La guerra y crisis de Siria durante los últimos años ha sido ampliamente documentada ampliamente por los medios de comunicación. El periodismo ha jugado un papel clave en la propagación de información y en intentar explicar en detalle el problema y su evolución. Además de reportajes, documentales e infografías, también se han creado campañas como Planet Syria:
Además de todo lo expuesto hasta el momento, también se han realizado originales parodias sobre el hecho de ser Sirio y tener que marchar del país. Buen ejemplo de ello es Refugee Mario, un vídeo satírico inspirado en el juego original de consola de Nintendo que tiene como objetivo explicar la realidad de los sirios que emigran a Europa. A través de un personaje sirio, este video de YouTube muestra el peligroso viaje de los desesperados que buscan refugio en el viejo continente. El video ha sido realizado por un joven sirio que reside en Turquía y utiliza el seudónimo de Samir Al-Mufti.
Vídeo Refugee Mario
La muerte en el mar de un amigo suyo intentando escapar de Siria empujó a Al-Mufti a crear este vídeo viral, escogiendo el videojuego de Mario como metáfora porque la historia del viaje es un idioma universal y la narrativa de Mario conocida por todos. El autor ha utilizado la sátira en otras propuestas audiovisuales desde la posición crítica que mantiene con la política del presidente, hecho que le hizo crear una parodia de sus discursos en otro vídeo que ha sido bastante viral también, donde se ve al presidente en un discurso y se ironiza sobre ello (no os puedo decir más porque no hay subtítulos y no se entiende lo que se dice en él, pero para haceros una idea lo podéis ver debajo).
Desde otra aproximación y óptica, los juegos que mezclan noticias, llamados newsgames se pusieron de moda a principios de presente siglo cuando Gonzalo Frasca creó September 12th (2003) y Madrid (2004). Con el tiempo, este formato se ha ido perfeccionando y volviendo más complejo. En relación al conflicto sirio, Endgame Syria (Auroch Digital, 2013) es un juego de simulación donde la facción rebelde, a partir de diferentes fases y acciones, debe intentar conseguir apoyo internacional, reducir la influencia del régimen del presidente Bashar al Assad y de paso acabar con él, en base a una mecánica de juego sencilla.
Interfaz del proyecto Endgame Syria
Su creador, Thomas Rowlings, comenta en este vídeo que se interesó en realizar un juego sobre la guerra porque hay un elemento común en ambas cosas al que se puede sacar mucho jugo: ambos representan sistemas dinámicos cambiantes. Y si lo pensamos bien, esto es cierto: un juego tiene una reglas que varian con cada elección del usuario y en una guerra sucede más o menos lo mismo.
El problema mayor para este newsgame se presentó cuando, más allá de la versión web, se crearon versiones móviles para Android y Apple. Android no puso problemas pero Apple determinó que el juego violaba sus directrices y no permitió su publicación en Appstore. Podéis acceder al juego en versión web aquí.
Como reflexión final, y antes de explicar el próximo proyecto, dejo sobre la mesa lo siguiente para la reflexión y que participéis, si os apetece, en el debate en las redes: hay cierta gente que opina que un juego no puede simular un problema del mundo real. Con cada nuevo medio y el campo informativo eso ya ha ocurrido en el pasado: si nos fijamos en la historia, la llegada de la televisión dio otra dimensión a las noticias y a los reportajes de investigación, y el miedo de la profundidad de los informes hizo temer en más de una ocasión de este nuevo medio y sus formatos más “peligrosos” para los secretos de estado o cosas que debían permanecer ocultas en la sombra.
Y podemos aplicar la misma ecuación a la llegada de Internet, un medio democratizador que posibilita que todo el mundo pueda decir la suya, que todo el mundo sea escuchado. Personalmente creo que cada medio tiene sus propios recursos para expresar y representar la realidad a su manera, por lo que no creo que uno sea mejor o más indicado que otro. Cada uno puede aportar y enriquecer la conversación a su manera y con sus activos, y eso la narrativa transmedia lo ha entendido y aplicado la perfección en los últimos años.
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