Araneae, de profesión jugón
Es el sueño dorado de cualquier amante de los videojuegos, ganarse la vida con el mando o el teclado en la mano, convirtiendo un hobby en una profesión más que rentable. Pero no es un sueño, en su caso es algo real. Alvar Martín ha conseguido con apenas 25 años ser toda una estrella jugando a “League of Legends”, uno de los títulos más populares de los llamados e-sports, las competiciones mundiales de los videojuegos más conocidos. Sus rutinas son las de un deportista de élite, con horas de entrenamiento, viajes por todo el mundo para competir ante miles de fans, férreas disciplinas de trabajo, protagonizar campañas publicitarias, firmar autógrafos,… Pero en lugar de vivir pegado a un balón como hacen Cristiano Ronaldo o Leo Messi, él tiene otras herramientas más tecnológicas.
Se inició en esto de los videojuegos como lo hacemos todos los chavales, por influencia de los amigos o de un hermano mayor, que fue quien en su caso le descubrió lo divertido que podía ser jugar con el Spectrum. Después vinieron las consolas, muchas horas de Street Fighter, de Doom, de Starcraft… hasta que finalmente descubrió el juego que hoy le ha dado fama mundial, “League of Legends”.
Charlando con él, en la entrevista que nos concedió para 3.0 de Radio 3 Extra, descubrimos a un chaval encantador, alguien con la cabeza muy bien amueblada, que quiere acabar lo antes posible sus estudios de Ingeniería Industrial, (ya le quedan muy pocas asignaturas), y es ese uno de los consejos que da a los chavales que quieren seguir sus pasos, “bajo ningún concepto se deben descuidar los estudios y la formación porque es de eso de lo que vivirás en un futuro”.
Entre las marcas de tecnología que le patrocinan, el sueldo que le paga su equipo y la retribución que recibe por formar parte de la liga oficial de “LoL”, se embolsa una buena cantidad que no quiere concretar pero que le da para vivir bastante bien. A cambio, nos recuerda que la exigencia es máxima, que hay épocas en las que tiene que entrenar 10 o 12 horas para no bajar el nivel y que tiene siempre una maleta preparada porque hace media vida en los aeropuertos de Europa.
Mallorquín de nacimiento, tiene su residencia habitual en Madrid pero se pasa meses en Alemania entrenando con su equipo, (al menos lo hacía con el anterior porque recientemente ha cambiado de escuadra), y desde allí, viajan a los torneos más importantes del mundo. Torneos que congregan a miles de enfervorizados jugadores que pagan por verles competir en pantallas gigantes. “Aquí no nos hacemos una idea de lo que supone un torneo de e-sports, pero hay países, especialmente en Japón o Corea, donde la gente hace colas de horas y llena pabellones de deportes con capacidad para diez o quince mil personas.
Ya le ha ocurrido el que alguien le pare por la calle y le pida un autógrafo, y no le coge de nuevas. Ahora, Araneae que es su nombre de guerra y por el que le conocen en todo el mundo, prepara su propia línea de ropa y complementos para “jugones”, para esos mismos que por miles le siguen en Twitter y ven en vídeos de Youtube sus espectaculares partidas. Él ha hecho realidad lo que para muchos es un sueño, responder a la pregunta ¿a qué te dedicas?, con un contundente “Yo soy jugador de videojuegos profesional”.