubo niños --como Paula Logares, Carla Rutila Artés o la propia Clara Anahí-- que fueron secuestrados cuando tenían pocos meses.

Chicha Mariani había vivido siempre ajena a la política, casada con un músico y dedicada a la enseñanza. Pero el secuestro de su nieta Clara Anahí la llevó a fundar y presidir Abuelas de Plaza de Mayo. Y convirtió su vida en una búsqueda interminable, con profundas decepciones cada vez que creyó haber encontrado a su nieta y los análisis genéticos lo desmintieron. Su infatigable trabajo sirvió para localizar a decenas de hijos de desaparecidas, permitiéndoles recuperar sus identidades y conocer a sus verdaderas familias. Pero no para encontrar a Clara Anahí, que continúa viviendo envuelta en una trágica mentira. ¿Dónde está? ¿A quien fue entregada?

Días atrás, Chicha Mariani lanzó una nueva campaña , con una exposición y una serie de actos públicos. A la edad de 85 años, casi ciega, continúa buscando a su nieta. No ha perdido la esperanza de encontrarla, aunque sabe que le queda poco tiempo. Pero se muestra determinada a luchar hasta su último aliento: ‘No tengo derecho a morirme, no puedo morirme. Porque no me puedo ir, realmente no me puedo ir sin encontrar a Clara Anahí.’

Reportaje en Informe Semanal

19 Comentarios

Impersionante mujer; una autentica abuela coraje. sería estupendo que pudiera, por justicia, conseguir la meta de su sueño.

Ah saber dónde se encuentre.Hay tantas injusticias, tantas que se podrían escribir libros enteros, de páginas de sufrimiento , dolor, hastío, y revelación.Yo comparo esto con personas homosexuales que les ha tocado vivir la vida en pueblos de mierda (con perdón) retrográdos, con familias que no saben ni comprenderlos, con cuñados y familiares (sobrinos) que aún sabiendo el sufrimiento que conlleva se ríen o se mofan de ellos ... los toman por personas de menos valía (QUE NO ES POCA) sobre todo, aún cuando conllevan la enfermedad del sida, enfermedad que se lleva tratada pero que es como llevar la letra escarlata (por cuatro gilipollas que te lo hacen público y que encima no están en la cárcel).Tada mi fuerza para las personas que sufren en el mundo y no lo merecen.

Terribles sucesos de una de las páginas más negras en la historia de Argentina. Dos caras, tan opuestas como reales del ser humano. Tan inexplicable es que un ser humano, sea capaz de generar tanto dolor y sufrimiento.
Como inexplicable, alcanzar a entender la capacidad y fuerza, no solo para sobreponerse, si no para luchar y vivir sin descanso en busca del ser querido. Supongo que el amor, el ENORME AMOR, que cabe en los corazones maltrechos de esas abuelas de la plaza de Mayo.
Ánimo a Chicha Mariani. Ánimo a todas las abuelas de P.M. Mucha suerte. Es de justicia.

Mientras veía el reportaje en Informe Semanal, pensaba que tenía un sabor especial que me recordaba al gran Vicente Romero y claro, al terminar la proyección, en los créditos aparecía su nombre. LLevo toda mi vida escuchando, viendo y leyendo historias sobre las Madres y Abuelas de La Plaza de Mayo, pero nunca, hasta anoche al ver su crónica, me había sentido tan cercana a la lucha de estas mujeres que han invertido treinta años de sus vidas en intentar reconstruir su pasado y saldar esa deuda moral que sienten hacia sus hijos. Ya sólo quedan tres miembros de las fundadoras de Las Abuelas de la Plaza de Mayo, quizá al morir ellas se pase al olvido esa página de la historia reciente de Argentina. Gracias por aproximarnos a esos hechos tan crueles y a los testimonios de esas vidas rotas por la más brutal, inhumana y despiadada dictadura militar del cono sur de América.
Un afectuoso saludo Señor Romero.

Tenemos muy frágil la memoria. Olvidamos muy pronto las tragedias de los otros, las que no nos tocan de cerca. Necesitamos que nos recuerden las miles de heridas que siguen abiertas, las injusticias que se comenten en nombre del poder (político, económico, en el fondo quizás sea lo mismo).
Tal vez lo único que les quede a las víctimas sea la voz de unos cuantos periodistas que se abren hueco entre tanta basura de la TV, para no dejarnos dormir del todo las conciencias.
Aún no hemos reparado las barbaridades del siglo XX y seguimos como espectadores mudos ante las del XXI. Un mundo muy tecnológico, pero queda tanto importante por hacer.

Aloha D.Vicente.
Querida Abuela: haz una pregunta ahi,quizas pueda servir esta pagina,por mil razones www.lapaginadelmaestro.com

Leí hace mucho tiempo la historia de Clara Anahí y ahora descubro que sigue sin aparecer. Me ha emocionado mucho la última parte. Pensar que el mundo puede ser tan injusto como para que esa mujer se muera sin cumplir su sueño. Quizás ocurra y, sin embargo, ¡cuántas cosas habrá conseguido con su determinación! Saludos y enhorabuena por el blog.


Gran labor la de ese grupo de mujeres, las abuelas de la Plaza de Mayo, de las que solo quedan tres de las fundadoras. Ojalá Chicha logre encontrar a Clara Anahí y ojalá su suerte con la familia apropiadora haya sido mejor que el de una de sus nietas de afecto, porque el testimonio de esta chica (a la que criaron personas -por decir algo- que no la querían, la maltrataban, etc.) era de llorar.
Gracias por el reportaje pues -como dicen algo más arriba- necesitamos que nos recuerden estos y muchos otros hechos.

Qué lástima que esta gente, con tanta fuerza interior, tengan que dedicar todo el esfuerzo de su vida a encontrar a una persona cuando, en condiciones normales, hubieran podido hacer cosas mucho más productivas para su comunidad. ¡Cuánta pérdida de tiempo provocan las dictaduras!

ALIKATAZO........UNA DEMANDA!!!
http://www.youtube.com/watch?v=cutZdy_qO2M

Corpi: Hacer las cosas mal no cuesta nada y rehacerlas para que vuelvan a su estado, sí. Mucho peor sería el olvido y la desmemoria. Necesitamos recordar porque estamos hechos de emociones. En ellas reside nuestra riqueza fundamental, que es una riqueza acumulable porque las emociones son más perfectas de vez en vez. Cuando el crimen, que yo lo considero una lacra mental y una condición espúria del ser humano, se hace con el poder nos pueden caer encima toda clase de males y ninguno bueno. Lo que hacen las mujeres argentinas de la plaza de Mayo es una labor sanitaria que no las cura sólo a ellas, puesto que estas mujeres nos representan al resto de la humanidad.

qe loco tengo 16 años y me pone la piel de gallina saber de estas historias. solo kiero decirle a esta mujer qe es de oro y qe las esperanzas es lo ultimo qe se pierde!!
un abrazo fuerte

HOME PROJECT GAIA ARCOIRIS BANCO DE MEMORIAS PSI NIMBOIDE MEMORIA PLANETARIA Consciencia Planetaria arbol Informado!

Me entere la historia de Clara Anahí leyendo la casa de los Conejos, y desde allí es que le pido a dios que su abuela pueda encontrarse con ella y descubrise en su mirada como lo sueña. Por lo que leí sus padres eran unos luchadores.
Qué dios derrame mucha luz en esta abuela y en esta nieta que esperan por encontrarse
un beso grande
Eva

Querida y HERMOSA ABUELA CHICHA,no te irás antes de encontrarla.La ley de la vida tiene que devolverte a esa esperada nieta.Desde este momento voy a pedir y a rezar para que Clara Anahí sepa que la buscas y que la esperas.VENDRÁ!!!.Un ABRAZO.

He leido todos los comentarios y es muy bueno que todos apoyen de corazón a esta abuela, pero no veo ningún comentario de como ayudar, no solo a esta abuela, tambien a esta mujer de 31 años a recuperar su identidad.
Soy Policia de la Provincia de Córdoba, estoy seguro que habrán realizado muchas averiguaciones, pero creo que buscar por un documento similar al número con el que fue anotado la niña , en ese momento no es el camino. Hay un número mayor de hipotesis investigativas que posiblemente puedan ayudar a ubicar a esta hoy mujer de 31 años, pero necesitan que la justiucia disponga del personal idoneo y los medios para hacer posible este anelo de esta abuela, que por experiencia estoy convencido se puede lograr, en medida que existan las desición política. Si existe la posibilidad de que pueda ayudar en forma efectiva no duden en consultarme, esta mi correo a disposición y espero de corazón que quien se esta ocupando de la busqueda amplie el abanico de lineas investigativas que lleven al resultado deseado.
Con el mayor de los respetos y el mejor de mis deseos Sargento Rafael Saenz de Tejada. [email protected]

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Vicente Romero


Vicente Romero es uno de los reporteros más veteranos de TVE. Desde este blog cuenta sus viajes a los lugares donde viven los más desfavorecidos del mundo. Si hace falta izar una bandera de palabras para definir contenidos e intenciones, puede servir el verso de José Martí que da título a este blog.
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